Siempre tú

Paulina omitió cosas

Capítulo 24

Paulina omitió cosas

Salí de esa casa echa un fuego, no podía creer como me hablaba de esa manera, me sentí humillada. Aparque mal, temblaba, llegue a mi departamento sintiendo la hiperventilación en el ascensor. No podía más, la tristeza se apoderaba de mí, observé mi celular y en ningún momento me llamo o me escribió, no sabían aún cuando iban a volver mis niños de su paseo, seguro preguntarían por mi. Me senté en mi sillón y prendí un cigarrillo, no solía fumar pero Virginia me dejó pasmada, ella jamás me habló mal en su vida, siempre fue atenta, claro no sabía que era su nuera y yo menos que había abandonado a su hija embarazada. Comencé a comprender que tal vez solo fue un reflejo por vernos juntas. En ese momento mi celular vibró, seguro era ella con una disculpas, mi linda chica. Para mi sorpresa solo estaba adjunto un contacto "Diego-Julián" era el número de Diego, ¿que extraño?, se lo respondí "Porque me envías el teléfono de Diego" marcó el doble tilde azul pero ella no respondió, volví a escribir y no, no llegaba mi mensaje, preocupada la llame y fui directo al buzón. Seguramente apago el teléfono. Me duche, me arregle un poco porque llevaba días trabajando y quería sentirme linda para mi chica y los niños, pero tal vez meditandolo no estuvo del todo bien irme de esa forma de la casa, pero lamentablemente no me agrado el trato de su madre y salí huyendo para no caer desmoronada frente a ellas. Volví a llamarla, la extrañaba íbamos a pasar el dia juntas, nuevamente al buzón era muy raro y por ende llame a Diego.

- Hola.

- María José ¿Cómo estás?

- Hola Diego, sisi soy yo, ¿Todo está en orden? Paulina me dio tu número.

- Los niños bien, dime ¿A qué hora te los llevo? están inquietos por su mamá.

- Emmm pensé que... sabes iré por ellos mejor e iremos a casa de Pau.

- No, mira a mi Paulina me indicó que tú te harías cargo hoy de ellos- o sea que me quedaba con los niños, no podía llevarlos a su casa, ¿Porque?

- Perfecto iré, pásame la dirección - hice como si nada, jamás hablamos de esto.

- Ya te lo envío en un mensaje.

Era extraño, Paulina no respondía, me había dejado a los niños. No debía consultarme si podía o no, eran mis hijos y me tengo que hacer cargo. Aparque en su casa y todo lucía apagado, volví a llamarla y nada. No tenía la llave pero note que realmente no había nadie, la alarma estaba encendida. Subí a mi auto y me fui directamente a lo de Diego, los hijos me necesitaban.

Llegue a casa de Diego, era un departamento muy de solteros, iba a esperar afuera pero él quiso que subiera, los niños jugaban con Julián a la consola y el me ofreció un café, era muy lindo conmigo.

- ¿Descansaron sin los niños no?

- Emm si, ellos son unos soles.

- Me imagino que volver a encontrarse debe ser maravilloso.

- No nos encontramos, solo estamos tranquilas por los niños. Sus madres.

- Ay perdón María José, pensé que... disculpa, pasa que Paulina es otra mujer desde que estás de nuevo en su vida, disculpa.

- Espera... - él había sido Bueno - ¿De verdad la ves diferente?

- Si por supuesto, mi hermana es un ser oscuro y calculador y contigo es una mujer de nuevo - Julián apareció de la nada y se sentó junto a mi.

- Bueno hoy fue tu madre a su casa, nos vio.

- ¿Cogiendo?

- Julian - Diego miro por si los niños escuchaban, pero no, estaban concentrados jugando.