Nada que hacer

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—... Fue para poder hablarles del estado actual de la situación en la que nos encontramos.

Cada uno de los adolescentes presentes se estremecieron.

—Tío Strange, ¿te refieres a lo que está pasando con mi mamá y los demás?—Preguntó Peter temeroso.

Strange asintió, y suspiró.

Peter empezó a temer lo peor. Odió el imaginarse a su madre, desesperada, indefensa en una celda de la prisión de máxima seguridad, sin esperanza de salir de ahí... pero ésta era Natasha Romanoff. Le consolaba el esperar que, de alguna forma, Nat estuviera bien, y que ella encontrara una forma de sobrevivir ahí y, tal vez, hasta encontrar una forma de escapar.

—El campo de fuerza que rodea La Balsa es completamente impenetrable—Strange empezó a decir. Kamala extendió su brazo para darle un golpe en el hombro a Harley al ver que él casi reía ante la mención de aquella palabra.—. Shuri, Tony, Bruce y el señor Richards de verdad hicieron un muy buen trabajo mientras que lo constituían, ya que ni siquiera puedo abrir un portal que podría llevarnos ahí, y nuestros amigos que están ahí adentro no pueden usar sus poderes. Además de eso, tras hablar con Fury y el señor Richards, nos pusimos de acuerdo con que sería demasiado arriesgado el atacar La Balsa por el momento.

—Espera, ¿qué?—Peter preguntó sorprendido. 

—¿Por qué es eso, señor Strange?—Preguntó Kamala confundida.

—La hermana de Natasha, como ustedes saben, es la líder de Hydra, y por lo tanto tiene a todo un ejército de agentes y soldados de su lado. Ya que todavía puedo sentir las presencias de nuestros amigos en ésta parte del multiverso, sé que ellos siguen vivos, pero si intentamos atacar La Balsa en un intento de salvarlos, y fracasamos, ella sin duda los matará.—Strange declaró.—Por lo tanto, lo mejor es no intentar atacar La Balsa y...

—¡¿Eso es todo?!—Los amigos y novia de Peter lo miraron sorprendidos cuando él se levantó rápidamente del sillón, casi derramando su taza de chocolate caliente, la cual dejó en una mesita al lado del sillón en el que estaba.—¡¿Dejamos que toda mi familia sea torturada y mantenidos como prisioneros por mi tía la Nazi Psicópata?!

—Peter, cálmate.—Strange frunció ligeramente el ceño.—Quiero ayudarlos tanto como tú, pero, por el momento, no tenemos nada que hacer... solo queda esperar y...

—¡NO!—Peter gritó apretando los puños.

—Pete...—MJ jadeó sintiendo un apretón en el pecho.

—¡No quiero esperar!—Peter dio un furioso pisotón al suelo.—¡Ellos deben ser salvados lo más pronto posible! ¡No podemos simplemente mantenernos quietos y no hacer nada! ¡¿Qué clase de héroes seremos, entonces?! ¡Mi madre ha pasado más de veinte años escapando de esa mujer Melina, y ahora que ella la ha atrapado, quién sabe lo que le va a hacer!—Había enojo y desesperación en su voz.

—Peter—Strange se levantó y vio a Peter como un adulto regañando a un niño el cual estaba haciendo un berrinche.—, ellos son de los héroes más fuertes que hay. Lo que sea que les hagan ahí, ellos estarán bien. Especialmente tu madre. Estoy seguro de eso. Ellos se mantendrán fuertes mientras que encontramos la forma de rescatarlos...

Peter gruñó, viendo con desdén a su tío, y se dio la vuelta. Los demás lo vieron entre sorprendidos y preocupados, y Strange lo vio apenado, mientras que él tomaba su máscara sin ponérsela y salía de la sala para luego salir, en busca de la puerta principal para irse del Sanctum Sanctorum. MJ se levantó rápidamente y corrió, siguiéndolo.

—¡Pete!

—¡¿Cómo se atreve?!—Peter chilló mientras que ambos caminaban por el pasillo.—¡Mi tío Strange no podría estar más equivocado si cree que no haré nada para rescatar a mi madre y el resto de la familia!

Equipo Catástrofe [#3]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora