Capitulo 693

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P: Ay, mi niña, pero si estás preciosa.

Me alaba mi madre con los ojos encharcados mirándome de pie frente al espejo.

V: Gaby se va a caer de culo nada más verte.

Añade Vero, como siempre llena de esa alegría derrochadora que la caracteriza.

A: Mamá, estás increíble.

Les agradezco con una sonrisa, emocionada. Ha sido verme lista y darme cuenta que el momento que he soñado toda mi vida ha llegado. Voy a dar el "si quiero". Voy a unirme al hombre que amo para siempre, tendremos una espectacular noche de bodas y un regreso a casa aún más bonito, porque nuestras cuatro hijas, esas a las que adoro más que a mi vida, nos estarán esperando. Recibiremos el nuevo año junto a nuestros seres queridos y veremos la carita de ilusión de las niñas en la mañana de reyes en familia, y luego, un poco tarde, vendrá nuestra tan ansiada luna de miel. Poco después de la desconexión volveremos al trabajo, pero ya me toca sacar disco, y lo estoy deseando. Si la felicidad no es esto, pues yo ya no sé lo que es.

Narra Gaby

Espero nervioso la llegada de Malú. Los invitados ya están aquí. Nuestras hijas han sido las últimas en llegar, junto a Vero y Pepi, que acompañaban a la novia. Ahora solamente falta verla aparecer a ella.

Los instrumentos que empiezan a tocar una preciosa melodía me alertan, obligándome a levantar mi vista hacia el fondo de la finca. El coche se detiene y Pepe baja de el, rodeándolo para abrir la puerta trasera y ayudar a bajar a la mujer de mis sueños.

+ Creo que voy a desmayarme.

Susurro a Luis que está cerca de mí. Malú luce un vestido espectacular, sin duda, es la novia más bonita de todo el mundo.

L: No creo yo que a ella le hará mucha gracia que seas tú el centro de atención.

Ríe para relajarme, pero no le da tiempo, porque la marcha nupcial empieza a sonar y ella avanza con pasos lentos junto a su padre hasta mi. Una sonrisa preciosa reluce en su carita angelical, iluminando toda la estancia.

- Hola guapo.

Me saluda alegre cuando Pepe me cede su brazo.

+ Estas... estas...

Me quedo sin palabras.

- ¿Qué?

Busca su piropo, sabiendo que bajará la mirada al escucharlo.

+ Deslumbrante.

No me he equivocado, y una tímida sonrisa esboza a la par que sus ojitos se anclan en el suelo.

+ ¿Vamos a ello?

Propongo antes de dar los últimos pasos conjuntos hacia el altar.

+ Todavía tienes oportunidad de salir corriendo.

Murmuro gracioso.

+ Aunque con esos taconazos creo que te alcanzaría.

- Ni de coña.

Ríe.

- Me los quito y me echo a correr descalza.

+ Te alcanzaría de cualquier manera.

- ¿Estas sugiriendo que no estoy en forma?

+ Puede.

Me mira achinando los ojos.

+ O que eres una canija y por eso yo corro mucho más rápido que tú.

Finge indignación.

L: Oye, no es plan interrumpiros, pero os estáis por casar.

Reclama nuestra atención con el micrófono en mano.

L: Y toda esa gente está aquí por vosotros.

Las carcajadas se escuchan tan fuertes como las nuestras. Nos miramos con complicidad y ahora sí damos los últimos pasos que nos llevan al altar.

Solo el amor nos salvará (cuarta parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora