Peter & Loraine

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Peter abrió la puerta y bufó molesto al ver quien se encontraba en el pasillo.

—¿Qué haces aquí, Wanda?—Se cruzó de brazos.—No recuerdo haber dicho tu nombre tres veces frente al espejo de un baño a las tres de la mañana.

Wanda rodó los ojos.

—Peter, mi hermana me envió para hablar contigo.

—¿Loraine? ¿qué quiere?

Wanda suspiró.

—Peter, lo que pasa es que Loraine tuvo una sobredosis. Estuvo muy grave pero ahora está mejor, descansando en la enfermería de la mansión, y me envió para pedirte que vinieras a verla.

—... ¿Eso es todo?—Preguntó indiferente de brazos cruzados. Wanda lo miró furiosa.—Perdóname por no preocuparme, Wanda, pero no veo porqué Loraine quiere que vaya a verla solo porque tuvo una sobredosis. Eso no será lo que la termine matando si es que algún día ella llega a morir. Estamos hablando sobre la chica que se levanta del suelo y recoge su propia cabeza tras ser decapitada. Literalmente.

—¡Pero Peter!—Wanda gruñó molesta.—¡Imagínate que Loraine no pudiera regenerarse! ¡Imagínate que no hubiera sobrevivido a ésta sobredosis! ¡Sabes que ella siempre te quiso mucho!

—Por supuesto. Me quiere tanto que saboteó mi primera relación al acostarse múltiples veces con mi primer novio solo para tener una oportunidad conmigo.—Peter rodó los ojos. Wanda apretó los puños.

—Solo... piensa en venir a verla, ¿sí?—Suspiró y se fue. Peter bufó y cerró la puerta.

El teléfono de Peter sonó y al ver el número de MJ sonrió y todo su enojo se fue.

—Hey tigresita~.—Dijo tras contestar, sentándose en el sofá.

—Hey Pete.—Saludó ella.—¿Cómo están las cosas ahí? ¿Han podido sobrevivir su primera semana sin Gwen y yo?—Rió.

—Sobrevivimos como podemos.—Rió.—De hecho ahora que lo mencionas, ya que Kamala sigue castigada y Shuri está visitando a su familia en Wakanda, anoche Harley, Harry y yo tuvimos una noche de chicos.

—¿Una noche de chicos, eh?—MJ rió entre dientes.—¿Y cómo la pasaron?

—Pues las cosas se pusieron un poco incómodas cuando Harley y Harry se pelearon a causa del videojuego que estábamos jugando. Luego se pusieron a besarse. Y luego se encerraron en mi habitación y yo dormí en el sofá.

—... Cuando vuelva te ayudo a quemar las sabanas.

—Gracias.—Suspiró.

—... Espera, ¿qué videojuego estuvieron jugando?

—Eh...

—Peter...

—... Mario Party...

—¡Peter, hablamos de esto! ¡Sabes cómo te pone ese juego! ¡La última vez que lo jugamos literalmente casi terminamos!

—Pues te aseguro que después de lo que vi anoche, jamás volveré a jugarlo...—Suspiró.

—... Hey, Pete, tengo que colgar. Se supone que los teléfonos no están permitidos durante horas de clase. Pero te aseguro que Gwen y yo estamos cerca de descubrir algo. Puede que solo llevemos una semana aquí, pero las demás chicas ya están empezando a confiar en nosotras, creo que lo suficiente como para dejarnos ser parte de su asamblea de brujas si es que hay una.

—Buena suerte, MJ la bruja adolescente!—Escuchó a MJ reír y luego colgó.





•••





—Vaya vaya vaya, miren quién está aquí...

—Cierra la boca Pietro. Solo estoy aquí para ver a Loraine.—Dijo Peter sin mirar a su ex mientras que entraba a la enfermería. Estaba vacía a excepción de Loraine, quien estaba sentada en una de las camillas, y hablando con Hank McCoy. Loraine lo vio sorprendida al notar su presciencia y una enorme sonrisa se formó en sus brazos. Le susurró algo a Hank y éste se fue no sin antes sonreírle a Peter a modo de saludo.

