Capítulo 113

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29 de Marzo de 1945

Con lágrimas en los ojos y con el corazón apretándose en mi pecho, me desperté. Me quedé sentada sobre la cama y traté de regular la respiración. No podía acordarme qué era lo que estaba soñando, pero sabía que era sobre algo que me estaba atormentando y no me dejaba tranquila.

Al sentir mi cuerpo moverse junto al suyo, Stiles se incorporó a mi lado, despertándose de golpe. Me sentí mal enseguida al haberlo despertado, ya que sabía que había estado durmiendo mal y lo único que yo quería era que descanse un poco. Sus manos fueron inmediatamente hacia mis brazos y los acarició. Me susurró palabras tranquilas mientras yo me tiraba hacia atrás, cayendo sobre su pecho y entre sus brazos.

- Estás bien, fue sólo un sueño -dijo apoyando sus labios sobre mi oreja, y hablando de forma suave, sabiendo que cualquier tono o movimiento brusco podría terminar alterándome y haciéndome peor-. Mira a tu alrededor. Estás en la cama, junto a mí, y estás a salvo.

- Scott... ¿Él volvió? -le pregunté, girando la cabeza y elevando un poco el mentón para poder mirarlo bien. Mi amigo había tenido que hacer de guardia durante la noche, para cubrir un puesto. Había escuchado cuando tuvo que irse, pero nunca lo escuché volver.

Stiles se encogió de hombros, apretando los labios sin saber la respuesta a mi pregunta.

- Stiles... Tengo que hablar sobre la muerte de Malia. Hay algo que me está dejando muy intranquila -le comenté.

Stiles asintió levemente y acarició mis brazos con suavidad, parecía estar concentrado en lo que fuera que tenía que decir, cualquier rastro de sueño desapareció por completo de su rostro.

Me acomodé de modo que pudiera quedar frente a él, este llevó a parar sus manos en mi cintura y la acarició, mientras yo me acomodaba poniendo mi mano bajo mi cabeza.

- A ella la asesinaron, Stiles -dije sintiendo como me dolían aquellas palabras, cerré los ojos con fuerza por un par de segundos-. Malia no murió porque el destino lo quería, no murió porque estaba enferma o porque necesitaba algo, ella murió porque alguien le quitó la vida.

Stiles pareció ver inmediatamente cómo me empezaba a alterar, y cómo mi voz se quebraba abruptamente y no demoró en llevar su mano a mi mejilla donde acarició lentamente. No dijo nada, él sabía que yo quería que no hablara, aún así aquel simple movimiento fue suficiente para tomar aire y poder seguir hablando.

- ¿Quien querría matar a Malia, Stiles? Ella era... Todo lo bueno en este mundo y no hay persona que puede haber hecho algo tan horroroso sólo porque si, entonces sólo me queda una posibilidad. -Stiles no dijo nada pero si entrecerro los ojos tratando de ver más profundo en mis palabrad, no comprendía -. Y es... Él, Stiles, es... Jackson.

Entonces necesitó aquello para que aquella expresión confundida se convirtiera en una sorprendida y si lo conocías tan bien como yo, podías ver enojo y terror a la vez.

- Pero, ¿Que...?-se detuvo un par de segundos, para tomar un respiro y seguir-. ¿Por qué?

- Porque me odia, simplemente por eso -solté, apretando los labios y mirando un punto perdido sobre las sábanas revueltas-. He hablado sobre lo que él me hacía, teniendo en claro que él me prometió que si decía algo las consecuencias no iban a ser buenas. Y en base a esto, mi padre lo bajó de categoría en el ejército. Aquel motivo es más que suficiente para querer arruinarme la vida.

- Pero, ¿Malia...?

- Él sabía lo importante que es ella para mí. Sabía que las dos personas más importantes para mí eran Malia y Scott -le expliqué antes de que pudiera terminar de formular su pregunta-. Stiles, todo esto tiene sentido. Estoy segura de que Malia quiso advertirme de Jackson antes de morir. Sé que trataba de decir su nombre y no podía. Y es todo su culpa.

Love on a Hill || StydiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora