𝗩𝗜𝗡

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La verdad estaba bastante emocionada cuando Vin me dijo que fuera a su casa en la noche, siendo sincera pensé que quería dar el siguiente paso en nuestra relación. Pero no fue así, desde que llegue no ha hecho más que enseñarme sus nuevas canciones de rap.

—¿Quién soy y dónde estoy? —canta mirándome esperando alguna reacción.

—Vin —interrumpo—. Durante una hora has cantado la misma canción.

—Tengo que mejorarla.

—¿Me invitaste para esto? —pregunto algo decepcionada.

—¿Y para que más?

—Claro —murmuro desviando la mirada—. El rap es lo más importante para ti.

—Por supuesto, es más importante que nada.

—¿Más importante que yo? —pregunto frunciendo el ceño.

—No lo sé —responde dudoso acomodándose las gafas.

—¡Qué! —grito molesta y tomo mi bolso—. Pues quédate con tu música, de todas formas, cantas como un retrasado.

—¡Qué! ¡Cómo te atreves a criticar mi música!

—¡Me voy! ¡Y me iré escuchando las canciones de Duke! —aviso alzando mi teléfono, sé que eso lo molestará.

—¡Su música es una mierda! —grita enojado—. ¡Nadie escucha a esa basura!

—¡Tú lo haces! ¡Crees que lo haces en secreto, pero todos lo saben! —confieso en un grito notando como se pone rojo.

Cierro la puerta y me marcho furiosa, si su música es más importante que se quede con ella, como se atreve a decirme eso. Miro el cielo y por un momento me arrepiento de irme así, el cielo esta oscuro al igual que las calles, pero nada malo podría pasarme ¿verdad?

Saco mi teléfono para distraerme y escuchar la nueva canción que lanzó Duke.

Pero me lo quitan de las manos, levanto la mirada furiosa y hay un tipo que lo revisa como si fuera suyo.

—¡Hijo de puta! —grito tratando de quitárselo, pero alguien me toma por la espalda.

Me rio para mis adentros y aplico la técnica que me enseño mi mejor amiga. Me aferro a su brazo y lo volteo dejándolo tirado en el suelo.

—Entrégalo —ordeno al tipo que me mira asustado—. Te haré lo mismo si no me lo entregas.

—No debimos subestimarte —murmura guardándolo en sus bolsillos.

—¿Debimos? —pregunto volteándome para ver a varios tipos acercándose—. No importa estoy segura que...

Mis palabras quedan en el aire cuando siento que me golpean en la nuca con algo pesado, luego repiten la misma acción, pero en mi espalda dejándome caer al suelo.

Cuando estoy por cerrar los ojos veo la figura de Vin acercándose con unas flores, parece que las arranco del jardín de algún vecino, pero no deja de ser un gesto bonito.

—¡Oye! —grita corriendo hacia mí ignorando a los tipos.

Me ayuda mientras trato de ponerme de pie, pero me quedo de rodillas en el suelo cuando siento una presión en el estómago, suelto un quejido y vomito en el suelo.

—¿Estás bien? —pregunta sujetando mi cabello.

—No es para tanto —digo restándole importancia girándome a verlo y pone una expresión de horror, me limpio los labios con la mano y al mirarla la veo llena de sangre, cuando miro al suelo noto que vomité nada más que sangre.

—¡Bastardos! —grita poniéndose de pie mientras deja a mi lado las flores con cuidado—. ¡Cómo pudieron lastimar lo más importante que tengo!

Mientras sigo sintiéndome adolorida veo que los chicos que me atacaron se reúnen en grupo con intenciones de pelea.

—¡Vin! —grito preocupada, pero me ignora, parece estar fuera de sí mismo.

—No se preocupen. Ustedes también vomitaran sangre toda la noche.

Es la primera vez que lo escucho decir eso en una pelea, pero después de ese día, se volvió una frase habitual en él.

𝗟𝗢𝗢𝗞𝗜𝗦𝗠┊𝗢𝗡𝗘 𝗦𝗛𝗢𝗧𝗦 ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora