Solo el amor nos salvará (cuarta parte)

Capitulo 711

- Trae el móvil.

Pido a Gaby. Necesito hacerles una foto, no pueden verse más bonitas y así dormidas me parece que es la imagen más tierna del mundo, necesito guardarla.

+ Me las como.

Promete tendiéndome su teléfono.

- Y yo.

Aseguro devolviéndole su iPhone para tener las manos libres y poder acomodar el edredón un poco mejor. Cami se lo ha llevado todo y Alba va a quedarse helada.

A: Ya estáis aquí.

Susurra con los ojitos cargados de sueño.

A: Lo siento, os quería esperar despierta, pero me he dormido acompañándola.

Señala a su hermana incorporándose para saludarnos.

+ Ven aquí, anda, dame un abrazo.

A: ¿Qué hora es?

Pregunta sin soltarle.

+ Tarde.

Advierte sin mirar el reloj. Estamos agotados tras el vuelo pero la diferencia de hora nos tiene súper despiertos.

A: ¿Lo habéis pasado bien?

- Mucho, pero os hemos echado tantísimo de menos.

Prometo abrazándola yo.

- ¿Cómo estas?

Me intereso. En las llamadas decía estar estupendamente pero hace casi dos semanas que no tengo una charla en condiciones con nuestra primogénita que me permita saber cómo se siente de verdad.

A: Muerta de sueño y segura que no pienso tener hijos.

Sentencia divertida.

A: Que pesadas son las chicas.

Se queja de sus hermanas de manera graciosa. Nuestros padres han sido de mucha ayuda estos días e Ilenia también ha hecho su trabajo, pero no dudaría ni por un momento que Alba ha consentido y llenado de mimos a sus hermanas. Sólo hay que verla con el peluche de Cami aún en su mano.

+ Las chicas son unas pesadas, sí.

Le da la razón.

+ Ah, espera, que tú también eres una de las chicas.

La chincha volviendo a abrazarla.

+ Gracias, Alba.

Dice lleno de honestidad.

- A mi me hubiera encantado que seas mi hermana mayor.

Confieso. Es la mejor.

+ Estoy muy orgulloso de ti.

A: Joder, si que habéis vuelto pastelosos.

Ríe sonrojada por nuestros halagos que no pueden ser más verdad.

A: Me voy a la cama.

Anuncia.

A: Mañana tendremos que hablar...