Adulterio

TRAGEDIA

Nadie de las autoridades pudo conectarse con Mateo, el joven había desconectado el teléfono de línea y apago su celular para que su tía no lo moleste, la policía intento conectarse con el unas veces más y nada. Aunque la noticia llego a los medios y no saben quien llevara a cabo el velorio.

Se le hizo la autopsia y se llego a la conclusión de que falleció de un infarto, luego prepararon su cuerpo para que su sobrino se haga cargo de la decisión que tome con su cuerpo, si velarla o solamente cremarla.

En esos instantes, Olivia está preparando el desayuno en compañía de su esposo y un brazo de Guillermo envuelve su cintura. Los dos están tan contentos que no pueden dejar de sonreir, la noche que tuvieron fue perfecta y Guillermo no para de darle mimos. Ella termino de poner los bizcochos y unas tostadas en la mesa, su marido le sirve el té y se sienta, le da un beso en su mejilla y sonríe antes de cambiar de canal. Guillermo vio una noticia de los medios que intento cambiar pero ya fue demasiado tarde. Olivia lo vio y su respiración se cortó.

–¿Qué?

Dieron la noticia del fallecimiento de Isabel y se llevo una mano a su boca mientras observa el televisor.

–No puede ser. –Nerviosa.

–Amor. –La toma suavemente de las manos y la mira con calma.

La mujer no sabe en que pensar, ¿Qué le paso? ¿Por qué tuvo el infarto? Un montón de pensamientos atravesaron su mente y su cabeza hizo un click al escuchar que nadie puede comunicarse con Mateo. Guillermo apago el televisor de inmediato y Olivia se siente horrible, aguantando las ganas de vomitar.

–Tranquila amor. –La reconforta con sus brazos y ella niega.

–¿Cómo puedo estar tranquila? Le dio un infarto, Guillermo. Se que algo paso entre ellos y se que estuve en el medio.

–Por favor cariño, ya no te sientas más culpable. Ese chico necesita ayuda y es una tragedia que haya pasado esto pero no quiero que te sientas culpable por algo que no hiciste.

Su esposa traga saliva y ella lo abraza con fuerza, apoyando el rostro en su pecho y se queda en silencio, le duele tanto que Olivia se sienta culpable cuando no lo es, acaricia suavemente su espalda y besa su cabeza. Guillermo no puede dejar de pensar que todo va de mal en peor.

Mateo está encerrado en su habitación y no tiene ganas de levantarse, se siente tan mal de animo que solo quiere permanecer todo el día acostado, alejado del mundo que solamente le hace daño.

No conecto su teléfono, no encendió su celular y no prendera el televisor. Está encerrado en sus pensamientos, sin saber que hacer para que Olivia lo vuelva a querer. Cuanto hubiera deseado que esto no hubiera pasado nunca, fue tan feliz en el mes que paso por ella que quiere volver a ese tiempo y poder tenerla entre sus brazos.

Suspira con tristeza y cierra los ojos, buscando conciliar el sueño. Pudo dormir un rato pero lo despertó el timbre, no se levanto de la cama al saber de que se trata de Isabel, ignora el timbre que volvió a sonar y después de unos segundos escucho una voz que sonó con fuerza.

–Policia.

Frunció el ceño mientras se sentó en la cama y se levanto sin fuerzas, camina lentamente hacia la puerta, la abre y se sorprende al ver a dos policías del otro lado de la entrada. Tardo un momento en hablar mientras los observa de arriba abajo.

–¿Qué quieren?

–¿Usted es familiar de Isabel Fortunato?

–¿Qué paso? –Dijo sin entender porque están ahí.

–Su tía falleció ayer, queremos que nos acompañe a la morgue con urgencia.