Cold [✓]

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—¿Y ahora por qué no comes? —Preguntó mi mamá bufando ligeramente.

Mis ojos se llenaron de lágrimas que luché por no dejar caer.

—Mateo volvió al colegio, y me afecta verlo. —Dije jugando con las manzanas en mi plato.

Miré la hora, por suerte hoy no iba tarde.

—Ay, hija. No te pongas así, vos tenés que saber hasta donde dejás que te afecten las cosas. —Dijo mi madre y negué con la cabeza.

—¿Cómo tendría eso sentido? No es como si yo quisiera que me afectara. —Dije y ella sonrió suavemente.

—Me refiero a que, a veces, bajo esas cosas que nos abruman podemos hacer algo al respecto. Nos podemos convencer a nosotros mismos de que sentimos o no algo. Debes distraerte. Me alegra justo por eso que la relación con tu papá haya mejorado, pero, haz más cosas. Conseguí nuevos amigos, salí con un nuevo chico..

—Ay no, no podría salir con un nuevo chico y menos en este momento. El amor es un caos. —Dije.

—El amor es muchas cosas. —Dijo mi mamá. —Pero, definitivamente, el significado del amor no varía por nada ni por nadie. No podés pensar hoy que el amor es bonito, y mañana, al ser traicionada, cambiar de opinión sobre lo que el amor es. El amor es muchas cosas, pero sobre todo, es real. Tu mente puede decir que el amor es una mierda, pero su corazón puede contradecirlo antes de que siquiera tu mente pueda terminar con esa frase.

Sonreí conmovida por sus palabras, tenía toda la razón.

Luego de despedirme de ella, caminé hasta el colegio con mas ánimos. Hoy me había maquillado al menos, y por supuesto, había peinado mi cabello.

Estaba mal que le siguiera prestando tanta atención a Mateo, pero era inevitable.

Entré al salón en cuanto llegué y caminé hasta hacerme en mi puesto. Una mierda porque ahora tendría que sentarme con esos hijos de puta que antes eran mis amigos. Pero bueno, ayer no jodieron, espero que hoy tampoco.

Miré atenta a Mateo que estaba en el escritorio de el profesor, mientras tenían una conversación que parecía frustrar a Mateo.

Probablemente las consecuencias de haber faltado un mes entero al colegio.

Pobrecito mi vi..

La puta madre, Melisa. Todo mal con vos amiga.

—Melisa. —Dijo el profesor.

Alcé mi mirada desde mi puesto y vi que me miraba fijamente desde su asiento. Mi corazón se descontroló completamente al chocar también con la mirada de Mateo que seguía a su lado.

—Venga por favor.

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No saben como las amooo❤