🎶NOVENTA Y UNO🎶

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Como predije, el tiempo no era el necesario para ganarme la confianza de Emmaline de nuevo. Había seguido todos los pasos del "plan maestro" (como lo había llamado Alexander) e incluso, los tortolos habían logrado que Emm saliera de su escondite y comiera con nosotros, al menos por las tardes. La verdad, en un principio había sido muy complicado, tuve que hablar varias veces con Shancai para que me ayudara a ver el impacto que Emmaline tuvo en mi, hasta que por fin hallé el modo.

En los ensayos, de nos ser por la presencia de los tutores Emmaline y yo habríamos terminado gritandonos todas las horas de ensayo. Había estado provocándola para hacerla estallar y aunque lo logre una semana antes de la presentación, en realidad no había servido de nada.

El fin de semana previo, Nathaniel apareció de nuevo en casa de los Wang, prácticamente fue a recordarme el trato y a amenazarme una vez más. Afortunadamente, los ensayos y el plan habían avanzado; no había problemas con el sólo, ni con la orquesta, y poco a poco mejoramos en el dueto, aunque no podía decir lo mismo de mi relación con Emm. Pero, por la mejora en la presentación, cuando llegó el viernes, un día antes de la presentación, me tomé la libertad de volver a faltar al último ensayo. O ese era el plan.

-¡ahí, estas! - dijo Alaric cuando me descubrió apuntó de entrar a mi escondite de aquel día.- ya se que vas a esconderte.

-algunas cosas no cambian - respondí encojiendome de hombros.

-esta vez si, lo del dueto no está listo como se espera, es necesario el ensayo esta vez - me recordó.

-de acuerdo, vamos - dije tras pensarlo un poco.

-de hecho, debes buscar primero a la señorita Shì - me pidió cuando ya hiba de camino a los salones.

-¿por qué...? - estaba por renegar pero luego lo pensé mejor y accedí.

El martes, precisamente, había logrado que mantuvieramos una conversación normal antes del ensayo, y aunque, no fue como las pláticas de antes, sentí que realmente todo lo del último mes había válido la pena.

Tal como pidió Alaric, fui a buscar a Emmaline, sabía donde estaba y ojala fuera otro lugar; en la terraza había muchos recuerdos y quizá por eso ella siempre estaba ahí.

Pará cuando llegué a la terraza, no vi a nadie a simple vista, sabía que está ahí, así que avance un poco más, hasta que la vi: estaba de cabeza, con lo pies en la pared y las manos en el suelo, justo como yo le había enseñado.

-no sabía que aun te funcionará-le comenté.

Tenia los ojos cerrados, sin abrirlos se incorporó, solo cuando ya estuvo de pie me miró furiosa (algo normal en ella últimamente).

-¿se te perdió algo? - pregunto a la defensiva.

-Alaric quiere que hagamos un último ensayo, cree que está vez lo necesitamos - dije encogiendome de hombros.

-¿y como supiste que estaba aquí? No recuerdo haberte dicho - pregunto en el mismo tono que antes.

-bueno, yo conocí antes este lugar y después de todo es un lugar importante para ambos - hable de más.

-¡Oh, como no me di cuenta! - dijo sarcástica y luego añadió- quedate con el lugar.

Avanzó hacia la puerta a paso decidido, yo que la conocía bien sabía que en realidad sólo estaba fingiendo y que si la abrazaba en este instante, ella se soltaria a llorar.

Por reflejo involuntario, cuando pasó a mi lado, la detuve por el brazo, eso no le pareció divertido a ella y me miró con desprecio.

-¿qué haces? - pregunto.

-había algo que quería pedirte -respondí rápidamente.

-¿y quién eres tú para pedirme algo o para tocarme? -pregunto molesta.

Otra puñalada directo al corazón, fingiendo estar bien la solté, pero le insistí para que no se fuera hasta que yo le dijera que le pediría.

-mañana en la presentación, actuemos como si nada hubiera cambiado, solo nos enfocaremos en la música, ¿si? - le pedí.

-¿qué? ¿No quieres arruinar la oportunidad? - pregunto sarcástica pero, no me dejó responder- tranquilo tu futuro no se arruinaría por mi.

Dicho eso, se marchó sin dejar que le dijera nada más, quizá ella no lo arruinaría mi futuro pero su hermano si.

Me quedé unos minutos más en la terraza y después me obligue a ir al salón de prácticas. Alaric y Didier ya estaba ahí esperando, cuando llegue no tenía mucho de haberlo hecho Emmaline. Ensayamos el resto de la tarde, el ensayo general había sido por la mañana y lo habíamos hecho bien.

Pero no me preocupaba el ensayo, el día siguiente era el problema, si después del dueto no conseguía convencer a Emmaline, podía prepararme para regresar a China a disculparme con mis padres. Pero, eso tampoco me preocupaba, lo que realmente me hacía estremecer de solo pensarlo, era que si no conseguía que con la melodia Emm se diera cuenta de que la amaba, la perdería definitivamente y no estaba preparado para eso, ni ahora ni nunca.

Después del ensayo, me reuní con los tortolos en la cena.

-¿y bien? ¿Se logro? - pregunto Alexander optimista.

Nuevamente Emmaline no había ido al comedor. Yo, al llegar, me dejé caer en la silla y suspiré.

-aún no - dije resignado.

-aún tienes mañana -me animo Julieta.

-si, ¡arriba las esperanzas, Lei! - añadió su prometido mostrándose alegre.

Aún tenía mañana, pero porque tenía la sensación de que no era así. Ya no sabía si estaba ansioso o nervioso, lo que era seguro esque no pegaría un ojo en toda la noche. Quien sabe que pasaría al día siguiente.

EL SALÓN DE LAS MELODÍAS (Huaze Lei) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora