109. Arrepentida

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Clarke Griffin estaba encogida en la cama del hospital donde había sido trasladada durante la noche desde la prisión de Bradford Creek, y temblaba con una de sus muñecas esposada a la barra de la cama y con la otra mano libre sujetando parte de su abdomen doblada sobre si bajo las sabanas.

Tenía tanto frío, era como si la habitación entera estuviese helada pero era solamente la fiebre propagándose por su cuerpo esperando encontrar alguna fuente de alivio que no llegaba.

Los minutos le parecían horas, como si estuviese anclada en aquel retortijón. Le habían hecho pruebas y analíticas desde que llegó y algunos de sus niveles resultaban preocupantes porque mostraban una arraigada y profunda infección.

Notaba su hígado inflamado bajo la piel y este dolía, ardía y punzaba.

Abby había logrado que le permitiesen verla después de suplicar a algunos de los guardias, pero habían sido dos o tres escasos minutos en lo que le hacían otra analítica.

El corazón de Abby había muerto un poco al ver a su pequeña así, pero se había roto en cuanto la escuchó llamarla suplicante entre lagrimas por el delirio de la fiebre.

También llamó por Lexa después. Arrepentida de haberle hecho cuanto le hizo, lamentando todo por cuanto había pasado por ella. Era como si la vida se lo estuviese cobrando por otro lado, y con saña.

Había tenido tiempo para ponerse en el lugar de Lexa en prisión y lo que había sido capaz de sentir no le había gustado nada. ¿Era así cómo ella había vivido durante tanto tiempo? ¿sola? ¿aislada del resto del mundo? ¿llena de dolor? ¿físicamente herida?

Cuantos más pensamientos le venían sobre ella, más se maldecía a si misma. Tan egoísta, tan cruel, incapaz de sentir esa empatía hasta el momento en que su cerebro y su cuerpo lo sufrían.

Puede que esa no fuese la razón más válida del mundo para sentirse así pero ahora lo comprendía.

Entendía que lo que había hecho estaba mal, que Lexa no se merecía nada de lo que le paso y que debía compensarla de algún modo aunque tuviese que dedicarse a ello el resto de su vida.

Eso es lo que quería.

E iba a remover cielo y tierra con tal de conseguirlo si es que sobrevivía.

Continuara...

La Fugitiva. Nuevos Comienzos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora