𝗝𝗔𝗞𝗘 / 𝗦𝗔𝗠𝗨𝗘𝗟

5K 597 118
                                        



—¿Quiere que la acompañe? —pregunta mi chofer mirando con desconfianza la calle de Big Deal.

—No te preocupes, no creo que me pase nada malo —hablo dudosa.

Bajo del auto y me acerco al primer chico que veo, está de espaldas, pero creo que es el sujeto que choqué el mismo día que me reencontré con Jake.

Toco su hombro delicadamente. —Disculpa...

—Si quieres ver ropa, anda con las chicas —dice sin mirarme.

—En realidad busco a una persona, podrías ayudarme-

—¿Tengo cara de querer ayudarte? —interrumpe cortante.

—Perdón, no quería molestarte —me disculpo asustada por su agresividad.

El sujeto voltea a verme y su expresión cambia por completo.

—No, tranquila, ¿a quién buscas?

—Busco a Jake —respondo sorprendida por su cambio de actitud.

—Está ocupado.

Leo nuevamente la dirección que Jake me dio hace unos días, y nuevamente siento que el sujeto me mira.

—Perdón que sea directa, pero... ¿Por qué me miras así? —consulto esperando que no sea descortés—. El día que choqué contigo también me miraste extraño.

—Tu rostro me es familiar —contesta sin inmutarse. —Eso es todo.

Lo analizo en silencio, mirando sus rasgos faciales.

—El tuyo también —susurro inconscientemente.

Se sorprende de lo que digo.

—De casualidad... ¿Ayudaste a un niño que molestaban cuando eras pequeña?

—Eso creo —cierro los ojos tratando de recordar con exactitud—. No me digas que... ¡Eres ese niño! —me tomo la cabeza tratando de recordar su nombre—. ¡Samuel!

Se queda en silencio.

—¿Eres él?

Asiente con la cabeza.

—No te reconocí —admito mirándolo de pies a cabeza—. Estás muy cambiado... Y tatuado.

Se ríe por lo que digo.

—Me sorprende que me reconocieras —comento asombrada.

—Cómo olvidar a la niña que estaba desesperada por encontrar un padre para su gatita.

—¡Tenía ocho años! —grito avergonzada.

Me cubro las mejillas para ocultar mi vergüenza.

—Dejamos de vernos, pero espero que no te hayan seguido molestando.

—Dejaron de hacerlo —murmura mirando su puño.

Por la forma en que mira su puño supongo que eligió la violencia para detener las burlas.

—Entonces... ¿Eres novia de Jake? ¿O también lo ayudaste cuando era pequeño?

—¡No! —exclamo divertida—. No creas que soy una especie de samaritana que ayuda a cualquiera.

—¿No ayudas a cualquiera?

Niego con la cabeza.

—Entonces... ¿Por qué me ayudaste aquella vez?

—No lo sé —me encojo de hombros—. Supongo que sentí empatía por ti.

Analizo nuestro alrededor decepcionándome al no encontrar a Jake.

𝗟𝗢𝗢𝗞𝗜𝗦𝗠┊𝗢𝗡𝗘 𝗦𝗛𝗢𝗧𝗦 ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora