Capitulo 624

255 17 3
                                    

Narra Malú

La mayor de nuestras hijas lo mira llena de timidez. No esperaba un gesto así de su parte y creo que mi padre le sigue imponiendo demasiado.

Pe: Ten.

Deja sobre su mano un colgante de plata con una estrella que reconozco de inmediato.

Pe: Malú lo usó en su primer concierto.

Me mira orgulloso.

Pe: ¿Te acuerdas?

Le miro anonadada. No sabía que mi padre lo guardaba. Yo creía que se me perdió en algún viaje, pero es un obseso de conservar recuerdos y no se me ocurriría alguien mejor para recibir el accesorio que use la primera vez que canté en público, en mi Sevilla querida y que luego se convirtió en una especie de amuleto de la suerte.

A: Gracias.

Busca mi aprobación para conservar su regalo.

- Ven, que te lo pongo.

Confirmo entusiasmada. Aparta su pelo para que pueda cerrarlo y se gira luciendo la estrella plateada que tanto significado tiene para mí.

A: Gracias.

Repite sonriente.

Pe: Ni las des.

- Gracias.

Dejo un beso en su mejilla. Me gusta que se muestre cariñoso con nuestras hijas.

Pe: ¿Por qué no os cambias y nos vamos a la playa?

- Si, José ya me ha escrito que llevan un rato esperándonos.

...

..

J: ¿Os habéis venido de Madrid andando?

Pregunta animado nada más vernos.

Ad: No seas malo, pobres, la de veces que deben de haber parado con tres niñas.

Se apiada de nosotros.

+ A lo que sea que te imagines, súmale otras varias.

Gaby ríe exagerado.

Nos ha faltado tiempo para instalarnos, cuando Cami y Lu ya están empujando a su padre para que las acompañe al mar. Mi sobrina hace lo mismo con José, por lo que bajo las sombrillas nos quedamos mi cuñada, Alba, Sofi y yo.

- ¿Bueno, y que tal estos días que lleváis en Algeciras?

Ad: Muy bien. En la playa se está genial.

A: Podría acostumbrarme a vivir aquí.

- ¿Tu?

Niego risueña.

- No me lo creo.

Aseguro. Adora Madrid. Yo también lo hago.

A: Le falta mar.

- Ya.

Le doy la razón.

- ¡Joder!

Me sobresalto cuando alguien me tapa los ojos desde atrás. No esperábamos a nadie hoy. Mis primas llegan el domingo. Una risa femenina acallada por Alba llama mi atención, las manos son masculinas.

- ¿Pero quien es?


¿Quien pensáis que puede ser?

Solo el amor nos salvará (cuarta parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora