Day by Day

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El tiempo vuela. Los días pasan cómo si fueran minutos entre deberes escolares, deportes, trabajo a medio tiempo y la crianza de dos bebés, la agenda está demasiado ocupada. Pero siempre hay tiempo para relajarse de un buen modo, el modo sexy, por ejemplo. Mejor aún si JunMyeon está ansioso y necesita desatorar el nudo en su garganta, YiFan con gusto hará que su frustración salga.

El rubio gruñe al recibir plenamente las deliciosas atenciones de la boca de JunMyeon en su amiguito, lo sujeta firmemente del cabello no para imponer un ritmo, más bien por mero impulso, el castaño hace lo que quiere y al ritmo que más le gusta, desquiciándolo de a poco hasta el borde del clímax, dónde se detiene y con un último lengüetazo a su hombría, se acomoda sobre su pelvis sujetándose de sus hombros, YiFan lo toma de la cintura y lo ayuda a deslizarse hacia abajo sobre su eje, suspirando por la presión y calidez del cuerpo del mayor.

—J-Jun...

—Y-Yo me encargo... Tú sólo, ah... Déjame...

JunMyeon gime sonoramente cuando logra tomar toda la erección de YiFan en su interior, tira su cabeza hacia atrás y comienza a moverse con un ritmo constante, siempre enmarañando los rubios mechones del menor y suspirando su nombre. Claro que el ritmo no siempre se mantiene así, después de unos momentos todo se vuelve algo salvaje. Ahora JunMyeon trata de silenciar su voz mordiendo los hombros y el cuello de YiFan mientras le clava las uñas en la espalda y recibe uno que otro azote en las nalgas a la par que se mueve fervientemente sobre el pene ajeno, también tira del cabello del menor, le muerde la boca y solloza por más sin perder un ápice del ritmo frenético que ha impuesto.

El orgasmo estalla con violencia y YiFan da gracias a cada entidad satánica de que el reloj biológico de los gemelos los haga despertar a las 7:15, no hubiese estado de humor si los niños hubiesen interrumpido tal sesión de sexo caliente con JunMyeon. Le arde la espalda y de sobra sabe que su cuello y hombros son un nido de mordiscos y que tendrá que usar un cuello alto para cubrirlos, pero no se está quejando, es más, su lindo conejito debería frustrarse con más frecuencia.

—Eso estuvo maravilloso—dice JunMyeon elevando su cadera y separándose un poco de YiFan para después besarlo—Me siento muchísimo mejor, ahora tomaré un baño.

—Me siento usado, un juguete sexual, Kim JunMyeon.

El bajito ríe. —Te amo, Dramático.

Wu recibe una compilación de besitos en toda la cara, mimos y palabras dulces antes de que su pareja baje de la cama y entre felizmente al baño, definitivamente le gusta mucho el sexo cuando Jun está al borde del colapso, pero le gusta mucho más verlo tonteando y feliz.

A unos 25 minutos del departamento de YiFan y JunMyeon, JongDae en su bonito hanok también siente que el corazón se le saldrá del pecho y que posiblemente también escupa sus pulmones y su estómago, tal vez todos sus órganos. Lleva cinco minutos sin hacer nada bajo el chorro de agua helada, simplemente está allí, dejando que el agua caiga y recorra su cuerpo desnudo mientras se da golpecitos en la frente contra los azulejos. En eso está por dos minutos más antes de que MinSeok rodee su cintura con sus brazos y cierre la llave del agua, pegando su también mojado y desnudo cuerpo contra el suyo.

—Estás demasiado ansioso—MinSeok besa el hombro de JongDae mientras desliza sus manos a su entrepierna—Yo te ayudo con eso.

—Eres el diablo, Kim MinSeok.

—¿Necesitas una mano o no?

—¿Qué tal tu boca?

Segundos después de esa afirmación, MinSeok está arrodillado en las baldosas del baño, JongDae le tira con fuerza del cabello a la par que jadea por la habilidad oral del pelinaranja, dando gracias que la habitación de su hijo esté tres puertas a la derecha desde ahí porque no piensa conformarse sólo con la cálida boca de su pareja.

Good Parents (KrisHo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora