Mateo
—Vas a perder el año. —Dijo Camilo mientras caminábamos al aula.
—Creeme que es lo que menos me
interesa ahora. —Le dije.—Y es exacta esa la razón por la que estoy tratando de que reacciones. Te tiene que importar. —Dijo Camilo.
No quise hablar porque él se pondría a discutir conmigo y ahora no tengo ganas de discutir.
Sinceramente no tengo ganas de nada.
Ha pasado ya casi dos meses desde que me enteré de la enfermedad de mi tía, y me deprime que no tenga mejorías.
No tengo las fuerzas para seguir con mi vida. El fin de semana pasado fui a ver a mi papá, lloré mucho y me deprimió más pensar en que la última vez que fui había sido con Melisa, convencido de que le amaba.
Sí, estoy seguro de que la amaba. Por más que me mienta a mi y la engañe a ella, sentí miles de cosas por ella.
Y como bien dijo, las cosas terminaron mal por mi culpa.
Me alejé ante porque temí que en algún momento terminara peor.
—Y deja de meterte en problemas. —Dijo Camilo mirándome antes de entrar al salón.
No podía evitarlo, todo me estresaba últimamente. Antes me pasaba todo por la chota, ahora no puedo mantener el control ante cualquier comentario.
Entré al aula y apreté mis dientes al ver a Lorenzo discutiendo con Melisa en el fondo del aula.
Como me molestaba ese pibe, me tenían harto que estuvieran a todo tiempo molestando a Melisa.
No la quiero defender porque tiene que dejar de ser mi asunto, y porque no quiero que se ilusione.
Estaba por dirigirme allá atrás cuando vi a Melisa muy alterada pero me negué a hacerlo.
Ayer la “defendí” bajo la excusa de que tenía sueño y no me dejaban dormir.
Caminé hacia mi puesto, descargué la mochila y no pude evitar volver a mirar hacia allá.
Tomé aire cuando vi que él empujó el pecho de esta con su dedo índice.
—Mateo, no. —Dijo Camilo cuando comencé a caminar hacia éstos, más hice caso omiso a sus palabras.
Mi bronca aumentó cuando al acercarme escuché que la llamó “puta” y le pegué un puño en la cara.
Misma razón por la que nos peleamos la otra vez, cuando él se hizo la víctima diciendo que yo me le había tirado de la nada.
No, se puso a provocarme diciéndole puta a Melisa y no pude evitar golpearlo.
No se lo expliqué a Melisa porque en ese tiempo era muy sensible a sus “amigos” y sabía que ella había tenido algo con él, por lo que guardé silencio.
Lorenzo se levantó molesto y tras devolverme el golpe, iniciamos una pelea más.
Fuertes declaraciones ahr.
<3
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Cold [✓]
FanfictionEn 'Cold' Melisa se aventura en un romance adolescente lleno de drama al entrometerse en la vida del chico callado de su salón, quien al parecer tiene un corazón frío. Novela llena de cliché, romance, drama y comedia.