++ Veinticinco ++

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Mo Ran jaló de la túnica de Shang QingHua mientras caminaban, y el señor de cumbre no pudo evitar pensar en la vez que lo presentó como su hijo en la montaña Cang Qiong.

— Papá, ¿a dónde vamos?— preguntó.

No había mucho que hacer en el pico SiSheng, por lo que fue sencillo para Shang QingHua sacar a su hijo de allí por unos días. Mobei-Jun esperaba por ellos al pie de las escaleras y la familia se fue volando en espada siguiendo las indicaciones del rey de hielo.

— Ya lo verás— dijo Shang QingHua con una sonrisa.

Había reconocido el lugar: era un pueblo templado, situado en una zona fría pero con aguas termales que contrarrestaban la baja temperatura, un sitio ideal tanto para el humano como el demonio. Había sido en este pueblo donde Mobei-Jun le pidió matrimonio a Shang QingHua y era, de algún modo, su lugar especial. Un lugar que el rey demonio decidió compartir con su hijo al fin. Mobei-Jun y Shang QingHua eran conocidos por todos en el pueblo, por lo que muchos se acercaron a saludar apenas los vieron.

— ¡Mo Daozhang! ¡Shang Daozhang! ¡Que gusto verlos!

El señor de cumbre y el rey de hielo correspondieron a los saludos, de repente las miradas de los pobladores se dirigieron a Mo Ran y alguien preguntó:

— ¿Y este niño?

— Es mi hijo— dijo Mobei-Jun sin titubear.

— Increíble. Sea bienvenido, joven maestro.

El grupo fue dirigido a una posada y luego de un descanso salieron a recorrer el pueblo, señalando a Mo Ran los sitios más bonitos en el lugar hasta dirigirse finalmente a una pequeña pradera.

— A-Ran, ven aquí— llamó Mobei-Jun.

Mo Ran volteó hacia Shang QingHua, quien le asintió, y se dirigió hacia Mobei-Jun. Esperaba que el rey demonio no le diera a beber su sangre de nuevo porque ahora sí iba a llorar. El rey demonio le puso una mano en el hombro y dijo:

— Hubo un tiempo en que esta tierra perteneció al Reino Demoníaco. Aquí fue dónde nació el clan Mo, que después se retiraría al Norte helado.

— Espera un momento...— dijo Mo Ran.

Shang QingHua se adelantó a lo que su hijo iba a cuestionar diciendo:

— La costumbre del clan Mobei es que cada rey tenga el mismo título, el cual es Mobei-Jun. Así no habrá luchas internas sobre qué rey superó a su antecesor.

— Entonces… ¿Puedo preguntar cuál es el nombre de padre?— inquirió Mo Ran con timidez.

— Mi nombre es Mo JiYuan— dijo Mobei-Jun—. De modo que si algún día el mundo del cultivo llega a saber que eres mi hijo, podrás desdeñar libremente el título Mobei. 

— No podría hacer eso.

— Puedes y lo harás. El clan Mobei morirá conmigo. 

Shang QingHua dio un respingo y Mo Ran lo miró con sorpresa. 

— Pero, padre...— dijo Mo Ran.

— Sin discusiones— dijo Mobei-Jun—. Todos los hijos del clan han estado sujetos a las exigencias de sus mayores, y no dejaré que eso pase contigo. Si quieres tomar mi lugar, quiero que sea por tu propia decisión y no obligado por nada. Sin importar cuál sea tu situación, este será tu hogar por siempre. 

Mo Ran sonrió, abrazando a su padre. Juraba a partir de ese momento hacerlos sentir orgullosos a ambos y no ser tan impulsivo.

Una nueva vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora