Narra Vanesa
- Entonces, ¿ya? ¿todo solucionado? ¿así de fácil? -
- ¿Has visto qué rápido? Así de buena soy -
Estábamos en nuestra habitación. Mónica había estado un rato hablando por teléfono con su falso marido, sentada en la cama, y al parecer ya estaba todo solucionado. Yo estaba sacando todas las cosas de la maleta y ordenando la ropa.
- ¿Pero no te ha pedido nada a cambio? -
- Bueno sí, eso sí -
- ¿Y? - moví los brazos indicándole que continuara.
- Nada, solo me tengo que acostar con él y promete ni aparecer en el programa ni inventarse nada más - dijo con total normalidad mientras se agachaba y abría otra de las maletas.
- Ehhh, ¿perdona? -
Mónica se levantó y me miró, acercándose a mí.
- ¿Qué? -
- ¿Cómo que qué? ¿me acabas de decir que te ha pedido que te acuestes con él? -
- Eso he dicho, sí -
- ¿Y le has dicho que sí? -
- Claro que le he dicho que sí, es la manera más rápida de acabar con todo esto -
- Ehhh, disculpa que insista otra vez, pero... ¿perdona? -
- Ay Vane, no le des más vuelta. Voy mañana a su casa, me acuesto con él y todo solucionado. Además, tampoco es que vaya a ser la primera vez, ya estuvimos juntos un tiempo -
- Mónica... llámame loca, pero ... ¿no crees que es algo que tendríamos que haber hablado? - no entendía nada y me estaba empezando a cabrear de verdad.
Se acercó a mí, mirándome extrañada.
- ¿Estás diciendo que tengo que pedirte permiso? -
- ¿Para acostarte con otra persona? pues sí, sí que tienes que pedirme permiso - estaba indignadísima - y ya no solo eso, es que no es que me pidas permiso, solo el hecho de que te plantees ...-
En ese momento puso sus dos manos alrededor de mi cara y me besó fuerte, callándome la boca.
- ¿Estás tonta? - me dijo riendo y mirándome intensamente - ¿Cómo me voy a acostar con ese tío?-
Yo me la quedé mirando unos segundos, entendiéndolo todo justo en ese momento - Joder, Mónica - dije enfadada. Seguía cabreada.
Ella reía y no me soltaba de su abrazo.
- No tengo ninguna intención de acostarme con ningún ex, no te preocupes - dijo acariciándome la nariz con la suya.
- Ni con un ex ni con nadie - ella me miraba divertida, yo seguía seria - nunca más, ¿me oyes, Carrillo? nunca más-
- Con nadie - dijo sobre mis labios - nunca más - y me dio un pequeño beso.
- Solo conmigo -
- Solo contigo - me dio otro beso - para el resto de mi vida... oye - se separó un poco de mí - ¿eso no es demasiado tiempo? vamos a acabar hartitas la una de la otra - y volvió a reír.
La miré entornando los ojos
-¿Cómo era aquello? - dije pensando y mirando al techo - ah, sí...- me volví a acercar a sus labios y le susurré - te querré casi siempre. Toda la vida, pero no todo el tiempo -
Ella sonrió y se le iluminaron los ojos.
- Veo que alguien ha leído uno de mis libros - dijo sonriendo presumida - entonces ¿ahora en qué tiempo estamos? ¿en el que sí? - me volvió a besar - ¿o en el que no? -
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Menuda historia la nuestra
أدب الهواةLa historia de Vanesa y Mónica... bueno, MI historia Vanica