—¡Estás aquí!—Exclamó Loraine sentada en la cama con las piernas dobladas.—No sabes cuanto me alegra verte. ¿Cómo van las cosas en los Young Avengers?

—Calmadas, por así decirlo.—Peter se rascó la parte de atrás del cuello.—Kamala se está tomando un descanso de ser Miss Marvel y MJ y Gwen están en una misión en cubierto en Canadá, así que no ha habido mucha acción por así decirlo.—Peter suspiró.—Loraine, ¿por qué querías verme?

—Tuve una experiencia cercana a la muerte, solo quería ver a mi héroe favorito.

—Ahí vas otra vez con lo de "héroe favorito", y no tuviste una "experiencia cercana a la muerte", has sobrevivido a balazos a la cabeza, lo que sea que termine matándote no será una sobredosis.

Loraine rodó los ojos.

—¿Qué causó la sobredosis?

—Una combinación de varias cosas.

—¿Otra vez abusaste de tus medicamentos para la esquizofrenia?

—Tal vez...

—¡Lori!

Loraine sonrió de lado.

—Extrañé el escucharte llamarme así.

Peter rodó los ojos.

—¿Qué hay de tu mamá? ¿Cómo reaccionó ante esto?

—No intentará mandarme a rehabilitación de nuevo. Han sido tantas veces que creo que ya se cansó.—Suspiró.—Escuché a Pietro hablar con teléfono con ella, creo que planea obligarme a que me mude de vuelta a la vieja casa, pero sabe que no se puede porque soy la líder y no puedo dejar la mansión. Tal vez intente quitarme mis medicamentos.

—¿Incluso si eso significa que tus alucinaciones empeorarán?—Loraine se encogió de hombros.

—Mira eso, dices que me odias pero ahora mismo suena a que te preocupas por mí.

Peter frunció el ceño.

—Sí te odio, Loraine. A ti y a Pietro.

—Entiendo lo de Pietro, pero, ¿por qué yo?—Hizo una expresión de confusión con una falsa inocencia, poniendo su dedo en su barbilla para luego sonreír maliciosamente.—¿Por lo que pasó en el viaje a Hawaii en navidad? En mi defensa estaba muy ebria, y sabes que siempre he soñado con hacer eso con tu tío Tony y tu tío Steve, ¿puedes culparme?

—O tal vez por lo que hiciste cuando Pietro y yo empezamos a salir cuando tenía trece.

—Solo lo hice porque te amo, Peter. Y que sepas que después de eso jamás volví a acostarme con Pietro mientras que ustedes estaban juntos. No es mi culpa que él decidiera convertir a Wanda en su perra después de que yo ya no quise ser con quién él te fuera infiel.—Peter apretó los puños con furia.—... Oh, vamos, eso fue hace mucho tiempo, ya deberías superarlo.

—¡Es fácil para ti decirlo!—Gruñó.—Ugh, no sé porqué vine aquí. Lo que más quiero es que ustedes estén fuera de mi vida, pero por más que intente eso parece ser imposible. No tengo razón para hablar contigo, o con cualquier otro miembro de tu familia, si no es por temas relacionados con la alianza entre los Avengers y los X-Men.

Se dio la vuelta para irse y Loraine rápidamente lo tomó de la mano.

—¡Espera, Peter! ¡Olvidas algo!

—¿Qué?—Enojado, la vio por encima de su hombro.

—Mi beso de despedida.

Loraine jaló a Peter hacia ella, tomó el rostro de Romanoff entre sus manos y lo besó. Peter abrió los ojos con sorpresa y durante unos segundos su cerebro dejó de funcionar, como la primera vez que Loraine lo había besado, y cuando se dio cuenta de lo que estaba pasando puso sus manos en los hombros de la asesina y la empujó fuertemente. Miró a Loraine sorprendido y ella con una sonrisa de satisfacción se relamió los labios.

—Saluda a tu novia tigresa de mi parte.

Equipo Catástrofe [#3]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora