Al salir de la mansión de Fp, el mencionado junto a sus hijos y junto a Betty fueron al colegio en el que estaba Jellybean, pero ese "colegio" parecía casi un castillo, en el cuál solo estudiaban los hijos de los más millonarios de Roma.
Fp, Jughead y Betty se sentaron juntos, Betty en medio de ambos Jones, sentados junto a los demás del público mientras la ceremonia iniciaba.
El director del colegio secundario fue al escenario y tomó el micrófono para dar la bienvenida. —Buonasera signore e signori... è un grande onore avere la vostra presenza questo pomeriggio per riconoscere e congratularci con i nostri studenti, che con impegno e tanta dedizione hanno conseguito la laurea in questa prestigiosa scuola—
Todos aplaudieron y la ceremonia inició entregando los títulos a los estudiantes con las mejores calificaciones, los estudiantes de honor.
Entre esos estudiantes, la del promedio más alto fue Jellybean y todos le aplaudieron, especialmente Betty y los hombres Jones.
—¡Es mi niña, es mi bebita!— Chilló Fp, poniéndose de pie y aplaudiendo.
Jughead copió la acción de su padre y le siguió Betty, los tres muy orgullosos y ni hablar de Jellybean. Cuando ella vió el apoyo y la presencia de su familia entre el público sus ojos azules se cristalizaron, pero de la emoción.
Luego le siguió su novio, también estudiante de honor y cuando terminó la entrega de los títulos, la que dió el discurso fue JB por haber sido la estudiante más destacada todos esos años.
Ni Jughead, Fp o Betty cabían del orgullo. Después del discurso y felicitarse entre compañeros, los recién graduados salieron al encuentro de Jughead, Fp y Betty para su recorrido por la ciudad, después de haberse quitado la toga, birrete y esclavina.
—¡No puede ser, lo hice, lo hice!— Chilló JB, acercándose a ellos, dando saltitos.
Fp se acercó a su hija y besó su frente. —Mi bebita... Tu y tu hermano son mi orgullo hija—
—Se parece a su hermano mayor— Presumió Jughead, acercándose con Betty tomada de manos.
—Estamos muy orgullosos Jellybean, ve por mas— La retó la ojiverde.
JB sonrió, mirándolos, en especial a Betty. —Si... Así podré ser como tú, Betty. Eres increíble—
Betty sonrió y se acercó para abrazarla. —Tu puedes ser mejor, lo se—
—Ya estoy aquí— Avisó Franco, acercándose. —¿Listos para su recorrido por Roma?—
—Espera, Jellybean debe estrenar su obsequio de graduación— Dijo Fp.
Los demás se miraron con confusión, en especial Jellybean hasta que un hermoso auto rosa convertible con un gran moño rojo apareció, siendo conducido por uno de los empleados de Fp.
JB se cubrió la boca con ambas manos para no gritar y se abrazó a su padre con fuerza. —¡Es el auto de mis sueños papi, gracias, gracias!—
Fp sonrió, abrazándola y besando su cabeza. —Es lo menos que puedo hacer por ti, mi niña. Te amo y te lo mereces—
Jughead soltó una risa. —¿Un auto rosa? ¿Quien eres? ¿Barbie?—
—¡Jug!— Lo regañó Betty, golpeándole el hombro. —Dejala, es el auto más lindo que he visto—
Jughead rodó los ojos. —Cierto... Ustedes aman ese horrible color—
Franco se acercó al auto, recibiendo las llaves de parte del empleado que lo entregó y le abrió la puerta del convertible a su novia. —Ven a estrenarlo mi princesa—
JB soltó un grito de alegría y felicidad pura y se acercó a Franco, recibiendo las llaves y entrando a su nuevo auto. —Chicos vengan, vamos a pasear por la ciudad en mi nuevo auto—
—Ustedes adelántense, nos encontramos en el castillo de San't Angelo, allá nos juntamos— Dijo Jughead.
—De acuerdo, mi amor sube— Pidió JB, abriéndole la puerta del auto a su novio.
Franco entró al auto con una sonrisa y besó la mejilla de JB. —Tu mandas amorcito—
—Hey, cuida a mi niña— Exigió Fp, mirando a Franco y luego a Jughead. —Cuidala—
—Ella está segura conmigo papá— Aseguró Jughead, tomando la mano de Betty y besándola. —Nena, ven, hay un auto esperándonos cerca. Te mostraré la ciudad—
Betty asintió y junto a Jughead caminó unos pocos metros hasta que llegaron hacia un lujoso Ferrari negro. Jughead le abrió la puerta a la chica y ella entró al asiento del copiloto mientras Jughead entraba al asiento del conductor.
Estaban felices, estaban juntos y estaban recorriendo la ciudad de Roma; Visitaron el coliseo, panteón, basílica de San Pedro, Foro Romano, Plaza Navona y fueron a un sinnúmero de atracciones y sitios históricos.
Antes de ir al Castillo de San't Angelo y encontrarse con Franco y Jellybean, Jughead llevó a Betty hasta la Fontana di Trevi. Una fuente con agua cristalina, rodeada de bellas estatuas.
—Ay por favor voy a explotar...— Murmuró Betty con emoción, mirando a su alrededor con los ojos brillantes. —Es la fuente más hermosa que he visto—
Jughead asintió, acercándose. —Es más hermosa que las de mi mansión o las de mi padre. ¿Quieres arrojar una moneda?—
Betty asintió, mostrando una moneda en su mano. —Desde que me mencionaste que habría una fuente, traje ésta moneda— Aseguró.
Jughead sonrió, sacando una moneda de su bolsillo. —Cuando cuente hasta tres, los dos vamos a tirar las monedas—
—Hecho— Aceptó Betty con una sonrisa.
—Una... Dos... Tres...— Contó Jughead, arrojando su moneda al mismo tiempo que Betty.
Ambos arrojaron sus monedas al mismo tiempo y como si fuera magia, se miraron a los ojos y simplemente se dieron un beso.
Si, un beso lento, apasionado y cargado de cariño, en donde Betty tomó el rostro del chico entre sus manos y el la tomó de la cintura.
—Ouh... Creo que no llegamos en el mejor momento— Admitió JB, pícara, acercándose con su novio.
Betty y Jughead se separaron de golpe y se miraron, algo nerviosos.
Jughead suspiró, mirándola mal. —Te dije que nos veríamos en el castillo de San't Angelo—
—Pero primero vine a arrojar monedas con mi novio— Aclaró JB. —Jug, Betty... Si ustedes se gustan no tienen por qué esconderlo. Está bien si se quieren, es tiempo de que vivan su amor tranquilos—
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Jellybean es sabia 😍 pero el romance y la pasión en Italia no terminan aquí 😏🔥😈
