🧶SETENTA Y DOS🧶

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Tuve que explicarles mi encuentro con Jing, de principio parecían alegres por saber que volvía, pero conforme les conté sobre mi platica con ella su expresión cambió de alegría a preocupación. Todos sabíamos que ella se había comprometido hace un año o poco más, pero jamás recibimos invitación a la boda, por lo que pensamos que al final no se había dado, lo cual era bueno porque Lei por eso había aceptado la beca en Francia para tratar de olvidarla o quizá porque esperaba encontrarla allá, no estaba seguro. Pero ahora todos coincidimos en que a Lei le estaba yendo muy bien como para que ahora apareciera Jing de la nada y cambiará eso.

-pues tendremos que fingir no saber nada de Lei - respondió Ah Si pensativo cuando termine mi narración.

-por lo menos fingir que solo sabemos que esta con sus padres y que tenía asuntos que arreglar y por eso no vendrá, en caso de que Jing pregunte por el, si la llegamos a ver - corrigió Ximen en el mismo tono dudoso.

-la verdad no creo que los busque, les digo que parecía un poco rara y aquel chico que dice ser el hermano de Emmaline no me da buena espina - les recordé.

-mantengámonos alerta, es lo único que podemos hacer - dijo Ximen - si Jing planea ir a Londres para año nuevo, fue buena idea que le dijeras a Lei que nos viéramos en Canadá, seguro pasará navidad con la familia de Emmaline

-bien, mantengamos esto entre nosotros, Shancai no terminó en buenos términos con Jing y si se entera que volvió, esto podría empeorar - añadió Ah Si.

No había falta que lo dijera, debíamos ser los únicos que supieran y por lo que vi en Jing, ella tampoco pretendía que más gente se enterara de su regreso, algo se traía entre manos junto con el tal Nathaniel.

Lo único bueno de la situación de Jing, fue que se distrajeron lo suficiente para olvidar lo de Alisa, estaba corriendo con buena suerte, pero sabía que no por mucho tiempo. Y, ni siquiera duró más allá de unas horas, pues por la tarde, después de salir de casa de Ah Si me encamine a la galería para la última presentación de Alisa, sería un evento de cierre así que ya hiba preparado con el traje para la ocasión.

Llegue al lugar y Akiko, como era su costumbre me esperaba en la entrada.

-llega tarde - saludo mirando su reloj.

Faltaba exactamente una hora para el inicio del evento, pero yo tenía que haber llegado dos horas antes, si tan solo a Ximen no se le hubiera ocurrido soltarse a contar sobre lo grandiosa que era su relación con Xiaoyou ahora que ya no discutian de nuevo.

-¿esta todo listo? - pregunté lo más amable que pude, últimamente no podía soportar la presión de siempre.

-si, solo necesita firmar el acta de los del departamento de utileria y en 10 minutos llegan los de audio y video - me explico pasándome unas formas que había que firmar.

Hice lo que me pidió y me fui a mi oficina a revisar que todos los asistentes estuvieran confirmados, Akiko tenía la relación en su tableta que llevaba consigo, pero prefería estar en mi oficina alejado y mentalizandome para la noche que me esperaba.

-sabes este si que es un buen sitio para esconderse - hablo alguien desde mi oficina.

Apenas había abierto cuando la voz me sobresalto, sabía quién era, me acerque a encender la luz y la vi, estaba sentada con la mitad de su traje del primer acto, estaba preciosa.

-¿de nuevo te escondes de Ivanov? - le pregunté un tanto divertido.

Los últimos días solo la había visto unas cuantas horas antes de su presentación, habíamos hablado por teléfono, pero yo había procurado mantenerme ocupado con el trabajo.

-no del todo, te estaba buscando - respondió, se le veía muy cómoda en mi silla.

Me acerque y fui directo a la computadora, de verdad tenía que revisar la lista de invitados.

-¿a mi? - pregunté sin apartar la vista de la pantalla.

-no, al Rey de Roma, pero me debo conformar contigo - respondió sarcástica.

-aja... - respondí distraído, parecía que todo estaba en orden, así que...

Su delgada mano se coloco debajo de mi barbilla y con un tierno y suave movimiento me obligó a mirarla.

-me haz estado evitando desde que Nadenka nos descubrió, ¿no crees que es muy infantil que lo hagas? - me dijo, ahora la tenía frente a frente.

-no te estoy evitando, solo me atrase con el trabajo - mentí, es decir, si tenía trabajo por montones pero igual la estaba evitando.

-si, claro - respondió ella haciendo una mueca - no se que fue lo que te asunto más, el saber que tu cliente sabe de lo nuestro, la presión social o si yo misma, pero necesito saberlo antes de subir al escenario...

-¿por qué con tanta urgencia? - quise saber, era un intento para cambiar el tema.

-porque si quiero expresar verdaderas emociones, necesito sentirlo - explico en tono de obvio, quizá si lo era - así que, dime.

-es un poco de todo, excepto por ti - respondí vagamente tras pensarlo, ella me miró esperando saber más, suspiré y me enderece frente a ella (había estado inclinado todo este tiempo) - me esperaba una prueba pero no de Ivanov, lo que no esperaba era saber que todo estaba planeado, que hasta nuestro primer encuentro quizá fue producto de un plan no de una causalidad, pero de verdad que nada de tiene que ver contigo.

Alisa me analizó un segundo y luego de un salto dejó mi silla y me enfrentó de pie.

-Meizuo Feng, para ser un chico adicto a hacer planes me sorprende que te disguste que todo el mundo haya tenido sus propios planes - me reprochó, a veces olvidaba que era mejor que yo - si lo nuestro fue casualidad, destino, un plan macabro o lo que fuese, ¿de verdad importa? ¿De verdad tanto cambiarían tus sentimientos por mi?

-no...-respondi sin pensarlo dos veces, mi boca me había traicionado - no, no cambiarían lo que siento por ti, pero tampoco es que me agrade que las cosas se hayan dado así

-a mi parecer, solo te molesta no haber sido tu el que lo pensó - dijo ella cruzandose de brazos, quizá tenía razón, pero eso no era todo - Meizuo Feng, lo que yo siento tampoco cambiaría por ello, ni por la distancia, ni el tiempo, ni si fue el destino o fue planeado, lo que importa es que...

Te amo

Unplanned Love (Feng Meizuo) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora