🎶OCHENTA Y SEIS🎶

628 73 13
                                    

-mi nombre es Nathaniel Bristol - se presentó, al ver que no le di la mano la recogió divertido - pero pronto escucharas de mi como Shì Nathaniel, primogénito de Shì Zhi Chao e Isobel Bristol, principal heredero de Shì-Tec, y hermano de Emmaline.

Me quedé estupefacto. No recordaba haber oído sobre el primogénito de Shì Zhi Chao y mucho menos sobre algún hijo perdido. Pero tenía sentido, ahora entendia de dónde la actitud, era idéntica a la del padre de Emmaline.

-esperaba aplausos, un poco de sorpresa o algo parecido - comentó ante mí silencio.

-la arrogancia viene de familia - dije.

-me parece que si - dijo sarcasticamente.

-no era pregunta - le espete. - ¿solo haz venido a dar una deficiente disculpa y a presumir tu árbol genealógico o hay algo más?

Me levante para abrirle la puerta e invitarlo amablemente a salir de mi casa. El soltó una carcajada.

-eres imposible, me agrada - dijo riendo, eso solía decir Emmaline y no pude evitar sentir un escalofrío- supongo que no quieres saber lo mal que ha estado Emmaline, bien no hay problema, me marchó.

Se levanto y se encaminó a la puerta, pero yo la cerré de un azoton antes de que el llegara a ella.

-¿qué pasa con ella? - pregunté más alterado de lo que me hubiera gustado, me estaba haciendo perder el control.

-ya nos entendemos - dijo y volvió a su lugar.

Espero hasta que yo igual llegara a mi lugar para seguir hablando.

-bueno, desde el día de su ruptura ella no volvió a hablarme, ese mismo día hasta me dijo hasta de lo que me hiba a morir - comenzó a explicar.

-y como no lo merecías - comenté sarcasticamente.

-la he visto un par de veces desde entonces, y solo por las dichosas videollamadas con los abogados -continuó ignorando mi comentario.

Así que, después de todo, lo que Emmaline me había dicho no era del todo una mentira más.

-intente hablar muchas veces con ella, pero en cada una me mandó por un tubo - siguió.

-¿después de quitarle todo lo que la hacía feliz, crees que te hablaría como si nada? - pregunté retóricamente.

-que curioso, eso mismo me dijo ella cuando me reclamo - chasqueo los dedos como si de un gran descubrimiento se tratara.

Yo le había dicho eso a ella cuando discutimos fuera de la oficina de Dupont, supongo que había ido a decírselo al verdadero culpable.

-en fin, en las veces que la he visto, ella no está del todo bien-prosiguio, esta vez su semblante cambio a uno más preocupado- Isobel es la única en contacto con ella y me ha contado que no la ha pasado muy bien.

>> ha tenido problemas incluso para sus clases, si sigue así la sacaran de la academia - continuó diciendo - no se que haga pero en cada videollamada se ve cada vez más delgada, hasta parece enferma - hizo una pausa dramática, seguramente exageraba- podría decir que parece estar viviendo un auténtico infierno...

Yo había estado pensando en que tan dependiente de ella me había vuelto, en cómo ella con su fortaleza y valentía estuvieron sosteniendome todo el tiempo. Jamás se me ocurrió que fuera al revés, ella había estado emocionada de vernir a la academia por que tenía la esperanza de encontrarme y lo hizo, después la academia y yo nos volvimos su bastón para soportar todo lo que su familia atravesaba. Y ahora, en el peor momento de su vida, yo me había marchado sin dejar que se explicara. Debía sentirse como su madre.

-¿esperaste 2 meses para decirmelo? - pregunté sintiendo cómo me hervía la sangre del coraje.

-en un principio creí que su pelea duraría unos días, pero claro el primer mes yo la vi como si nada pasara, pero comenzó a empeorar lentamente - explico como si fuera algo común.

No tenía nada a la mano para aventarle, pero ganas no me faltaron. Todo a mi alrededor giraba.

-¿algo más? - pregunté lo más tranquilo que pude.

Lo pensó un momento y dudo si decirme o no, al igual que su hermana no me diría las cosas completamente.

-oí que se acerca el concierto de cierre de curso - dijo y yo asentí- ya sabes como es mi padre, pedira un dueto y claro estará presente, debes arreglar las cosas para que Emmaline me perdone.

-¿y por qué habría de hacerlo? - volví a preguntar.

-porque escuché que tu padre es uno de lo más importantes accionistas de mi padre - comentó cómo si eso explicara todo y claro que lo hizo.

-si tanto crees conocer a tu hermana, sabrás que lo que yo diga o pida, no la hará cambiar de opinión - le respondí.

-y lo que tus padres puedan negociar no cambiará mi opinión -dijo, tenía la misma expresión que Shì Zhi Chao cuando hablo de mis padres.

Lo pensé un segundo, si hiba a arreglar las cosas con Emmaline lo haría bien, por lo que quizá si le contaba lo que planeaba su hermano ella podría ayudarme.

-de acuerdo - accedí después de pensarlo.

-esperaba una respuesta instantánea, pero bueno, creo que la lealtad hacia la familia no es tu fuerte - dijo poniéndose de pie.

-lo dijo el desaparecido - comenté.

-tenemos un trato Huaze Lei, tienes un mes- me sentenció y después el mismo salió del estudio.

Lo escuché despedirse de Julieta y Lian, para finalmente oír el click de la puerta al cerrarse. Todo lo que tenía en la mesa, lo avente al suelo. Emmaline estaba mal por mi culpa otra vez, el bienestar de mi familia estaba en juego y lo peor esque conocía tan bien a Emmaline como para saber que me odiaba, lo suficiente como para negarse a verme.

EL SALÓN DE LAS MELODÍAS (Huaze Lei) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora