¡Sangre Sucia!.... No me dejes (chicaxchica)

Run, Ron, Run.

Keyla tembló cuando Ron la abrazó.

Tenía una lucha interna en ese preciso momento, no logro tocar tierra firme cuando una parte ella se había arrepentido de dejar atrás a Harry y a Hermione, pero la otra parte sentía que había hecho algo por ella misma por primera vez en mucho tiempo.

La lluvia se volvió incluso más fuerte y los brazos de Ron no eran suficientes para evitar en frío. Levantó la cabeza mirando la casa y después miro a su amigo.

- Allá pueden recibirnos... - Murmuro Keyla y Ron asintió.

Corrieron hasta la casa para tratar de ocultarse de la lluvia más rápido y Keyla tocó el timbre esperando que ellos siguieran ahí.

- ¿Quien es? - Pregunto una voz femenina del otro lado de la puerta y Keyla suspiró aliviada.

- ¡Cassie! Cassandra Lupin. - Respondió la de cabello ahora bicolor gracias al negro que se estaba volviendo a apoderar de su cabeza.

La puerta no tardó en abrirse, la mujer se sorprendió al ver a dos adolescentes sucios y con notables marcas de haber estado heridos.

- Entren, entren. - Dijo rápidamente y Keyla tomo a Ron del brazo para hacerlo entrar a la casa. Se quedaron en la entrada mientras Carrie cerraba la puerta. - Cassie, por dios, mírate, ¿Que ha sucedido?

- Es... Una larga historia, Carrie. Pero no sabía a dónde más venir. - Habló Keyla sosteniendose con fuerza de Ron. - Él es un amigo, Ron... Me está ayudando.

- Quitense esa ropa, se van a enfermar. - Ordenó Carrie. - ¡Brian, baja y trae un conjunto de ropa! - Gritó y escucharon como el chico contestaba desde las escaleras. - Hace mucho no te veo... Y sigues igual.

Keyla sonrió débilmente, mientras Carrie subía rápidamente las escaleras para bajar ropa para ella.

- ¿De dónde conoces a estas personas? - Preguntó Ron en voz baja una vez quedaron solos en la sala.

- Cuando escape de la mansión después de que Voldemort la tomara, ellos me acogieron aquí. - Explicó brevemente, para que Ron pudiera recordar lo que Keyla le había dicho hace ya un buen tiempo. - Pero ellos no saben quien soy.

- Eso me di cuenta. - Murmuro Ron. - ¿Por qué nos trajiste aquí?

- Quería irme y fue lo único que se me ocurrió - Contestó Keyla viendo a Carrie llegar de nuevo.

- Tengan, sequense. - Hablo la mujer pasando un par de toallas a cada uno.

- Gracias, señora.- Habló Ron mirando a la mujer.

- Oh querido, puedes llamarme Carrie.

Ron miro a Keyla como si buscará apoyo, pero ella estaba secándose el cabello y no lo veía. Solo sonrió algo incómodo antes de quitarse la chaqueta.

Brian bajo con una pijama extra en los brazos confundido por la petición de su madre. Se paro en el último escalón quedando pálido al ver a Keyla pero su mirada se perdió cuando vio a un pelirrojo iluminado por la luz del atardecer que se asomaba por la ventana.

- Brian, ¿Recuerdas a Cassie? - Preguntó Carrie viendo a su hijo paralizado en la escalera.

- Ajá... - Respondió cortamente. Keyla lo miro nerviosa pero cuando noto que Ron se había llevado toda la atención sonrió levemente.

- Él es mi amigo, Ron. - Lo presentó Keyla.

Ron sacudió su cabello y miro al chico castaño que estaba en la escalera mirándolo fijamente.

- ... Hey. - Saludó Ron confundido y el chico sonrió.

- ¿Y eres tú el que se va a poner mi ropa? - Preguntó con un tono que a Keyla se le hacía conocido.