Eterno Amor

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Capítulo dedicado a Z00RRY

Especial día de las madres.

NARRA ENDERSON 

Me encontraba corriendo demasiado asustado como para mirar atrás, los rugidos a mis espaldas eran horribles y tan potentes que hacían vibrar el suelo a mis pies. Podía oír el aleteo con fuerza y sentir como el aire provocado por este rozaba mi cuerpo. 

Lo sentía justo detrás de mí, iba a ser devorado pero por suerte vi uno de los pilares principales cerca, corrí a ocultarme tras él. Mi plan funcionó, el malvado dragón se elevaba de nuevo. 

Miré los cubos de energía flotando sobre los pilares como en el que yo estaba oculto, tenía que destruirlos si quería tener una oportunidad de deshacerme de tal monstruo. Estudié los movimientos del dragón y cuando estuve seguro que no me miraba salí de mi escondite. 

Rodeé el pilar donde había estado oculto y quité uno de los bloques de abajo, la columna comenzó a desplomarse cayendo tan cerca de otra causando que también cayera. Así una tras otra se fueron cayendo provocando la destrucción de los cubos de poder. 

El dragón volaba intentando averiguar que pasaba, al verme sus ojos se prendieron en llamas. Volaba hacia mí, gruñendo listo para devorarme, estaba listo para teletransportarme cuando fuera el momento cuando sentí que alguien acariciaba mi cabeza. 

—Pequeño Enderson, es hora de desayunar. 

Exclamó mi madre con dulzura acariciando mi cabello esperando que despertara. Abrí los ojos y la miré haciendo un puchero. 

—Mamá, esta vez estaba a punto de matar al dragón malvado. 

Me quejé, ella sonrió divertida. 

—Mi pequeño, sabes que no puedes hacer eso, no debes. Es nuestro rey. 

Dijo, me senté a la vez que negaba con la cabeza. 

—No es cierto, si puedo. Además, un buen rey no sería tan cruel. 

Me quejé, ella sonrió. 

—Él nos cuida y protege. No dudaría ni un poco en arriesgar su vida si así salva la de algún otro enderman. Incluso si se trata de ti. 

Dijo a la vez que arreglaba mi cabello, pero negué de nuevo. Moví la cabeza con tal rapidez que volví a despeinarme. 

—Sólo quiere esclavizarnos. 

Dije, ella me miró curiosa. 

—¿Sabes qué significa esa palabra? 

Preguntó, me encogí de hombros. 

—Eneida te la ha enseñado, ¿verdad? Dime, ¿por qué crees que el rey Ender es malo? 

Preguntó, asentí acomodandome frente a ella. 

—Tiene a papá trabajando todo el día para él, construyendo esas horribles torres para ser más poderoso. No le interesa que seamos felices, que podamos estar juntos como familia. 

Respondí, ella sonrió. 

—El también sacrifica su tiempo y pasar tiempo con su familia para cuidar de nosotros. ¿No crees que también tiene ganas de jugar y ver crecer al príncipe Ender? 

Dijo, crucé los brazos molesto. No era lo mismo, mi papá nos quería mucho y el príncipe Ender era tan creído y malvado como su padre, no me sorprendería saber que no pierden nada estando separados.

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