*Daisy*
Llamo con los nudillos en la puerta de madera oscura y carcomida y entro decidida en cuanto escucho un adelante proveniente del interior.
- Hola - digo agarrando a Nick y James para que no se vayan.
- ¿Ah? - el Señor D levanta la cabeza de una revista y nos mira con desagrado - Perdeos un rato y dejadme tranquilo, ¿no hay suficientes monstruos en el bosque..?
- Es sobre eso, Señor - dice Nico muy cortésmente, más de lo que se merece Dionisio.
- ¿A que te refieres, mocoso? - pregunta despectivamente.
- Los monstruos han... cambiado - dice con una mueca.
- ¿Y a mi qué? - nos fulmina con la mirada - Soy un dios, un Olímpico. ¿Como osais si quiera molestarme con semejante estupidez?
- Pero señor... - empiezo.
- Ni una palabra más - me corta - a molestar a Quirón, a mi ni os atrevais a volver con idioteces, u os convertiré en una mata de uvas y serviréis por fin de algo.
Asiento y llamo a la puerta de Quirón antes de entrar.
- ¡Daisy! - se levanta y se acerca - ¿Que hacéis aquí?
- Tenemos que hablar contigo - digo - Bueno, tienen.
Quirón se sienta sobre sus patas traseras y les hace un gesto a los chicos para que empiecen.
- El otro día iba paseando por el bosque - empieza Nico - y me encontré con unos cuantos monstruos. En condiciones normales; habría podido matarlos sin problemas, pero estaban distintos. Era como si tuvieras que matarlos por primera vez - Nico respira hondo - En su primera encarnación...
- Eso no es posible - murmura conmocionado Quirón - esos existieron hace miles de millones de años, solo podría ocurrir si... - abre los ojos desmesurada mente - Dioses, esto es más horrible de lo que creía...
- ¿Que ocurre, Quirón? - pregunto - ¿Que pasa?
- No puedo deciroslo - murmura - pero me da la impresión de que dentro de poco lo acabareis averiguando.
- Si - James se rasca la nuca incómodo - también hay otra cuestión que quería aclarar contigo.
Quirón le mira con curiosidad.
- Pues veras, a veces, cuando peleo contra un monstruo estando en verdadero peligro pasa algo extraño.
- ¿En que sentido?
- En que la espada de James parece una bola de discoteca - dice Nick con una sonrisa.
- ¿Podrías ponerte serio una vez en tu vida? - le dice Nico entre dientes fulminandolo con la mirada - Esto no es gracioso.
- ¿Perdona? - Nick le mira mal - ¿Ahora vas a decirme tú que puede o no puede parecerme gracioso? - su incredulidad es patente.
- Si es necesario, lo haré - escupe con desprecio mi novio.
El ambiente se vuelve tenso mientras ambos se dedican a fulminarse con la mirada.
- Está bien - interrumpe Quirón un poco incómodo - James, intenta explicarlo lo mejor que puedas.
Nick y Nico dejan de mirarse claramente molestos. Bufo.
Chicos, ¿quien los entiende?
- Pues que da igual la espada que coja - empieza James - el filo de la hoja empieza a brillar y una niebla de tonalidades azules, moradas y negras la cubre entera. Cuando toca un monstruo; incluso ahora que son reales les mata al instante. Sé que es algo bueno; pero no entiendo por que ocurre.
- Pero eso es imposible - dice Quirón tras unos minutos de silencio - No puede ser.
- Siento decilo, Quirón, pero eso es lo que pasa.
Quirón se levanta y se acerca a la pared.
- Esto es peor de lo que pensaba, tengo que hablar con Zeus ya mismo. Esto no puede continuar así... - murmura de espaldas a nosotros.
Nos levantamos y salimos de la Casa Grande ignorando aposta al Señor D. Veo a Nicole acercarse corriendo a Nick y James y hablar animadamente con ellos.
- ¿Porque no vamos con ellos? - pregunta Nico mirando a Nicole con una sonrisa.
- Es que... - hago una mueca cuando me quedo en blanco.
No puedo decirle a Nico la verdadera razón por la cual no quiero ir con ella.
- No me digas que estas celosa - estalla en carcajadas.
- No es gracioso - me cruzo de brazos - Y no, no estoy celosa.
- Pareces celosa - se acerca a mí sin perder la sonrisa.
- Tal vez no lo estaría si no me dieras razones para estarlo - gruño algo enfadada.
- Oh cielo, no tienes de que preocuparte.
- ¿Ah no? - arqueo las cejas incrédula - Ayer te fuiste TODA la tarde con ella, ¿que quieres que piense..?
- Me recuerda a Bianca - me interrumpe.
- ¿Qué? - pregunto.
Me esperaba miles de respuestas por su parte, pero os aseguro que esa no.
- Estoy con ella porque me recuerda mushísimo a Bianca - dice serio.
- Pero tu hermana...
- También tenía los ojos negros y el pelo castaño, Daisy. Era fuerte, muy fuerte, al igual que Nicole - supira - No puedo evitar pensar en mi hermana cada vez que la veo. Recordarla cuando tenía 12 años. ¿Sabes que? Estoy seguro de que si no hubiera muerto ahora sería así. Bueno, si no hubiera muerto y no se hubiera unido a las cazadoras, por supuesto.
- Yo... - murmuro - no lo sabía, Nico.
¿Sabes que es más penoso que sentir celos de la hermana de tu novio? Sentirlos de la chica que el considera una hermana.
- Ya sé que no lo sabias, amor - me abraza - A de más, estas super tierna cuando te pones celosa.
Me separo de él y le fulmino con la mirada.
- La próxima vez que me pongas celosa, te lo pondré yo a ti; y te aseguro que vas a arrepentirte de haberlo echo.
- ¿Es una amenaza? - pregunta con una sonrisa.
- No - niego seria - es una advertencia, Nico. Y va muy enserio.
- Esta bien, amor - me sonríe - nunca más te volveré a poner celosa, pero en mi defensa diré que esta vez no lo he echo a posta - levanta las manos.
- Lo sé - sonrío - por eso aún sigues aquí.
Enarca una ceja sorprendido y divertido, probablemente ignorando mi advertencia.
Me agarra de la mano y tira de mi hacia donde está Nicole.
- Hola Daisy - me saluda efusivamente.
- Hola Nicole - la sonrío.
- Nico - lo llama James - Ayer cuando fuisteis a ver las cabañas para saber hacia cual se sentía más atraída, ¿que cabaña fue?
- No sé - Nico sacude la cabeza - se sintió atraída hacia las nuevas cabañas: Thánatos, Hypnos, Iris, Hécate, Némesis, Hebe, Tyche y Nike.
James asiente y mira a Nicole.
- Entonces solo nos queda esperar a que te reconozcan.
- ¿Como sabes que me van a reconocer? - dice con miedo.
Todos hemos pasado por eso; por el momento en el cual crees que nadie te reconocerá porque no eres importante para nadie.
- Lo harán - le asegura Nico - Todos lo hacen.
Nicole le mira a los ojos un rato y finalmente acaba asintiendo; aún un poco asustada.
- Vale - asiente - está bien.
- ¿En serio? - le pregunta James preocupado.
- Si - Nicole asiente - Perfecto.
Me encanta Nicole :3
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El hijo de la muerte (Nico di Angelo)
FanficUn chico perseguido y acosado por toda clase de monstruos y pesadillas sacadas de los mas horribles libros de terror. Una chica que vive en la ignorancia. Sus problemas son mas livianos, pero no del todo triviales. El destino ha decidido juntarles...