Cold [✓]

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Me levanté y me reí mientras sostenía el vaso en mis manos.

Hoy me sentía muy bien. Hace un mes que había pasado todo eso con Mateo.
Solo bastó una secuencia de actos idiotas por parte de Mateo para aprender a hacerlo a un lado.

No lo creerían, pero el chico tímido de mejillas tiernas, se había convertido en un chico problemas.

Le estaba yendo cero bien en el colegio y mantenía metido en problemas con los profesores, prácticamente por la única razón de no hacer nada y dormirse cada tanto en todas las clases.

Yo seguía teniendo los mimos problemas de mierda con mis compañeros, pero faltaba poco para acabar el año.

¡Y hoy era una buena razón para estar contenta! Era viernes.

Estaba en una fiesta con Alonso, terminamos volviéndonos realmente amigos.

—Ya tomaste mucho, dale. —Dijo él riendo.

Era verdad. No estaba muy ebria pero si tomaba más lo estaría.

Le pasé el vaso y bailé al ritmo de la música. Creo que me iba muy bien mi estado con esa canción.

La verdad que me ponía feliz haberme liberado de ese sentimiento.
Ahora podía verlo sin derretirme o irritarme. Ahora no mantenía con mis ojos puestos en él o en lo que haría.

—¿Vamos a casa ya? —Preguntó él después del rato.

—Sí. —Dije ya cansada.

Ambos nos metimos en un Uber y Alonso le dio la dirección para ir a mi casa.

Llegamos en poco tiempo y salimos del auto, luego de pagar, caminamos hasta mi casa.

Toqué la puerta y miré el reloj. Eran las 2 a.m. Me di cuenta de que claramente mi madre estaba dormida y yo debí haber abierto con mis llaves.

Ojalá no se haya despertado.

Saqué las llaves de mi bolso y abrí la puerta lentamente.

—¿Pasas? —Le pregunté.

—Está bastante tarde como para hacerte una visita. —Dijo y yo reí antes de rodar los ojos.

—Es para que te quedes a dormir, como vos dijiste ya está muy tarde. Solo por hoy, dale. —Insistí.

—Bueno, solo por hoy. —Dijo antes de entrar.

—Ajá. —Dije medio sarcástica y reí bajo con él.

Cerré la puerta suavemente para no hacer ruido, y de forma silenciosa también, subí las escaleras junto con mi amigo.

Nos adentramos en mi habitación y yo cerré la puerta con seguro.

—Ponete cómodo. —Dije mientras me sacaba la ropa.

Alonso le ha visto antes con bikini, así que me daba lo mismo que me viera en ropa interior.

Me puse la pijama y me tiré a la cama.

—¿Te molesta que me quede en boxer? —Preguntó.

Negué con la cabeza y el asintió antes de sacarse la ropa.

Apagamos la luz y nos acomodamos en la cama, para luego cubrirnos con la manta.

Miré a Alonso que fue cerrando los ojos.

—Abrazame, eu. —Dije algo nerviosa.

Sonreí cuando sentí su brazo pasar por mi cintura y abrazarme a él.

Holass.

Vean la letra de la canción eh.