Capitulo 126: El verdadero sentido de la profecía.

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*Daisy*

Me despierto confusa y miro acusadoramente a James. Ayer, después de que el chico nos dijese que Nico y Reyna iban a morir, lloré hasta quedarme dormida; lo que significa que hoy tengo un dolor espantoso de cabeza y los ojos me arden. No tenía pensado levantarme en muchos, muchos días.

Me incorporo con una mueca y observo como la chica de cabello rizado - creo que se llama Ruby - pelea contra alguien. Su oponente es asombrosamente ágil y rápido, completamente atlético. Su forma de evitar los disparos de Ruby y su perfecto control sobre su larga lanza me indican que sabe lo que hace.

Cuando Ruby se da cuenta de que sus flechas no surten efecto, lanza el arco y el carcaj a un lado y agarra la espada de Kaitlin, la chica pelirroja.

Corre hacia la figura y comienzan a pelear de nuevo, pero esto solo hace que se haga más evidente la destreza de su oponente en combate. Es increíble, nunca he visto a nadie pelear así.

Esquiva todos golpes de Ruby sin apenas esfuerzo y ataca sin realmente atacar. Se nota que solo detiene sus ataques, no busca hacerla daño.

Y esto es realmente impresionante.

Yo misma he luchado contra Ruby y es excelente. Su punteria es envidiable y su destreza con la espada, admirable. Razón por la cual, me choca tanto el hecho de verla en semejante desventaja.

Al poco tiempo de pelear, la figura bloquea la espada de Ruby y la lanza volando lejos. Ella cae sobre el suelo y el extraño apunta a su garganta con su lanza. La capucha que viste le oculta gran parte de la cara, pero soy capaz de ver su sonrisa arrogante.

Neil, el chico de los ojos como un caleidoscopio, se levanta con rapidez y sitúa su espada entre los homoplatos del encapuchado.

- ¿Quien es? - pregunta James poniéndose de pie.

Se acerca a la figura y le quita la túnica. Ahogo una exclamación cuando veo la plateada ropa de las cazadoras y el bello rostro de Thalia Grace, con su corto cabello negro y sus penetrantes ojos azules.

¿Quien si no es ella podría pelear tan bien?

- ¿Thalia? - jadea Jason a mi lado - Oh, mierda - gime tapandose el rostro con las manos.

Thalia le mira indignada y frunce los labios con disgusto. Se gira hacia Neil y hace una mueca de desagrado en su dirección cuando al tratar de apartar la espada que la apunta, él se limita a poner su espada aún más cerca de ella. James le hace un gesto a Neil para que suelte a Thalia y ella se sacude la ropa con superioridad mientras le mira por encima del hombro. Se gira de nuevo hacia su hermano y sus ojos relampaguean, como si de dos tormentas se tratase. Thalia inclina su rostro levemente hacia un lado y frunce el ceño, claramente no contenta con las palabras dichas por su hermano.

- ¿Perdona? - le dice a Jason - ¿Que clase de reacción es esa al ver a tu queridisima hermana?

Veo como Jason esboza una pequeña sonrisa y el rostro de Thalia se suaviza, aunque no mucho. Su oscuro cabello le oculta un poco del rostro, haciendolo parecer duro como la piedra.

- ¿Es tu hermana? - escupe Kaitlin con incredulidad.

Ella está sentada al lado del chico que me apuntó con la espada delante de las puertas de la muerte, a quien Nico golpeó. Su brillante y llamativo cabello está recogido en un descuidado moño y tiene grandes ojeras bajo los ojos. Estos días ella ha estado cuiadando de él y sanando las heridas infrigidas por Nico, lo que ha provocado una falta de sueño evidente en ella. Por el día se dedica a sanar sus heridas, y por la noche le es imposible dormir a causa de los constantes quejidos por parte de él. Casi podría decir que siento lástima por ella.

El hijo de la muerte (Nico di Angelo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora