Capítulo 94

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NARRA ANYA

—Léeme.

«¿"Léeme"? ¡¿Léeme?! ¡¿Cómo que "léeme"?!», repetí en mi mente, alterada. «¡¿Qué intenta decirme con eso?!».

—¿Có... cómo? —pregunté tartamudeando.

Damian se acercó más a mí.

—Léeme la mente, Anya.

Abrí los ojos de par en par.

«¿Que... que le lea la mente? ¿Desde cuándo me ha pedido que le lea la mente?», pensé atónita. «Está tan serio... No dejo de preguntarme lo que querrá decirme con tanta insistencia... ¡Tengo mil y un ideas en mi cabeza, pero todas y cada una de ella me atormentan demasiado!».

—¿Que te lea la... mente? —pregunté sin asimilarlo—. ¿Qué intentas de... decirme?

Él sonrió, tomó mis dos manos y cerró los ojos.

—Cierra los ojos y léeme la mente —me pidió.

Me sonrojé un poco.

«Es tan mono...», pensé antes de cerrar mis ojos también.

Mientras tenía los ojos cerrados, podía escuchar a los alumnos correteando, hablando y divirtiéndose por todas partes. Los pájaros cantando en los árboles y sus hojas moviéndose debido al viento. Escuchar todo eso me tranquilizaba mucho.

Luego, estaban nuestras manos agarradas la una de la otra, lo cual también calmaba mucho el ambiente. Hacía que todas mis preocupaciones se resbalaran de mi cuerpo, tranquilizándome considerablemente.

Todo marchaba bien, todo se sentía como el paraíso, sin embargo, no duró mucho. Sobre todo, al escuchar lo siguiente:

«Anya, te quiero».

~~~

NARRA BECKY

—¿Vosotros sabéis dónde está? —pregunté a muchos alumnos. Me negaron con la cabeza, así que empecé a dar vueltas y vueltas por los alrededores—. ¡Ni siquiera se molesta en contestarme a los mensajes! ¡Ughhh!

«¡Pues le llamaré! ¡Si no me contesta a los mensajes, le llamaré!», pensé, decidida.

Saqué el móvil del bolsillo, apunto de realizar la llamada, cuando alguien apareció, arrebatándome el móvil de las manos.

Me di la vuelta, asustada, pero me relajé enseguida en cuanto vi que se trataba de Andrew.

—¡Qué susto me has dado! —dije aliviada.

—¡¿Es que eres tonta o qué?! —soltó él mirándome seriamente.

—¡¿Perdona?!

—¡¿Ibas a llamar a Anya?!

—Sí. ¡Hace más de diez minutos que no la veo!

—¡¿Y no se te ha pasado por la cabeza el porqué?! —dijo él suspirando.

—¿Eh?

—¡Desmond se le va a declarar a Anya ahora que se va! ¡¿Acaso pretendes interrumpirles?!

Me dejó sin palabras.

~~~

NARRA DAMIAN

«Anya, te quiero», pensé e inmediatamente abrí los ojos, sin poder creerme lo que acababa de hacer.

Fue eternamente largo verla abrir los ojos y mirarme, sin saber cómo interpretar la cara que había puesto.

Nuestras manos temblorosas seguían unidas.

Léeme - Damian x AnyaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora