EL SALÓN DE LAS MELODÍAS (Huaze Lei)

🎶SETENTA Y NUEVE🎶

El resto de la semana y las siguientes del mes de enero, pasaron de prisa y con demasiada tranquilidad. No era hasta fin de año escolar, que la orquesta especial se volvería a presentar y los profesores se mostraban demasiado relajados con sus asignaturas. Era como la calma antes de la tormenta.

Cada fin de semana hibamos con los Wang, aunque Emmaline desaparecía ciertas horas los sábados en la tarde y los viernes llegaba a casa por su cuenta en la noche. Traté de no prestarle atención pues ella había dicho, que estaría haciendo videoconferencias con los abogados de vez en cuando.

El 15 de enero tanto ella como los tortolos, me prepararon una sorpresa con los Wang por mi cumpleaños, Dupont también se hizo presente junto con Alaric, fue una pequeña tertulia. Recibí llamada de los F4 y hasta una tarjeta de felicitaciones de mis padres (era lo mínimo que podía esperar de ellos). Fue ahí cuando me permití bajar la guardia y disfrutar del gran año que se venía. Y quizá, ese fue mi error.

La primer semana de febrero, solo veía a Emmaline durante las comidas y se disculpo por no poder ir a casa por el fin de semana. Lo curioso, fue que no se mostraba disgustada como lo había estado el mes pasado cuando se ausentaba, de hecho, hasta se veía emocionada por el fin de semana. No lo mencioné, me alegraba verla feliz y no quería arruinarlo, así que solo le dije que estaba bien pero que no hiciera planes para el viernes próximo. Ella se emocionó aún más y prometió estar libre.

Ximen y Meizuo, llamaron el fin de semana para ver los últimos detalles del plan, Julieta estuvo presente pues le había pedido ayuda para la ocasión.

-¿listo? - pregunto Ximen, estaba en su oficina que compartía con Meizuo.

-si, todo listo - les dije.

-ahora, los detalles finales - comenzó a decir Meizuo.

-¿detalles finales? Qué no todo ya estaba preparado - pregunto Julieta confundida.

Sonreí, los 3 habíamos reservado una mesa para ella y Alexander en un restaurante-Bar muy famoso en París y que por supuesto había escogido Ximen después de un análisis detallado de los diferentes lugares.

-si, detalles, uno muy pequeño -bromeó Meizuo.

-una pequeña reservacion en el Eiffel Bar, para dos mexicanos comprometidos - dijo Ximen.

Julieta se sorprendió y al principio no lo quizo aceptar, y cuando lo hizo, no paro de agradecernos.

Pará qué Ximen y Meizuo gastarán su dinero en alguien, ese alguien debía de haber causado gran impresión en ellos, como había pasado con Shancai y la vez que le amueblamos su casa.

El tan esperado 14 de febrero llegó deprisa, quizá por la emoción o por todo el movimiento que había en la academia. Desde temprano los y las alumnas del coro “angelical" hiban vestidos como ángeles, los que serían mensajeros de cupido vestían de rosa, rojo y blanco, y llevaban consigo canastas con rosas, dulces y tarjetas. También estaban los auténticos cupidos, con arco y flechas que molestarían a los solteros con su supuesto flechazo.

La academia entera, estaba decorada con corazones, cintas rojas y rosas, querubines y por los altavoces sonaban melosas canciones románticas de moda. En otros tiempos quizá hubiera estado apuntó de vomitar, pero la verdad era que por primera vez pasaba este festejo en la academia, otros años me hiba un día antes a casa con los Wang.

Llegué al comedor donde, si todo el año las parejas pasaban desapercibidas, hoy parecía que todos andaban de novios. Julieta y Alexander ya estaban en la mesa. Hasta el desayuno era dulce, panqueques con miel, muffins o cupcakes, chocolate caliente y fruta con miel o yogurt.

-¿cada año es lo mismo? - pregunté demasiado empalagado para comer algo más que café y fruta simple.

Julieta soltó una carcajada y Alexander la siguió.

-te dije que sería demasiado para él - dijo Julieta aún riendo.

-qué divertidos - comenté tomando mi taza de café.

-ya hablando enserio, en realidad, este año exageraron - respondió al fin, Alexander- el año pasado si hubo serenata y mensajería, pero no hubo tanto adorno ni desayuno como este.

-¿Dupont estará enamorada o el Consejo estudiantil si se puso de acuerdo? - pregunto Julieta dudosa.

-bueno, los rumores dicen que a Dupont se le ha visto muy feliz estos días - dijo Emmaline llegando recién.

En su bandeja de comida, traia un chocolate caliente, unos panqueques y un poco de fruta.

-sabes que opino de los rumores - dije no muy convencido.

Me sonrió y me dio un corto beso en los labios.

-bueno hay chances de que si este enamorada - razonó Alexander -, más de las que el comite de alumnos se haya puesto de acuerdo, creo que desde lo de halloween, el comité lo disolvió Dupont.

La verdad esque, desde mi fiesta de cumpleaños y quizá un poco antes Colette se había estado viendo con Alaric. Se le había escapado a Alaric la semana pasada y además había sido un poco raro que llegarán juntos a mi cumpleaños. Dupont, claro, no había afirmado o negado nada, quizá por el hecho de que Alaric era 2 años menor que ella o porque era su jefa. Siendo honestos, Dupont y Alaric serían buena pareja, ella había sido una chelista excepcional y el era el mejor violinista del mundo, ambos estaban enamorados de la música y sentían adulación y respeto por el otro.

-¿... Leí? - pregunto Emm.

-¿qué? - prespondi distraído.

-¿qué donde cenariamos esta noche? - pregunto de nuevo.

-ah, en casa - respondí sin detalles.

Quería que todo el día fuera una sorpresa para ella.