Estamos a poca distancia de nuestro destino, el capitán así lo dijo "un día como mucho".
— ¿Qué piensas que estarán haciendo Matthew, Erick y Joy?— los extraño un montón.
— Están con tu madre, al menos Joy lo está— me responde Louis. Mamá aceptó con gusto quedarse con ellos—, Matthew y Erick deben estar en la ciudad con Philip.
— Pronto Erick cumplirá catorce— digo con nostalgia—, le llevaré algo de por aquí, seguro le agrada.
— Entonces yo llevaré para Matthew y Joy.
— Sí— y pienso en ellos, de verdad los extraño mucho—, la siguiente los traemos a todos, escogiendo una buena temporada para viajar en barco.
— ¿Sabes que ambos han hecho amistad con algunos jóvenes del pueblo?— dice para calmarme.
— Sí— ellos mismos me lo dijeron y cuando fui a visitarlos los vi en persona, me agradó demasiado.
— ¿Y también sabes que Erick gusta pasear con una muchacha?— Louis está tanteando el terreno, lo conozco y sé que intenta provocarme.
— Él mismo me lo dijo— no me sorprende su noticia—, déjalo que haga amistad.
— ¿Sabes de quién se trata?— de eso no tengo idea y niego con la cabeza— ¿recuerdas a aquellas tres muchachas que te rodearon el primer día que volvimos a la ciudad?— asiento, ellas dejaron una fuerte impresión en mí— es la menor de ellas, debe tener doce años.
Y la recuerdo con claridad, perece como si fuese ayer que ella y sus hermanas vinieron a rogarme ayuda— hace amistad con ella, no me molesta— respondo y Louis sonríe.
— Yo creo que tu hijo quiere algo más que amistad— me sigue provocando.
— No lo presiones, es solo un muchacho y ella lo es más— él pone cara de triunfo—, si quiere hacer amistad está bien, si quiere algo más entonces debe esperar, no quiero que mis hijos se casen antes de los veinte, y no quiero que alguien meta en sus cabezas que eso es bueno— hablo por mamá y Louis.
— Yo no les meto nada— lo dice a la defensiva yes relativamente verdad—, pero a tu madre no le hará gracia la idea.
— No hagas conclusiones precipitadas— mi bebé ha despertado y balbucea adentro—. Si alguno de mis hijos lo ve por conveniente, yo apoyaré su decisión.
Llegamos al puerto casi al amanecer, el viaje ha sido largo y estoy más que satisfecha al bajar.
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Dueña de mi Libertad
Historical Fiction"Tú no eres esclava de nadie y nadie decide por ti" esas fueron las últimas palabras que me dijo papá antes de morir. A pesar del tiempo no puedo comprender su mensaje y estoy dispuesta a aceptar las pesadas reglas que me impone la sociedad en que n...