Amaia Domínguez García
León, Guanajuato, México
Yo lo voy a apoyar toda la vida, lo amo demasiado como para dejarlo ahora en este tremendo problema, mi hermana Ale, se equivocaba rotundamente, yo a Axel lo amo por sobre todas las cosas y mi apoyo lo va a tener durante toda la vida, por eso tengo que aprovechar mi memoria para sacarlo adelante.
–Yo también, me siento feliz y hoy me sentí muy afortunada por entrar tomada de la mano contigo a la firma, a pesar de lo que pasó con Ale, no le voy a tener miedo a nadie.
Aunque mi hermana haya sufrido al verme llegar con Axel, tomados la mano, eso ya no era de nuestra incumbencia, ella sola se había fabricado toda su novela romántica con Axel, cuando él nunca le correspondió en nada, ni siquiera se había atrevido a verla diferente.
–El afortunado soy yo, tú eres la mejor de las mujeres y te amo Amaia, eso nunca lo vayas a dudar mi amor.
Axel y yo, nos relajamos un poco y nos estábamos consintiendo, nos estábamos besando y regándonos mucha ternura, cuando escuchamos que alguien tocó con mucha fuerza la puerta del departamento y eso nos sobresaltó, Axel se puso de pie de un salto y abrió la puerta de la recámara para ir a ver quién era.
– ¿Quién es? – Dijo Axel antes de abrir la puerta.
Claro, no iba a abrir antes de preguntar, ahora no sabíamos con qué nos íbamos a encontrar, con cada cosa que había la loca de Cecilia no nos podíamos arriesgar. Así que yo también debía estar preparada para lo que se pudiera presentar, salí y me quedé en la puerta de la recámara para supervisar lo que pasaba, escuché que se trataba de una entrega.
–Mensajería privada, traemos un sobre para el licenciado Axel Vega – Dijo una voz.
Axel abrió y firmo de recibido por el sobre y yo salí de la recámara para abrazarlo, él entró al departamento con el sobre en mano y de inmediato lo abrió y en él venía una fotografía mía, cubierta de sangre y una amenaza que decía que yo moriría, nos quedamos ambos de una pieza y en ese momento el teléfono de Axel sonó y él tomó la llamada.
–Axel, mi amor soy yo Cecilia – Se escuchó del otro lado de la línea – Te hablaba para saber si recibiste mi paquete, espero pienses bien las cosas o de lo contrario tu novia, acabará muerta en mis manos.
Cecilia estaba totalmente fuera de sus cabales, esto lo que había mandado es una amenaza directa, me estaba lanzando una amenaza de muerte, no quería volverla a ver nunca más en mi vida, está completamente loca y sé que no le va a temblar la mano.
–Estás demente, Cecilia – Axel me sentó en sus piernas – Sí tocas a Amaia, no respondo.
–Ya llevo un muerto, te aviso que maté al abuelo de la güera y sigue tu noviecita.
Cecilia se había vuelto completamente loca, y a Axel y a mí, se nos heló la sangre con lo que dijo del abuelito de la güera, Axel cuando colgó con esa loca empezó a llamar a la güera y no tuvo respuesta.
–Axel, esto que dijo esa loca es muy serio – Me abracé a él – Ella le causó el infarto al abuelito de la güera, recuerda que ella te había reclamado cuando Cecilia fue a hacer su chisme a Autlán.
No me quería ni imaginar cómo estaba mi amiga en estos momentos y más porque ella no podía regresar a Autlán, con todo lo que había provocado Cecilia allá, su familia no le iba a permitir estar cerca de su abuelito, no se iba a poder despedir de él.
–Sí, Amaia, eso me preocupa que lo que dice esta demente sea cierto y ahora más que nunca tengo que cuidarte, cariño. Lo siento mucho, pero contrataré más escoltas y tendrás que acostumbrarte.
Todavía no me acostumbraba a los guardias que teníamos, para que ahora Axel vaya a contratar a más personal de seguridad, no me sentía libre, ellos siempre me cortaban mi privacidad, tendríamos que encontrar otra forma para que yo estuviera lejos del alcance de Cecilia.
–No, Axel, eso no lo quiero. Me siento invadida en la privacidad y no me gusta que me siga nadie.
–Amaia, eso no está a discusión, cariño. Cecilia está loca como ya sabemos y no dejaré que te pase nada, lo bueno de todo es que ella misma con sus amenazas se está hundiendo también, porque podrá quitarme todo, pero limpia no se irá.
Entonces no me iba a quedar de otra que meter todas las materias en línea, tampoco me iba a exponer para que esa mujer me hiciera daño, ella estaba loca y no se iba a detener. También Axel se tenía que proteger, ella iba a querer dañarnos de cualquier manera, pues me he dado cuenta de que Cecilia sigue insistiendo en que Axel regrese con ella para parar todo esto y su mente al no recibir una respuesta positiva es muy vengativa.
–Axel, meteré todas las materias en línea, no quiero dejarte solo ahora que no vas a la firma, esa loca te puede dañar y eso sí que no podré soportarlo.
Que no se atreviera a tocarle un solo pelo a Axel, porque entonces sí me iba a conocer, no le permitiría que se le acercara, por eso los dos nos podíamos quedar aquí en el departamento mientras las cosas se calmaran.
–Cálmate cariño, sí, tienes razón, eso será lo mejor. Te amo, Amaia, te prometo que siempre te cuidaré y te protegeré.
Por supuesto que yo también lo iba a proteger a él, yo no me iba a quedar tan tranquila sabiéndolo afuera del departamento, con ese peligro que ahora representaba Cecilia, ella no iba a tener la oportunidad de dañarnos si estaba en nuestras manos protegernos antes, no se iba a salir con la suya, no se lo íbamos a permitir.
–Yo también a ti, mi amor. Además, esa mujer está peor de lo que pensé, si tanto quiere hacerme algo que lo haga, yo no le tengo miedo a esa basura.
Pero si ella pretendía acabar conmigo, yo también acabaría con ella, no se iba a quedar sin pagarla, me defenderé con uñas y dientes, porque tengo estas dos manos para hacer también de ella lo que tenga que hacer. No se la voy a poner fácil.
–No digas eso, preciosa. Nunca te tocará ni un cabello, yo no lo pienso permitir. Si ella quiere una guerra, ella la va a tener.
Estoy de acuerdo con Axel, Cecilia, que no pensara que los dos nos íbamos a quedar de brazos cruzados, mientras ella hace y deshace, y también en el juzgado nos íbamos a defender fácil no la iba a tener, así que se preparara porque los dos íbamos a ir con todo, pruebas tenemos de sus agresiones y amenazas.
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El socio de mi padre Cap 199 en adelante
Romancecontinuación del socio de mi padre a partir del capitulo 199 hasta llegar al fin