21 de Febrero de 1945
Al llegar a la cima de la colina, Stiles se acercó corriendo a mí. Me recibió con una sonrisa pura, quizás debido al avance que habíamos logrado.
Sin tomar mi mano, me hizo una seña con la mano para que lo siga. Caminamos hasta apoyarnos en un árbol, como de costumbre.
Lo notaba algo tenso, bastante nervioso para decir verdad. Parecía haber algo que lo estaba inquietando, y por más que quisiera, no sabía cómo ocultarlo.
- ¿Cómo estás? -me preguntó. Nuestros brazos se rozaban, pero no llegaban a tocarse del todo.
- Bien, ¿y tú que tal estás?
- Bien, bien. Ahora que te veo, mejor -se encogió de hombros. Sonreí débilmente. Su comentario había logrado darme ternura.
Miré hacía abajo cómo su mano se movía por encima de su regazo. Era un acto nervioso que estaba tratando de calmar, pero cómo de costumbre no le salía bien.
Stiles fue nervioso desde el primer día en el cuál interactuemos y para haber pasado bastante tiempo desde entonces... Él no había cambiado aquello, para nada.
- ¿Realmente estas bien? -pregunté. Él abrió los ojos rápidamente y se giró a mi para asentir-. Te ves... Algo nervioso, no lo sé.
Stiles abrió y cerró la boca, llevando su mano a su nuca, rascó esta para luego desordenar su cabello.
- Es que... Verás, hay algo... Algo que me esta asustando y yo... -llevó sus mano a su regazo de nuevo esta vez-. Tengo miedo a que preguntarte aquello... Pueda ponerte mal.
Apreté los labios y bajé la vista mínimamente.
- Sólo dilo -hablé hundiéndome de hombros, mordiendo levemente mi labio.
- Eh... Yo, esto... -soltó un suspiro y se tiró hacía atrás del árbol-. En serio no quiero incomodarte.
Hice una pequeña mueca, pero finalmente moví mi mano hacía la suya que estaba en su regazo. Separé los labios y cerré los ojos tratando de calmarme al sentir cómo me volvía a empezar a costar.
Finalmente logré lo necesario y entrelacé sus dedos, sintiendo aquel buen sentimiento en mi estómago esta vez y no ese terror que solía darme cuando me tocaban.
Me giré hacía él y traté con todas mis fuerzas lograr una sonrisa para que se sintiera mejor.
Stiles soltó un suspiro de una forma bastante pesada, como si le estuviera costando respirar. Sonrió y pude jurar que casi suelta un sollozo.
Su sonrisa se ensanchó en el momento que empecé a acariciar el dorso de su mano con mi pulgar. Cerró los ojos, concentrándose sólo en eso.
- Puedes decirme -le dije esta vez, tratando de darle más confianza para hablar.
Stiles apretó los labios. Bajó la mirada.
- ¿Hay alguna posibilidad de que estés embarazada? -soltó rápidamente, como si quisiera que aquel momento terminara lo antes posible.
Me tensé enseguida y maldije interiormente por reaccionar de aquella manera. Stiles se dio cuenta y fue él quien acarició con ganas mi mano.
- Lo siento, lo siento... No debí... -empezó a desesperarse. Negué con la cabeza y le di un apretón a nuestro agarre.
- No estoy embarazada -le conté, tratando de tranquilizarlo-. Es naturalmente imposible que esté embarazada de Jackson.
Stiles soltó un suspiro de alivio, como si acabara de sacarse un peso de encima.
ESTÁS LEYENDO
Love on a Hill || Stydia
RomanceLas esperanzas de vida de Lydia son pobres. Las de Stiles también lo son. A pesar de que compartan aquello, sus vidas son totalmente diferentes. Cuando sus caminos se crucen, se darán cuenta de que eran exactamente lo que necesitaban para ser feli...