Solo el amor nos salvará (cuarta parte)

Capitulo 702

- ¿Me buscabas, guapo?

Aparece risueña, dando unos toquecitos en mi espalda, haciéndome dar un respingo sobresaltado.

- Te ves agobiado.

Se burla muerta de la risa.

+ Ni puta gracia, Malú.

Narra Malú

+ Hostia.

Resopla mirándome cabreado cuando yo no puedo evitar morirme de la risa.

+ No hace gracia, me has dado un susto de muerte.

Se queja.

- Lo siento.

Prometo sincera.

- No quería asustarte.

Advierto.

- Hice pipí y vi que todavía no recogías nuestras maletas y me fui a esas tiendas de allí.

Señalo.

- Penaba que me iba a dar tiempo a volver antes de que lo tengas todo, pero me entretuve con unas cosas que he comprado.

Señalo traviesa la bolsa con un conjunto que pretendo estrenar esta misma noche. Se va a caer de culo al verlo. Siempre me ha dado corte usar algo tan atrevido, pero es nuestra luna de miel y me apetece provocarle.

+ Ya, no tardabas ni un minuto en avisarme.

Sentencia molesto.

- Lo iba a hacer, pero es que luego te vi buscándome y estabas tan mono preocupado por mi.

Río inocente.

- Lo siento, jo, pero te lo voy a compensar.

Prometo con un tono sensual, paseando mis dedos por su camisa y más abajo.

+ No todo se arregla follando.

Empuja las maletas y empieza a andar hacia la salida. Un taxi nos espera para llevarnos al hotel súper lujoso que nos cobijará por estos días.

- ¿De verdad te has enfadado por eso?

+ ¿Estas de coña?

Recrimina.

+ Te podría haber pasado algo, ya nos han dicho que aquí debemos de ir con cuidado, y tú vas y me vacilas porque te parece que estoy "tan mono"?

Usa sus dedos para citar mis palabras.

+ Te he llamado millones de veces desesperado y tú sólo te estabas quedando conmigo.

Me acusa lleno de rencor.

- Que no es para tanto.

Me defiendo.

- Solo fueron unos minutos.

Empiezo a cabrearme yo también por sus formas.

+ Unos minutos eternos.

Me mira dolido.

- Vale, ya te he pedido perdón.

Le recuerdo apurada.

- Vamos a dejarlo estar.

Propongo conciliadora. No me apetece que nuestra luna de miel la recordemos enfadados.

- Dame la mano, anda.

Pido persiguiendo sus pasos para entrelazar sus dedos con los míos.

+ No me apetece...