++ Cuarenta y nueve ++

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Chu WanNing observó a Mo Ran mientras entraban al pabellón Xuanyuan preguntando nuevamente en voz baja para no ser escuchados:

— ¿Dónde conseguiste los pases para entrar?

— Respondiendo a Shizun, este discípulo los pidió a su padre— dijo Mo Ran apartando la mirada.

Esto era una verdad a medias. Shang QingHua le había mandado los pases a Mo Ran, lo que no dijo fue que envió al demonio del reino de hielo que solía ser su niñera cuando nadie podía cuidarlo, eso significaba poner al descubierto su relación con Mobei-Jun y era justo lo que ellos dos no querían: ni Shang QingHua ni Mobei-Jun querían que Mo Ran se viera afectado por agresiones ni habladurías al saberse que era hijo de un demonio celestial. Así que Mo Ran se mantuvo em silencio ante las preguntas de Chu WanNing hasta que se le ocurriera una buena excusa.

— Un sirviente del hotel los llevó a mi habitación. Por eso no te diste cuenta.

— Sabes que no puedes mentirme, ¿cierto?— amenazó Chu WanNing.

Mo Ran tragó saliva recordando lo que Xue Meng le había dicho cuando interrogaron a Mo Nian por el asunto del robo y asintió vigorosamente.

— Shizun, no estoy mintiendo.

— Mas te vale. 

Los pases que tenían eran del puesto más alto, por lo que ambos fueron llevados a uno de los asientos VIP, reservados para los más adinerados. Durante todo el camino, Mo Ran había mirado a su alrededor muy atentamente: le habían dicho que se encontraría con alguien que tenía la confianza de sus padres pero hasta el momento no había dado con esta persona. Tal vez le habían tomado el pelo y no pudo evitar hundirse en el asiento de su apartado con desgana sintiéndose un poco estafado y rápidamente se quedó dormido. Chu WanNing negó con la cabeza al verlo y sacó de su manga un frasco de pastillas en el cual había cerca de 30 tabletas; esta era la medicina que Tanlang había refinado para él con el objetivo de contrarrestar el efecto de la savia en su cuerpo, rápidamente sacó una tableta y se la tomó ya que en este momento no podía darse el lujo de ser un niño.

La cortina de su apartado se levantó y un discípulo del pabellón Tianyin entró, miró al joven dormido sobre un sillón y al hombre de blanco cuyos ojos de fénix lo analizaban con la mirada y dijo dirigiéndose a éste último:

— Usted debe ser Chu WanNing. Es un honor conocerlo en persona. Mi nombre es Meng XiaoFeng, ¿me permite tomar asiento?

Chu WanNing asintió señalando uno de los sillones vacíos. Meng XiaoFeng se acercó y se sentó mirando a Mo Ran dormir plácidamente.

— La pequeña Alteza siempre ha tenido un sueño pesado— dijo—. Esperemos a que despierte y entonces podremos hablar. 

— ¿Hablar de qué?— preguntó Chu WanNing sin bajar la guardia—. Eres un demonio fantasma.

Meng XiaoFeng se congeló en su lugar y luego suspiró con resignación.

— Los sentidos del anciano YuHeng son muy agudos— dijo—. Le ruego que no me eche de cabeza, todo lo que hago es para proteger a la pequeña Alteza y no deseo causar daño a nadie más.

— Entonces él sí está relacionado con el clan Mobei.

— No tengo permitido hablar de eso, pero el anciano YuHeng ya debió notarlo. 

Mo Ran se agitó en su lugar y finalmente despertó. Su mirada somnolienta se fijó en Chu WanNing y después miró a Meng XiaoFeng, quien inclinó la cabeza en un saludo y dijo:

— Joven maestro Mo, vengo de parte del señor de la cumbre An Ding.

Mo Ran sonrió al escucharlo, pero las palabras de Meng XiaoFeng borraron su sonrisa llenándolo de preocupación.

— No puedo demorarme más tiempo. El demonio Linguang-Jun está aquí, oculto bajo el amparo del pabellón Tianyin y lo acompaña alguien de la secta Gue Yue Yu. Intentaré averiguar qué es lo que quieren comprar.

Tras decir esto, el discípulo se fue. Chu WanNing frunció el ceño meditando sobre lo dicho por el demonio y luego negó con la cabeza.

— Shizun no le cree, ¿verdad?— preguntó Mo Ran.

— El pabellón Tianyin es una de las sectas más respetadas del mundo— dijo Chu WanNing—. ¿Por qué se molestarían en conspirar con un demonio? ¿Y por qué habría alguien de la secta Gue Yue Yu con ellos?

Mo Ran pensó en ello, y dijo:

— Tal vez tenga algo que ver con las Bellezas de Huesos Mariposa.

❁❁❁❁❁

Eso, Mo Ran, sé listo y sigue averiguando por ahí.

Sistema: Todavía no podemos desarrollar la inteligencia del protagonista hasta ese punto, lo sentimos ¯\_ʘ‿ʘ_/¯

Bueno, los dioses saben que lo intenté.

Una nueva vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora