Solo el amor nos salvará (cuarta parte)

Capitulo 665

Narra Malú

Me despierto sola en la habitación. Miro mi móvil. Son pasadas las ocho y media. Me desperezo con prisa por las horas y encuentro en mi mesita de noche una nota de Gaby.

"Quise dejarte descansar, me he llevado yo a las nenas al colegio y Sofi está abajo con Carmen. Ya he hablado con ella y no tienes de lo que preocuparte. Te llamaré luego. Por cierto, ¿sabes que estás muy guapa al despertar? Me moría por ver esos pelos despeinados y los ojitos más bonitos del mundo cargados de sueño hoy también. Te quiero."

Una sonrisa boba se dibuja en mis labios como si fuera una adolescente que recibe la carta de su primer amor. A pelota no le gana nadie, pero como me gustan estos detalles.

Me doy una ducha rápida antes de bajar. He oído el timbre, por lo que imagino que la sobrina de Carmen ya estará aquí. Cojo unos vaqueros rotos y una camiseta ancha del armario, ya habrá tiempo para arreglarme un poquito más.

- Renacuaja. ¿Te has portado bien?

Me acerco a saludar a mi niña. Esta de lo más entretenida en su trona llenando de babas un libro de tela que le regaló mi padre.

- Buenos días.

Saludo a Carmen y a la nueva inquilina. Parece muy nerviosa, pobrecita.

- Soy Malú.

I: Si, lo sé.

Le tiembla la voz. Y todo el cuerpo. Lo noto cuando me tiende la mano.

- Y tu debes de ser Ilenia.

I: Sí.

Se presenta cohibida.

- Tranquila mujer, que no muerdo.

Río.

I: No, es que yo...

Su tía la mira penetrante, haciendo que la joven se corte.

- Ya, tengo fama de borde, pero en realidad soy maja.

Prometo divertida.

- ¿No, Carmen?

C: Sí, además Ilenia se adaptará muy rápido.

Sentencia con apremio.

I: Sí.

- No sé que te habrá contado tú tía, pero nada será tan grave. Solo tendrás que cuidar a las chicas cuando nosotros no estemos y echarnos una mano con la limpieza. Y a veces con la cocina.

Intento ser amable. Sigo desconfiando, pero si Gaby me ha asegurado que puedo estar tranquila, lo haré. Aunque estoy deseando hablar con el y enterarme de todo.

- Y si tienes dudas o necesitas algo, no dudes en decírmelo.

I: Vale.

- Ven, te enseño la casa.