Sing of The Times

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Keyla dejo ir a Harry y Hagrid hasta el cuerpo de Dumbledore que se encontraba tirado a los pies de la torre de Astronomía.

Sus ojos ardían porque quería seguir llorando, tratar de quitarse su tristeza de encima más rápido, pero cada segundo algo más le recordaba porque debía llorar.

"Yo estaría orgulloso si fuera su padre" "fue su error"

Mordió su labio pensando en Snape, se lo habían dicho muchas veces, ella misma sabía que no debía querer o confiar mucho en una persona. Aún así incluyo a Snape en ese círculo que considera familia, lo incluyó a pesar de que no era el mejor amigo de su padre, a pesar de que todo apuntaba a que llegarían a ese final.

Lo atacó, él la atacó, lucharon, se miraron con tanto dolor que Keyla se estaba torturando de tan solo recordarlo. ¿Por qué seguía esperando que llegara y la abrazara diciéndole que no dejaría a la que consideraba una hija? ¿Por qué Snape tenía que ser así de frío y misterioso como para verla destruida y no hacer nada?

Es que ella no aprendía, no era la primera vez que algo que amaba se iba. Ya había estado en esa posición antes y todavía no aprendía.

Para su dolor, no podía pensar en querer tirarse de la torre y acabar con su sufrimiento... Porque se lo prometió a Snape.

Ahora encontraba el sentido al cambio de la promesa. Ya no tenía que estar viva si él lo estaba. Ahora tenía que estar viva sin importar lo que pasara.

Snape lo sabía, él sabía que la iba hacer sentir tan miserable y la quería atar a ese sufrimiento por todo el tiempo que fuera posible.

Después de un rato en que veía a Hagrid y a Harry llorar sobre el cuerpo de Dumbledore que ella no sé atrevía a mirar, sintió una mano en su hombro que le decía que era hora de irse.

- Mcgonagall nos quiere en la enfermería... - Murmuro Ron acariciando con cuidado el hombro de Keyla.

- Yo estoy bien. - Dijo Keyla apenas sin molestarse en limpiar su rostro.

- No puedes mentirme, pero ella quiere que todos vayamos. - Murmuro Ron bajando su mano por el brazo de Keyla para tomar su mano. - Ven...

Keyla no se opuso, solo siguió a Ron hasta Harry, quien tampoco parecía muy atento a dónde los llevaba el pelirrojo. La mente ambos estaba muy ocupada y triste como para pensar en otra cosa en ese momento.

Con la mirada en el piso, Keyla caminó con los otros dos chicos por los pasillos hasta llegar a la enfermería.

- Ron, ¿Quien más está muerto? - Pregunto Harry.

- Nadie de nuestro lado, solo unos heridos. Bill fue atacado por Greyback, pero está bien. No sabemos bien los efectos secundarios de ser atacado por un hombre lobo que no está transformado.

- Pero los otros...Había otros cuerpos en la tierra

- Neville y el Profesor Flitwick están heridos, pero Madame Pomfrey dice que estarán bien. Y hay un mortífago muerto, fue golpeado por una maldición asesina del rubio alto que estaba disparando por todos lados. Si ustedes no nos hubieran las pociones de la suerte, hubiéramos Sido asesinados.

Llegaron a la enfermería. Neville yacia aparentemente dormido, en una cama cerca de la puerta. Hermione, Pansy, Theo, Blaise, Ginny, Luna, Tonks, y Lupin estaban agrupados alrededor de otra cama cerca del final de la sala.

Hermione y Pansy fueron las primeras en correr hasta ellos cuando escucharon las puertas.

Keyla recibió con fuerte abrazo a su amiga aún con lágrimas corriendo por sus mejillas. Pansy no dijo nada, le dió una rápida mirada de preocupación a su novio antes de tomar la cara de su amiga entre sus manos y La limpio con cuidado.

¡Sangre Sucia!.... No me dejes (chicaxchica)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora