Capítulo 79

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6 de Enero de 1945

Subí la colina al día siguiente, apenas me levanté. Había esperado a que Jackson se fuera para poder preparar algo de comida rápida, y ya me encontraba caminando para encontrarme con Stiles y Liam.

Me asomé por la cima, y me sorprendí cuando no estaban en el mismo lugar de siempre. Pensé que quizás todavía estarían durmiendo.

Fui caminando hacia la casa de Stiles, y me sorprendí más cuando lo vi a Stiles apoyado contra la puerta de esta, ladeando un poco la cabeza, con un aire a cansancio. Liam se encontraba pasándose la pelota de una mano a la otra, y se notaba que se encontraba sin ganas.

- ¡Hey! -dije con una media sonrisa. Estos se giraron a mi, ambos elimando cualquier expresión y sonriendo.

Liam corrió hacía mi y me abrazo con fuerza, entrelazando sus manos en mi cintura, suspiró.

- Te extrañé, Lydia... -susurró y sonreí agachándome para besar su mejilla sonoramente, él rió.

Me levanté para mirar a Stiles, este sonrió y me tomó por la cintura para besar mis labios tranquilamente. Tenía el rostro demasiado cansado.

- Puedo... Saber ¿que ocurrió? -dije levantando las cejas y cruzándome de brazos.

Stiles asintió, con los ojos cerrados. Me preocupé al verlo tan cansado y me senté a su lado. Dejé que apoye su cabeza en mi hombro.

- Liam... Pesadillas... No dormir... -bostezó él.

Me giré levemente para mirarlo y así besar su frente.

- Liam, ¿que hay de ti? -pregunté mirándolo. Él asintió bostezando-. ¿Tienes sueño?

- Un poquito... -respondió.

Liam tomó mi mano y lo acerqué hasta la cama de Stiles. Me recosté sobre la cama, apoyando mi espalda contra la pared. El niño se acostó encima mío.

No tomó mucho tiempo que Liam se quedara dormido, considerando lo cansado que había estado. Lo acomodé bien en su cama, sin dificultad alguna, y luego me volví hacia Stiles, quien me miraba sentado en una silla, con ojos cansados. Estiré mis manos y el las tomó. Lo ayudé a levantarse y lo guié hasta la habitación de su padre, la cual todavía me provocaba terror. Se acostó en esta, y me atrajo para que me acostara junto a él.

Su cabeza quedó más abajo que la mía. La escondió en mi vientre, abrazándome. Acaricié su cabello.

- ¿Qué pasó, bombón? ¿Puedes contarme? -le pedí.

Él escondió su rostro un poco más sobre mi vientre, parte de mi sentía que se estaba acomodando mejor para luego empezar hablar.

- Liam... No durmió casi nada ayer -empezó él, acaricié su cabeza lentamente-. Él se despertó de una pesadilla y se puso como loco, empezó a gritar que te quería aquí, que vendrían por él y... Luego se escapó, abrió la puerta de la casa y salió corriendo por el bosque, Lydia... Sentí un susto horrible.

Hice una mueca imaginando su desesperación, esta vez agregué mi otra mano sobre su cabello, para desordenarlo.

- Cuando lo encontré fue cerca del lago, y Dios, Lydia... Estoy asustado de que lo vuelva a hacer -susurró esta vez enterrando más su rostro-. Quiero que este a salvo, quiero protegerlo.

Lo separé de mi cuerpo y me bajé hasta su altura. Acaricié la mejilla que estaba despegada a la cama. Besé su frente. Él envolvió mi cuerpo con sus brazos.

- Lo resolveremos, ¿sí? -le dije, con una sonrisa- Quizás pueda quedarme aquí esta noche...

- Jackson se daría cuenta -objetó él, de una forma que se notaba que lo estaba lamentando.

Love on a Hill || StydiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora