Me Duele Amarte

Epilogo

Epilogo

Cuenta Peter: Hacia dos años atrás recibía la noticia del médico que ya no había más nada que hacer, que solo faltaba que el corazón de Lali dejara de latir, porque eso era lo único que funcionaba, su corazón, ese en el cual había amor, demasiado, que llego a amar a tantas personas a pesar de todo.
Cuando la perdí no me importo nada, ni siquiera mis hijos, no me fije que había dos niños a mi cargo, no los supe cuidar, el dolor me había sobrepaso tanto, que caí en una depresión, con el simple hecho de abrir los ojos y acordarme que Lali ya no estaba, sentía que ya nada tenía vida, que ya no tenía sentido seguir, pero gracias a esas Personas que me acompañaron siempre, pude salir, gracias a las risas de mis hijos, el escucharlos hablar por los pasillos de la casa, ayudaron a que todo sea más rápido.
Lali falleció de un paro cardiorespiratorio no traumático, eso me consolaba, ella no sufrió, al estar sedada, no sintió que su corazón dejo de latir.
Después de un año decidí empezar a trabajar, necesitaba poner mi cabeza en otro lado, dejarla de pensar por un momento y seguir mi vida como ella me lo pido muchas veces; Lau preguntaba por su mamá, pero siempre le respondí lo mismo, ella es un ángel que nos cuida siempre y con Tomi, en varias oportunidades lo vi acostado en una reposera mirando al cielo y llorando, simplemente lo dejaba, no quería interrumpir esos momentos; Hoy en día, las cosas están mucho mejor, si bien la recordamos, lo hacemos con una sonrisa en la cara.
Nunca me olvide de la carta que le hizo escribir a Rochi, nunca la leí, no me animaba, pero hoy, había llegado la hora;
Peter, mi amor: Seguramente cuando estés leyendo esto, es porque ya todo a terminado. Antes que nada te quiero decir que te amo, aun no estando en vida, te amo, fuiste el hombre con el cual elegí casarme, con el que elegí formar una hermosa familia, te elegí para que seas parte de mi vida y me dejaras ser parte de la tuya. Gracias por permitirme ser una mujer feliz, porque a tu lado conocí la felicidad, gracias por apoyarme en todas las decisiones que tome, por soportarme, por elegirme vos también, por los hijos maravillosos que me diste, gracias por la vida que me permitiste llevar a tu lado.
Quiero que sepas que luche, que la pelee y no por mí, por ustedes, por esas dos caritas más hermosa que tenemos en común, por esas dos personitas que nos enseñaron a ser padres, por esas sonrisas que todos los días nos regalaron, por esos abrazos, por las peleas que tenían los tres, por ustedes llegue hasta donde llegue, porque si hubiese sido por mí, me hubiese dejado vencer, descansa ahora, fueron siete largos meses que no dormías, que estabas a mi lado, que siempre te preocupaste, ahora llego el momento amor, llego el momento que vos disfrutes y vivas TU vida, enamórate, se feliz, pero acuérdate de los niños, no los descuides, si te ves en una decisión difícil y que te cuesta salir, mira a NUESTROS hijos, ellos te van a dar la solución.
PD: No te olvides que hubo una mujer que te amo todos los días un poco más, perdón si te falle en algo, trate de hacer lo mejor posible para que lo nuestro funcionara y hoy me doy cuenta que ese esfuerzo valió la pena.
Te amo, Lali.