Veinticinco: Caos

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Justin Bieber


Caos, eso era lo que había a mi alrededor. La gente corría y yo estaba levantándome del suelo con rapidez con ayuda de Max. Su mano se posa en mi brazo y tira de mí para que empiece a correr.

Mis piernas se mueven con rapidez y cruzamos la carretera, ya que los coches están parados por lo que acaba de pasar.

La gente corre con miedo a mi alrededor al igual que yo. El miedo está en cada parte de mí, mis extremedidades temblorosas y mis ojos llenos de lágrimas, transmitiendo miedo y preocupación.

Ni siquiera sabía que había pasado.

Entro en el hall del hotel y me giro cuando Max lo hace. — ¿Dónde están? —pregunta histérico.

El corazón se encoge en mi pecho y miro a mi alrededor intentando buscar a esa pequeña chica que estaba a mi lado hacía un momento.

Miro a la salida y ella aparece corriendo junto a Joe. Luce asustada, sus rodillas están raspadas y me acerco a ella corriendo para abrazarla. Estrecho su cuerpo contra el mío y la separo de mí, mirando su cuerpo.

— ¿Estás bien? —pregunto.

Ella asiente confusa y mira hacia atrás. — Está bien —escucho a Joe—, ella está bien. Los acompañaré a la habitación, quédate abajo y habla con la policía —le ordena a Max.

Joe pone su brazo alrededor de los hombros de Alissa y me hace una seña para que los siga.

Miro mis manos temblorosas y paso una de ellas por mi cara intentando ordenar en mi cabeza lo que ha pasado.

La gente empezó a agolparse a nuestro alrededor y estaba intentando de conseguir un poco de espacio cuando oí un disparo. Me había agachado y había sonado otro haciendo a la gente gritar.

Max me había sacado de allí antes de darme cuenta qué estaba pasando.

Entro en la habitación y me siento en el sofá mientras respiro hondo. Paso una mano por mi pelo y miro a su guardaespaldas.

— ¿Qué mierda ha pasado? —pregunto alterado.

— No lo sé —responde Max cogiendo su móvil.

— ¿La gente está bien? —pregunta Alissa— Tenemos que bajar por si necesitan ayuda —se levanta.

— No, no —Max la sienta de nuevo poniendo la mano en su hombro—. Tú te quedas ahí. Voy a bajar.

— Max... —Alissa se levanta.

— Justin —dice Max mientras se dirige a la puerta. Me levanto y pongo mi mano en el brazo de Alissa para que no siga a Max.

— Es mejor que nos quedemos aquí. ¿Estás bien? —vuelvo a mirarla de arriba abajo.

— Estoy asustada —murmura y pasa una mano por su pelo, nerviosa—. Quiero saber qué ha pasado, no he visto nada, yo no...

— Shhh —la atraigo a mi pecho y rodeo su pequeño cuerpo con mis brazos—. Todo ha pasado, estamos bien. Nos informarán cuando sepan algo, ¿vale? Solo haces que me ponga histerico.

Siento sus dedos arrugar mi camiseta. — Lo siento.

Beso su coronilla y froto su espalda tranquilizandola. — Te dije que no era buena idea salir.

Ella se separa un poco de mí y sus ojos llorosos se fijan en los míos. — No creo que hayas dicho eso —se separa de mí y se sienta en el sofá.

Suspiro pesadamente y ella pasa nerviosa sus manos por su rostro. Mi corazón aún va acelerado y estoy jodidamente preocupado por lo que ha pasado fuera.

Strangers - Justin Bieber Donde viven las historias. Descúbrelo ahora