6 (segunda parte)

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Alzo una de mis cejas cuando veo a mi acosador número uno con una rosa en su mano. Él tiene una sonrisa en el rostro y varias personas del equipo están mirando la situación, divertidos. Seguramente lleva un rato ahí esperando que llegase, ya que no le he contestado a ningún mensaje.

— Una flor, para otra flor —dice tendiéndome una rosa blanca.

— Yo no soy una flor —pongo las gafas de sol en mi pelo.

— ¿Entonces qué eres?

— Una rebelde sin causa —paso a su lado y le cojo la flor por el detalle que ha tenido.

— ¿Una rebelde sin causa? —Suelta una sonora carcajada mientras me sigue al camerino donde nos maquillan y visten, es decir, nos ponen guapos. Yo solía llamarlo "chapa y pintura".

Dejo el bolso a un lado y saludo para después sentarme en la silla y dejar que los maquilladores hagan su trabajo.

— ¿No te ha gustado? —Pregunta.

— No te has cortado el pelo —abro un ojo porque están maquillandome el otro.

— Nunca dije que me lo cortaría.

Hago una mueca y vuelvo a cerrar el ojo.

— ¿Hasta dónde quieres que te llegue el pelo? ¿Pocahontas?

— No he visto Pocahontas.

— ¿Qué clase de infancia has tenido?

— Las princesas Disney no eran mi prioridad. Ponedla fea —les dice a mis estilistas.

— No pueden ponerme fea porque soy guapa natural.

Él suelta una sonora carcajada y sonrío un poco. Dejo que me maquillen y hagan ondas en mi pelo, deseando grabar ya el videoclip y poder volver a casa a terminar de ver la serie.

Cuando salgo del camerino, Justin lleva puesta ropa de su tallla y admiro lo bien que le quedan los pantalones vaqueros. Su pelo va echado hacia atrás y niego con la cabeza acercándome a él.

— Vaya, estoy sorprendida, han conseguido poner en orden tu pelo.

— Y a ti hacerte ver sexy.

Llevaba un vestido corto con aberturas en la parte de mi abdomen. Tenía un bonito escote y flecos, muchos flecos para que se viera el movimiento en el video. El vestido se ajustaba a mi figura y los tacones hacían que se me vieran unas piernas largas que no tenía.

Me dirijo a donde tenemos que grabar y Justin se pone a mi lado para seguir las instrucciones del director. Teníamos que grabar el video dentro de un espacio y no movernos de ahí. Haríamos varias tomas, una de más lejos y depende de la coreografía  se acercaba la cámara o no.

Justin coge mi mano y acomodan mi pelo cuando ya estoy lista. Él está frente a mí y nos ponen la canción para que empecemos a bailar. Hay un foto iluminando detrás de nosotros, asegurándonos que sólo se veran nuestras siluetas.

Esto era más caliente que los ensayos a pesar de tener a más gente a nuestro alrededor. Era una persona, por lo tanto, sentía. Sentía el deseo. Sus manos recorriendo mi cuerpo, nuestras partes intimas chocando a veces y su nariz pasando por mi cuello eran una de las escenas que me tenían respirando pesadamente.

— Hace calor aquí —dice Justin cuando nos ordenan que paremos.

— Sí.

Él pasa su mirada por mi cuerpo. Me abrasa y me quedo quieta en el sitio.

— En la escena que vamos a repetir tienes que ser más dominante, Justin. Tu figura tiene que verse decidida. Que haya pasión entre los dos.

— ¿Más pasión? —Susurra riéndose en mi oído.

Strangers - Justin Bieber Donde viven las historias. Descúbrelo ahora