Capítulo 36

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NARRA DAMIAN

—¡NO ME LO PUEDO CREER! —me gritaba Demetrius, volviéndose loco.

—¡Hago lo que puedo, pero no responde a mis llamadas...! —intenté explicárselo—. ¡Debe de tener el móvil apagado!

—¡NOOO! ¡MI QUERIDA CUÑADITA...! —decía él a punto de llorar.

Me desesperé y decidí bajar las escaleras para decírselo a mis padres.

Les conté todo. Y ellos, al enterarse de todo, decidieron llamar a la policía para que fueran en su busca.

—¿Pero cómo ocurrió esto? —preguntaba mamá atemorizada.

—Pues... estábamos los dos en el lago de la academia cuando... Luka llegó y...

Se me aguaron los ojos. Me sentía terrible conmigo mismo.

—Hijo... —me dijo papá—, ¿ese tal Luka era su novio, cierto? ¿Acaso se llevó a Anya por la fuerza?

Asentí.

—¡No debí quedarme parado! ¡Es que... —miré a mis padres— Luka me amenazó con que si me veía junto a ella una vez más, lo acabaría lamentando!

Mis padres se miraron mutuamente con una expresión de miedo.

—¿Por casualidad... ese tal Luka no será...? —preguntó mamá.

—¡ESE IMBÉCIL ES UN MALDITO CONTROLADOR QUE...! —exclamó Demetrius acercándose adonde nosotros—. ¡ES QUE LO SABÍA! ¡SABÍA QUE ESE CAPULLO SERÍA UN PELIGRO PARA MI CUÑADITA!

Siguió llorando.

—Demetrius, tranquilízate —le pidió mamá—. Los policías acabarán encontrándola. Lo único que debemos hacer es mantener la calma.

Demetrius sollozaba.

—Anya..., mi querida y preciosa cuñadita... Solo espero... que estés bien... —susurraba él mientras se dirigía a su cuarto—. Si... si te llegara a pasar... a pasar algo..., no sé... lo que podría hacer...

Yo estaba al borde de las lágrimas también. Me culpaba constantemente por haberla dejado sola así sin más. Debí haberla ayudado. PROMETÍ QUE LA PROTEGERÍA.

Apreté los dientes y corrí a mi cuarto. No sabía durante cuánto tiempo me quedé encerrado en mi habitación, pero lo que tenía más que claro era que no iba a ir a la excursión. Encontraría a Anya cueste lo que me cueste. ¡No iba a parar de buscarla hasta encontrarla!

Encendí mi móvil y decidí informarles a mis amigos de lo que había pasado.

Ken: ¡¿QUÉ?!

Esta vez ninguno de mis amigos perdió el tiempo mandando GIFs ni emoticonos.

Becky: ¡ESTO TIENE QUE SER UNA BROMA!

Ewen: ¡Jefe!, ¡¿esto es cierto?!

Yo: No es ninguna broma... Pensamos que Luka secuestró a Anya.

Mira: ¡ESE MALNACIDO!

Emile: Entiendo que no es el mejor momento para preguntar, pero... ¿quién es ese tal Luka?

Becky: Amor, ¡Luka es el novio tóxico de Anya!

Ewen: ¿Eso... está confirmado?

Ken: ¡CLARO QUE LO ESTÁ! ¡ESE IDIOTA LITERALMENTE LA SECUESTRÓ!

Yo: Yo soy el mayor culpable de todo esto... Debí haberla protegido...

Lloré sin parar.

Mira: Dami, hiciste lo que pudiste.

Léeme - Damian x AnyaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora