Narra Gaby
+ Ven aquí, llorica mía.
Abro los brazos brindándole consuelo, pero no he podido ocultar la risita floja que se me ha escapado. Es que me produce tanta ternura cuando sufre por estas cosas.
- Eres un insensible.
Me da un guantazo en el hombro y luego acepta el refugio que le ofrezco.
- Que son muy pequeñitas.
Se lamenta limpiándose las lágrimas con el dorso de su mano.
- Y nos vamos por demasiado tiempo.
+ No son tan pequeñitas.
Refuto.
+ Además las van a consentir tanto que ni nos echaran de menos.
Aseguro. Hemos dicho adiós a nuestras cuatro adoradas hijas y ahora nos queda un largo viaje por delante. Solos y enamorados.
- Pero es que si nos necesitan no podrán llamarnos.
Se queja enfurruñada por las horas de vuelo. Llegando a las playas mexicanas volveremos a tener cobertura.
- Tendríamos que haber ido más cerca.
Vuelve a protestar.
+ Cielo, estarán dormidas mientras volamos. Son las diez de la noche.
Me río enternecido. Es adorable.
+ Ahora regálame una sonrisa de esas tan bonitas, anda.
Pido y lo hace falsamente, lo que me obliga a dejar un pico en sus labios y luego hacerle cosquillas, consiguiendo así su risa fresca.
+ Mucho mejor.
Sentencio conforme. Sé cuánto desea rechistar y vengarse, pero estamos contra el tiempo, tendremos que abordar dentro de unos minutos.
- Oye, voy a hacer pipí antes de subir al avión. ¿Te quedas con esto?
Pide señalando su bolso.
+ Si.
...
..
+ Cariño... Malú... ya hemos llegado.
La despierto moviéndola con suavidad. Se ha dormido casi todo el viaje y hace un rato mi hombro a reemplazo a la almohada.
- ¿Ya?
Entorna sus ojitos cargados de sueño y mira confundida a su alrededor.
- Que rápido.
+ Para ti, que te has quedado frita.
Río resignado. Yo no he podido descansar tanto como ella. La turbulencias me han despertado y aunque no me dan miedo los aviones no he podido volver a dormir, por lo que las horas se me han pasado con la compañía de las páginas antiguas del libro que he traído.
Nos abrochamos los cinturones de seguridad y antes de querer darnos cuenta aterrizamos.
+ Vamos a recoger las maletas.
Digo dejando una caricia en su mejilla. Fuera de España podemos permitirnos ser más cariñosos en público de lo que somos en nuestro país, aunque aquí también la conocen y la quieren mucho.
- Ve tu, otra vez necesito ir al baño.
Se encoge de hombros inocente.
+ Vale. Te encuentro allí.
Señalo la cinta que arrastra las pertenencias de todos los pasajeros. Los servicios no están lejos.
- Sí.
Desparece mirando la pantalla de su móvil. Imagino que habrá pillado el wifi del aeropuerto para avisar a los nuestros que ya estamos aquí y enterarse de como están las chicas.
+ ¿Malú?
Con nuestras maletas apiladas la llamo desde fuera. Está tardando demasiado y al no tener repuesta pruebo suerte llamándola por whatsapp, pero tampoco me lo coge.
+ Disculpa.
Reclamo la atención de una chica que sale del baño.
+ Mi mujer está dentro hace rato, podría entrar y avisarla que la espero justo aquí, o ver si necesita algo. Se llama María Lucía.
# Sin problemas.
Acepta mientras los segundos se me pasan lentos. Me estoy poniendo nervioso.
# El baño está vacío...
Donde pensáis que se ha metido Malú?? 😱
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700 capítulos!! No me creo todo lo que llevamos con esta historia! Muchísimas gracias por leerme! Para mi ha sido increíble escribirla y compartirla con vosotros! Muchas gracias ❤️
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Solo el amor nos salvará (cuarta parte)
FanfictionNovela inventada. La historia de amor de Malú y Gaby, una pareja que enamora. Por la cantidad de capítulos he tenido que continuar la novela como una nueva historia. Espero que os siga gustando.