𝗟𝗢𝗢𝗞𝗜𝗦𝗠┊𝗢𝗡𝗘 𝗦𝗛𝗢𝗧𝗦 ✔️

𝗞𝗘𝗡𝗧𝗔

Que aburrimiento, cuando no funciona el circo no hay nada interesante que hacer.

—Estoy aburrida y me duele la garganta —me quejo mirando a Mitsuki—. Hoy tú animarás el circo.

—Está bien —acepta—. Pero distrae Ryuhei para que hoy no me moleste.

Mientras Mitsuki revisa unos papeles yo me maquillo para matar el tiempo, por el espejo me doy cuenta de la presencia de Kenta en la habitación.

—¿Puedo hacerte las cejas? —pregunto volteándome amablemente y luego me arrepiento—. Perdón, el aburrimiento me hace decir estupideces.

Toma asiento en la silla a mi lado.

—Estoy aburrida, háblame de ti —pido cruzándome de piernas.

Me observa raro.

—Mitsuki no me habla mucho de las personas que incluye aquí —susurro mirándola molesta. —Tú llevas mucho tiempo con nosotros y nunca hemos hablado, deberíamos conocernos un poco.

Como no dice nada hablo yo primero.

—Yo estoy aquí porque mi mejor amiga se obsesionó con un hombre y quiso arrastrarme a esto.

Sigue en un silencio dramático que me mantiene en suspenso.

—Park Jong Gun.

—¿Qué? —pregunto sintiendo que se me va el aire.

—Es el nombre de la persona que me quiero vengar —explica.

—¿Estás aquí por venganza? —inquiero mirando el suelo.

—Él acabó con todo lo que tenía —confiesa—. Yo intenté hacer lo mismo.

—¿A qué te refieres? —confundida lo miro asustada.

—Yo lo admiraba mucho, por eso sabía que tenía una chica que quería y...

Comienzo a toser preocupada, probablemente me atraganté con mi propia saliva.

—¿Estás bien? —consulta dándome un vistazo—. Pareces sorprendida.

—No... no es eso... bueno si estoy sorprendida, pero... —tartamudeo torpemente tratando de encontrar una excusa.

—Le sorprende que alguien como Gun tuviera una pareja —interviene Mitsuki ayudándome.

—Tengo entendido que tenían algo serio —menciona con algo de sorpresa—. Quería encontrarla y matarla para vengarme de él.

No sé si es porque le faltan las cejas o de verdad no muestra ningún tipo de expresión en lo que me dice.

—Ella no tenía la culpa —argumento tratando de controlar mi respiración.

—Lo sé, pero era la única forma de lastimarlo —dice frustrado—. Tal vez aún pueda encontrarla y utilizarla para que Gun salga de su escondite.

Me tomo la cabeza preocupada, definitivamente necesitaba salir a tomar aire.

—Bueno, al parecer Gun acabó con tu familia... —murmuro apenada mientras me pongo de pie—. Y sé que no sirve de mucho... pero nosotros ahora somos tu familia.

Se queda en silencio observándome impresionado.

—Ninguno aquí tiene familia... —comento con la mirada en el suelo—. Al menos tenemos algo parecido a eso.

—Entonces, si somos familia... —duda un poco en continuar—. Voy a protegerte.

—¿Por qué me protegerías? —pregunto seria.

—Pareces ser buena.

—No creo que tengas que protegerme de algo en este lugar —digo con una sonrisa—. Pero gracias Kenta.

Supongo que no deberá saber que yo soy la chica que intenta matar.