𝗟𝗢𝗢𝗞𝗜𝗦𝗠┊𝗢𝗡𝗘 𝗦𝗛𝗢𝗧𝗦 ✔️

𝗠𝗨𝗡𝗦𝗘𝗢𝗡𝗚

Camino por el pasillo junto a Hobin, aunque ni siquiera me presta atención porque está muy concentrado mensajeándose con Bomi.

Me distraigo cuando miro el salón viendo como hay un único estudiante dentro, que lo único que hace es dormir. Me acerco para despertarlo amablemente.

—¡LEVÁNTATE ESTÚPIDO! —grito pateando ligeramente la mesa.

Levanta la mirada y se ve triste, me siento mal por despertarlo de esa manera, pero no creo que este así por eso.

—¿Qué estabas haciendo? —me pregunta decaído.

—Pasando el rato con Hobin —contesto tomando el asiento frente a él—. ¿Qué te pasa? Te ves triste.

—No me pasa nada —suspira mirando por la ventana.

—Vamos Munseong, puedes confiar en mí.

Me observa dudoso, creo que ya entiendo lo que sucede. Se siente mal por la relación de Bomi y Hobin, y no me quiere decir nada porque piensa que diré algo.

—Sea lo que sea puedes desahogarte conmigo.

—Lo que pasa es que... hay una chica que me gusta.

—Eso es romántico —digo mirando el cielo a través de la ventana.

—No lo es, porque a ella le gusta Hobin.

—Escucha Munseong sé que te sientes mal por eso, pero no debes sentirte así —lo tomo por la mandíbula girando su rostro para obligarlo a mirar por la ventana—. Ahí afuera debe haber un montón de chicas que quieren conocerte.

—¿Y aquí?

—¿Aquí? —pregunto inclinando el rostro confundida.

—¿Aquí hay alguna chica que quiera conocerme?

Miro de reojo el salón, notando que estamos solos.

—No lo sé, yo ya te conozco —bromeo riéndome nerviosa.

—No hablo de eso.

—Entonces habla claro y dime que quieres decir —pido esquivando su mirada.

—Tu... ¿quieres conocerme mejor y tal vez...?

—Escucha Munseong, yo no quiero ser la segunda opción de nadie —lo interrumpo abruptamente—. Sé que te gusta Bomi, y no creo que la hayas superado en tan poco tiempo.

—¿Segunda opción? ¿De qué hablas? —cuestiona levantando las cejas.

—Aunque me gustes no dejaré que me utilices para olvidarte de Bomi.

Mierda, no debí decir eso.

—Pero... ¿No te gusta Hobin?

Finjo que vomito antes de responder. —Por supuesto que no, es como un hermano para mí.

Se rasca la cabeza confundido antes de sonreír levemente.

—Entonces nunca te gustó Hobin —afirma más para sí mismo.

—Ya te dije que no —repito negando con la cabeza—. Y sobre lo que dije antes... ja ja ja sabes... a veces digo cosas que...

—Escucha, hace mucho tiempo que Bomi dejo de gustarme —confiesa sentándose derecho.

—¿Hace cuánto? —pregunto curiosa.

—Hace unos tres meses.

—¿Tres meses? —inquiero con una risita—. Ese es el tiempo que llevo en este colegio desde que me transfirieron de... ¡No!

Lo miro impactada.

—¿La chica de la que hablabas? —me detengo un momento para procesar la situación—. ¿Soy yo?

Aparta la mirada mientras asiente con la cabeza.

—¿Yo también te...?

—¿Cómo debería llamarse nuestro Shipp? —pregunto repentinamente interrumpiéndolo. —¿Deberíamos llevar atuendo de pareja? ¿Ahora puedo ir a tus entrenamientos y apoyarte?

Me mira sorprendido por lo que acabo de decir, pero finalmente solo se ríe.

—Lo del atuendo de pareja puede ser ahora —observo como se retira la sudadera que lleva y me la entrega—. Tengo otra en mi bolso.

Emocionada me pongo la sudadera notando lo enorme que me queda, pero no importa me gusta la ropa holgada.

—Sabes... pudiste entregarme la sudadera de tu bolso —me burlo notando como una gota de sudor recorre su rostro—. No era necesario darme esta, aunque no me quejo —murmuro embriagándome con el olor de su perfume.

—Entonces somos...

—Si —digo nerviosa mirándolo con una sonrisa.

—¿Deberíamos...?

Asiento como respuesta y lo veo reclinarse de su asiento, yo lo imito de y de esa manera quedamos a centímetros, tan solo un poco y...

Ambos damos un salto en nuestros asientos cuando suena el timbre anunciando que el receso terminó. Nuestros compañeros ingresan al salón rápidamente, así que me veo en la obligación de volver a mi puesto original mientras me despido dramáticamente de Munseong.

—Supongo que al finalizar las clases...