Unplanned Love (Feng Meizuo)

🧶CUARENTA Y CUATRO🧶

✨Mil disculpas✨
¡Hola de nuevo! Lamento mucho la demora en las actualizaciones, me atrase al escribir y también la reciente actualización del sistema de Android que se pre-instala en play store, me produjo problemas para abrir Wattpad; pero, he vuelto y prometo compensarse la demora pronto. Les dejo el Cap de hoy, ¡que lo disfruten!
Muy agradecida por el apoyo, la escritora✨

-¿y estaban apostando a quien sería la chica que te ha causado tantos problemas últimamente? - lo dijo más seria de lo que esperaba, lo que causó que todos quedáramos impactados.

-... bueno solemos apostar sobre todo-intento arreglar Ah Si muy torpemente.

-no le hagas caso, solo es un juego entre nosotros, nada serio - se adelantó Ximen con cara de susto.

Y luego, sin previo aviso, Alisa soltó una carcajada. Mire a los chicos y comencé a reír también, ella había jugado con la mente de ellos más fácil de lo que Ximen solía hacerlo en el bridge.

-¡solo bromeaba! - soltó Alisa entre risas - me alaga ser tan importante que los amigos del joven-anciano estén interesados en mi, además no son los únicos que hacen apuestas... - volvió a reír llamando la atención de la gente a nuestro al rededor pero eso no le imporo- debieron ver sus caras...

Ximen y Ah Si intercambiaron miradas molestas, debía agradecerle a Alisa por eso, ya era hora de que ellos tuvieran una lección; las chicas solo entendía parte de nuestra conversación pero aún así, aprovecharon para burlarse de ellos. La noche estaba mejorando a cada vez más.

-que divertida chica conociste - dijo sarcástico Ah Si, obviamente le molestaba ser objeto de burlas, pero yo lo estaba disfrutando.

-es más divertida cuando la tomas por sorpresa - confesé sin pensar.

Alisa me miró, no estaba seguro de que estuviera sorprendida o alagada, solo sabía que yo acaba de abrir la boca de más y eso me traíria problemas.

-bueno, en ese caso, mejor te vemos después, parece que tienen mucho de que hablar - dijo Ximen y me guiño el ojo, tremendos amigos que tenía - iremos a saludo a los socios, diviértanse.

Y una vez más, Ximen había logrado mover todo a su favor, me comenzaba a sacar de quisio, ya vería como hacerlo pagar.

-interesantes amigos tuyos - se burló Alisa en cuanto se marcharon. - esperaba que fueran los clásicos ricos antisociales.

-dejaré pasar el insulto - dije sarcástico.

-no era un insulto - de quejo haciendo una mueca - bueno, no soy buena haciendo cumplidos o dando las gracias, así que... - vaciló, hasta el momento no me había dado cuenta de que llevaba las flores en la mano - ojala hubieras entregado este ramo en persona, el chiste de un regalo así era que lo entregues personalmente, no un mensajero.

Abri la boca, listo para responderle que en realidad sí había querido entregárselas en persona, pero que habia dudado que fuera lo correcto, considerando que...

-aún así es un lindo detalle - dijo alguien llegando por detrás de mi.

Gire a ver quien era y cerré la boca de golpe por la sorpresa. ¿Qué hacía Mi-suk aquí?

-¿el cisne blanco, verdad? - pregunto Mi-suk con una sonrisa amable, la misma con la que la conocí.

¿Desde cuando había llegado? ¿Habría escuchado todo? ¿Los chicos la habían visto?

-si, Alisa Romanov, un placer - saludo Alisa devolviéndole la sonrisa.

-el placer es mío, soy la doctora Bae Mi-suk, la novia de Meizuo - se presentó Mi-suk.

No, en sus últimas palabras no había ni celos ni nada, como si el hecho de que dijera que era mi novia fuera insignificante a lado de su nombre y grado. No sabía cómo sentirme antes eso, solo algo estaba claro, ella había escuchado todo.

-¡wow! Jamás imagine que el señor Feng tuviera novia, quizá lo juzgue muy rápido - comentó Alisa, había sorpresa en su voz, un poco de tristeza y quizá diversión, aunque su firmeza y sonrisa son flaquearon.

Esto estaba muy alejado de lo que yo había planeado, yo revise atentamente la lista de todas las personas que habían comprado entradas al evento y Mi-suk no era una de ellas. No temía que se encontrarán y conocieran, temía que Mi-suk se enterara de la verdad.

-no te preocupes, entiendo que Meizuo no me menciona nunca - explicó Mi-suk, ¿por qué era tan comprensiva? - pero me alegra que te haya obsequiado flores, estuviste grandiosa en el escenario, jamás vi una presentación tan conmovedora.

-¡ah, muchas gracias! - respondió Alisa.

Me había dejado completamente fuera de su conversación y no sabía si eso era necesariamente bueno o malo. Quizá era bueno, pues podría hacer un repaso mental de las confirmaciones de los asistentes: no había nada fuera de lo normal, el apellido Bae no estaba por ningún lado, no entendía como Mi-suk había entrado y porque no lo había visto siquiera en la entrada. Algo había pasado por alto.

-... Ojala nos veamos después, un gusto hablar contigo - se despidió Mi-suk de la bailarina.

Al parecer Alisa se había excusado y había logrado marcharse, la vi partir sin que me dijera nada en particular. ¿Por qué no me había dicho nada?

-se nota que es muy agradable - comentó Mi-suk cuando Alisa desapareció de nuestra vista, su tono era amable, no era una crítica era realmente un halago- le agrada a tus amigos, es talentosa y ha conseguido hacerte reír... Es grandioso.

-¿a que te refieres? - pregunté fingiendo no entender, era obvio que lo hacía, yo lo sabía y ella también.

-ya no he logrado hacerte reír, si a caso haz sonreído un par de veces es demasiado - siguió Mi-suk ignorando mi pregunta - aunque creí que aquel beso había significado algo, quizá al fin era mutuo.

-Mi-suk... - comencé a decirle. Ciertamente, no tenía idea de qué debía decir, una disculpa no arreglaría nada, le había hecho lo mismo que me había hecho Caina, aunque peor.

-¡señor Feng! Varios asistentes solicitan su presencia - interrumpió Akiko, llegando casi corriendo a mi lado.

Había olvidado por completo que estaba haciendo, se había sentido como si el mundo se limitará a mis amigos, Alisa y Mi-suk, cuando lo cierto era que estaba a la mitad de un trabajo. Todo estaba transcurriendo muy rápido, no entendía lo que acaba de pasar y apenas si podía pensar en otra cosa que no fuera que acaba de lastimar a Mi-suk y quizá... Quizá hasta había decepcionado a Alisa.

-creo que mejor hablamos luego, tienes trabajo y yo puedo esperar - dijo Mi-suk con una sonrisa tranquilizadora.

¿Por qué, a pesar de todo, seguía siendo tan comprensiva?