En la mansión, el trabajo había terminado, casi todos se habían ido y Betty trabajó desde casa.
Ella le había dejado el bebé a Jughead, pero los buscó en la sala, cocina, habitaciones y antesala y no los encontró hasta que escuchó risas que venían de afuera.
Cuando salió al jardín trasero, Jughead estaba alzando a su pequeño hijo y haciéndolo reir a carcajadas.
Betty suspiró con una sonrisa de enamorada. Nada la hacía más feliz que saber que eligió al padre correcto para sus hijos y que él los amaba y cuidaba tanto como ella.
—Mis hombres— Dijo Betty, acercándose a besar la mejilla de Jughead y la del bebé. —¿Qué están haciendo?—
—Un rato de chicos— Respondió Jughead, girándose hacia su mujer con el bebé en brazos y besando sus labios. —¿Qué hora es? Ya tengo ganas de ver a mi princesa—
—Nuestra princesa— Lo corrigió Betty, besando con rapidez sus labios y luego la frente del bebé con una sonrisa. —Faltan como dos horas más para...
En eso el celular de Betty empezó a sonar con una llamada de la directora del colegio. Betty tomó su celular y alzó una ceja.
—Amor... ¿Qué pasa?— Le preguntó Jughead, mirándola.
Betty lo miró, atendiendo la llamada. —Es la directora del colegio de Luna—
En la llamada...
—Buenas tardes directora. ¿Qué ocurre?— Le preguntó Betty, asustada.
—Buenas tardes señorita Jones...— Saludó la directora. —Escuche, no se alarme pero su hija no aparece desde el recreo y no la encontramos en ningún lado—
—¿Qué?— Cuestionó la ojiverde, con la mano temblorosa y una presión en el pecho. —¿Cómo que mi hija no aparece? Se supone que está en su colegio—
—Le llamamos para preguntar si de casualidad no está con ustedes— Dijo la directora. —La niña desapareció durante el recreo y no la encontramos. Sus compañeritos ya están en clases—
—Pero tiene que haber un error— Aseguró Betty, nerviosa. —Mi hija debe estar ahí. No pudo desaparecer de la nada... ¿Sabe qué? Nos vemos allá—
Fin de la llamada.
Betty dejó a la directora con la palabra en la boca y estaba tan nerviosa que sus manos temblaban sin parar, empezó a sudar y su respiración estaba alterada.
Jughead se había distraído con el bebé, pero cuando notó lo nerviosa que estaba su esposa se acercó a ella aún con el bebé en sus brazos.
—Amor... ¿Qué pasa? ¿Qué tienes?— Le preguntó Jughead, preocupado.
Betty estaba tan nerviosa que no era capaz de decir palabra alguna. Su respiración estaba fuera de control y sus manos temblaban y sudaban sin parar.
—Amor... Amor háblame que me estás asustando— Exigió Jughead, mirándola fijamente. —¿Te dijo algo la directora?—
Betty tomó una profunda respiración, tratando de calmar sus nervios. —Jug... La directora... Nuestra hija... Nuestra hija no está Jug, no está—
El terror se hizo evidente en los ojos de Jughead, así como la confusión y más emociones negativas.
—No lo entiendo. Será mejor que me expliques qué está pasando Betty— Exigió Jughead, nervioso también. —Nuestra hija está en la escuela—
—No...— Negó Betty, al borde del llanto. —No está, desapareció en el recreo Jug... Nuestra hija no está allá— Sollozó.
—No... Tiene que haber un error— Aseguró Jughead, nervioso. —Toma a Oliver, haré una llamada— Pidió, pasándole el bebé a la ojiverde.
Betty tomó a su hijo en brazos aunque estaba muy nerviosa y Jughead tomó el celular, igual de nervioso que ella.
En la llamada...
—Jughead...— Respondió Sweet pea, nervioso también. —Jughead tenemos un problema—
Jughead suspiró. —¿Ahora que?—
—Perdimos contacto con los guardaespaldas que cuidan a Luna— Avisó. —Ya envié a un equipo a verla. No tenemos contacto con los micrófonos ni con las cámaras y los drones de repente dejaron de funcionar—
—Sweet pea... Mi hija no está en el maldito colegio. Ya la directora llamó a mi esposa— Avisó Jughead, desesperado. —Voy a ir yo mismo a ese maldito colegio a investigar qué está pasando—
—Yo también voy a ir. Esto que está ocurriendo no es normal. ¿Nos vemos en el colegio?—
—Nos vemos en el colegio Sweet pea— Afirmó Jughead.
Fin de la llamada.
—Jug hay que hacer algo— Suplicó Betty, acercándose al ojiazul con el bebé en brazos, desesperada.
—Yo sí voy a hacer algo al respecto, voy a investigar qué está pasando— Aseguró Jughead, mirándola. —Y tu te vas a quedar aquí para cuidar al bebé—
—Pero Jughead... También es mi hija— Le recordó Betty, angustiada. —No puedo quedarme aquí de brazos cruzados sin saber de mi hija—
—Betty... Oliver también te necesita— Dijo el ojiazul. —Es un bebé y tiene tres meses. También te necesito a salvo. No puedo arriesgarme a que te pase algo a ti también. Quédate aquí—
Betty negó entre lágrimas. —Pero Jughead...
—Quedate aquí con el bebé— Exigió el ojiazul, firme, retirándose.
Betty no tuvo oportunidad de seguir discutiendo con él y Jughead solo entró al auto y de inmediato condujo hasta el colegio en el que se suponía que debía estar Luna.
Allá habían muchos oficiales de policía tratando de investigar qué había pasado con la pequeña, pero también estaban los hombres de Jughead, incluído Sweet pea.
—Sweet pea...— Lo llamó Jughead, bajando del auto y acercándose rápidamente a él. —¿Qué ocurrió? ¿Qué pasó con los guardaespaldas de mi hija y por qué no cuidaron de mi hija como se les ordenó?—
Sweet pea lo miró. —Esos hombres fueron asesinados— Avisó.
Jughead lo miró con incredulidad. —¿Qué? Pero... ¿Cómo es eso posible? ¿Quien lo hizo?—
—Ni idea, estamos investigando— Aseguró Sweet pea. —Pero sea quien sea, tenía todo muy bien calculado para llevarse a la niña—
Jughead bufó, molesto y se acercó a la directora, la cuál estaba hablando con los policías. —¿Dónde está mi hija? ¿Cómo pudo haber desaparecido de su colegio cuando se supone que este es el lugar más seguro?—
—Señor Jones... Estamos haciendo todo lo posible por encontrar a la niña. Revisamos las grabaciones de las cámaras de seguridad pero las de afuera están descompuestas y solo se ve a la niña dirigirse hacia el patio trasero del colegio— Avisó la directora.
Jughead se negaba a creer lo que estaba pasando. Él ya tenía bastante experiencia en esos asuntos para saber que la desaparición de su hija fue algo planeado y que alguien se la llevó.
Capítulos finales llenos de drama y acción 🔥
Samy ❤️
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PROHIBITED
FanfictionJughead Jones, un millonario frío, orgulloso y sin sentimientos que un día podría correr peligro... De enamorarse y enfrentar un romance prohibido.