NARRA COOPER
Ya estaba mucho mejor, aquellos días de dolor y de estar en cama eran sólo un mal recuerdo del ayer, ahora podía salir a correr y jugar con Pancho. Mindy había hecho nueva ropa para mí, aunque mi sudadera favorita aún me quedaba y me gustaba usarla, esperaba ya no crecer más para no dejarla.
También ahora podía visitar a mis amigos y a Cuppa, cuidar de Cander de nuevo y estar con Stevens y Elizabeth. Justo hoy me habían llevado a conocer la nueva casa de ella, estaba tan emocionado que sentía que iba a explotar, Stevens se dio cuenta y salpicó agua sobre mi cara.
El comenzó a reír nervioso disculpándose y yo estaba molesto y triste, pero Elizabeth hizo lo mismo con él, entonces los tres reímos y terminamos jugando en el agua hasta que comenzó a llover. Elizabeth fue a su casa mientras que Stevens y yo caminábamos hacia la casa.
—Fue divertido, Eli es graciosa.
Comenté mientras caminaba al lado de Stevens. Intentaba mantener a Pancho en mis brazos, pero como estaba mojado y él seco hacía lo posible por soltarse y poder bajar.
—¿Eli?
Preguntó, asentí con la cabeza.
—Elizabeth es muy largo. O quizá pueda llamarla Beth. Quizá primero debo preguntarle cómo le gusta que la llamen.
Respondí aún luchando por calmar a Pancho, como no miraba a Stevens mientras hablábamos no podía decir que podía estar pensando pero se quedó callado por mucho rato.
—Creo que estaremos en problemas al llegar a casa.
Comentó que cuando la casa comenzó a ser visible en la distancia, lo miré sin comprender.
—¿De qué hablas?
Pregunté, él me miró como si fuera obvio.
—Estamos escurriendo, ni siquiera Pancho quiere que lo lleves en brazos. Pienso que Enderson no nos dejará pasar.
Respondió, negué con la cabeza con seguridad.
—También es nuestra casa, no puede dejarnos afuera. Aunque probablemente nos regañe, siempre parece molesto.
Respondí seguro y lo último en un susurro. Él no respondió, no con palabras.
Llegamos frente a la puerta de la casa, ambos nos miramos sin decidirnos a llamar hasta que Pancho comenzó a cacarear desesperado.
—¿Acaso olvidaron cómo llamar?
Preguntó abriendo la puerta, Stevens sonrió nervioso pero enseguida bajó la mirada por el ceño fruncido del más alto.
—¿Dónde han estado y por qué vienen tan mojados? Acaban de estar resfriados hace poco y de nuevo llegan así.
Nos regañó, Stevens se encogió de hombros riendo nervioso.
—Es que tropezamos del puente que lleva a la casa de Elizabeth y caímos al agua, no fue nuestra culpa.
Mintió, Enderson negó con la cabeza probablemente sin creerle.
—Ambos vayan a secarse y cambiarse de ropa, prepararé la cena.
Ordenó, ambos asentimos y corrimos a nuestras habitaciones sin ganas de llevarle la contraria. En mi habitación dejé a Pancho sobre la cama y comencé a secarme para cambiarme de ropa, cuando estuve listo salí de la habitación deseando que Stevens también ya se hubiera secado.
Pancho salió corriendo hasta su plato que estaba lleno de semillas, comenzó a comer con emoción mientras yo observaba alrededor, no parecía que Stevens ya estuviera fuera de su habitación.
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Vida En Un Mundo Loco
FanfictionTercer parte de; "Una Vida Pixeleada", "Sobreviviendo en un loco mundo" y "Pixeles Sobrevivientes". Todo vuelve a la calma después de una larga lucha contra monstruos y poderosos enemigos, ahora nuestros amigos se disponen a reconstruir su hogar y r...