- ¿Has dicho mamá?
Pregunto con un nudo en la garganta producto de la emoción y estiro mis brazos para achucharla. Ella hace lo propio, a punto de lanzarse al vacío sabiendo que yo voy a cogerla, pero mis oídos necesitan volver a escuchar esa palabra tan simple, aunque la más bonita, de su boca otra vez, por lo que doy un paso atrás.
- Di mamá, mi niña.
Suplico obteniendo más lloros como único resultado.
+ ¿Con quien quieres ir, Sofi?
Gaby intenta ayudarme, pero la enana no está por la labor y continúa con los gritos.
- Vale. Ven aquí, que no te torturo más.
Accedo a cogerla. Su cuerpecillo ya estaba por los aires, luchando con los brazos de su padre que no la dejan caer.
- Shhhh.
La acuno consiguiendo bajar la intensidad de su rabieta.
- Venga, Sofi, no me llores más.
Imploro susurrando en su oído a la par que dejo suaves besos en sus mofletes.
- Aquí esta mamá.
Musito llenándola de mimos. Mi niña hipa de tanto llorar. Lleva horas encontrándose mal y no sé cómo aún no ha caído rendida.
* Ma-má.
Vuelve a pronunciar más lento y entre lagrimones, acariciando con su manita mis pómulos, buscando asegurarse de que no voy a irme. La abrazo con fuerza y de reojo miro a Gaby y Alba que tienen sus ojos puestos en nosotras, enternecidos.
- Shhh.
Vuelvo a susurrar. Por fin empieza a calmarse y los ojitos se le cierran, esta agotada y por más que luche por mantenerse despierta, en mis brazos se queda frita.
A: Pobrecita.
+ Vaya guerrera.
Sonríe.
+ Y que pulmones más sanos que tiene.
Quita hierro al asunto.
- Ha dicho mamá.
Resalto lo obvio presa de la emoción.
- Mi bebé.
Cuidadosa deposito un beso en su frente.
+ En realidad no paraba de decir papá, pero como sabía que iba a hacerte ilusión la he convencido para que también te llame a ti.
Me pica.
- Ya quisieras, guapo.
Río. Que tonto es.
+ Si, en serio, Sofi estaba de buena leche y le apetecía escuchar y colaborar con cualquier cosa que le pidiera.
Carcajea.
A: La vais a despertar con vuestras risas y todos aquí vamos a pagar por ello.
Es Alba la que pone algo de cordura a nuestros piques. A veces los niños parecemos nosotros.
- Subo a acostarla.
Anuncio dándole la razón.
+ Yo también.
A: Buenas noches.
- Te quiero mucho, Alba.
ESTÁS LEYENDO
Solo el amor nos salvará (cuarta parte)
FanfictionNovela inventada. La historia de amor de Malú y Gaby, una pareja que enamora. Por la cantidad de capítulos he tenido que continuar la novela como una nueva historia. Espero que os siga gustando.