🧶CINCUENTA Y SEIS🧶

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-¿y si realmente lo hice para herirlo?

-¿qué? ¿Por qué lo harías? - pregunté dejando caer nuevamente a Ximen.

-idio-hip-ta... - se quejo él al estar de nuevo en el suelo.

-no, no lo hice por eso, solo planteaba ese escenario - se apresuró a corregirme.

-¡Dios! He dejado caer a Ximen por esa broma - dije molesto regresando por mi amigo.

-lo siento... - se disculpo intentando no reír, algo me debía que tenía una gran razón para esto - bajare en 10 minutos

-date prisa - le rogué.

Colge y guarde el teléfono, Ximen esta consciente de sí mismo, pero no fue hasta que se empezó a reír que me di cuenta.

-¡deberían darme un Oscar por esto! - comenzó a reírse y se paro el solo.

-¿estuviste fingiendo todo este tiempo? - le reclame sorprendido.

-si, bueno no al principio - explicó divertido - sabía que Xiaoyou no bajaría a hablar conmigo hasta que no viera que estaba mal, por no decir pésimo, así que mientras me sermoneabas en casa pensé en este plan.

-¡oye tu! ¿Sabes lo que cancele por venir a ayudarte? - me queje furioso caminando a mi auto, que se las arreglara para volver a su casa solo.

Había sido su conejillo de indias por no decir su carnada, me ofendia, yo bien pude haber actuado para ayudarlo y lo peor, le había cancelado a Alisa solo por este show que se creó el solo.

-¡te compensare! No seas tan gruñó y sigue el juego, por favor - me suplico aun divertido por su engaño.

Y aquí es donde me pregunto: ¿cómo es que Ximen y Xiaoyou pueden ser tan pareceridos y aún seguir juntos? Ambos eran manipuladores cuando así lo quieran, son pacientes para lograr su objetivo y lo que daba escalofríos, ambos parecían ser personas buenas, pero eran peores que el mismísimo diablo (yo que conocía el lado oscuro de Ximen podía confirmarlo y con Xiaoyou, bastaba con recordar lo que había dicho horas antes su novio para saberlo). Eran el uno para el otro.

Al final acepte y le abrí la puerta del copiloto a mi amigo, el cual, cuando vio que Xiaoyou estaba por salir entró de nuevo el papel de borracho sin remedio.

-gracias, ahora es todo tu... - comencé a decir.

-su-hip-be - le ordenó Ximen a su novia.

Ella me miró confundida, me encogi de hombros y mientras ella subía al auto mire a Ximen, este me guiño el ojo. La pagaría muy caro, ahora resultaba que tenía que ser su chófer. Entre quejas silenciosas subí al auto y comencé a conducir por la ciudad hasta la casa de Ximen; nadie habló, solo se escuchaban las llantas correr sobre el pavimento.

30 minutos después ya estábamos en su casa. Lo ayude a bajar con Xiaoyou siguiendonos.

-me debes una - le dije en voz baja esperando que su novia no nos escuchara.

Entramos a la casa, lo deje sobre el sillón y le quite todo lo de alcohol que pudiera tomar, si salía mal se pondría ebrio de verdad y esos si serían verdaderos problemas.

-bueno, el chófer tiene sueño, así que procuren no destrozar la casa cuando me vaya - dije burlon, Xiaoyou agradeció y Ximen me miro mal.

Mínimo me hubiera dejado escuchar el desenlace de este problema. Sin cita y sin el capitulo final de la dramática pelea de los XiaXi*.

Salí de la casa de mi amigo y conduje a la mía, al menos aún tendría tiempo de dormir. Estaba agotado, por todo lo que había ocurrido el fin de semana y por haber sido doctor Corazón por bastantes horas.

Una vez en casa, me escabulli sin hacer ruido para no despertar a mi madre y que me interrogara por mi ausencia de nuevo. En mi cuarto, tras cambiarme por pijama, me deje caer en la cama y en lo profundo de mis sueños.

-¡Meizuo! - me grito alguien sacándome de mi sueño.

Había sentido que apenas había cerrado los ojos cuando ya me estaban levantando. Era mi madre, parecía llevar un buen rato tratando de levantarme.

-es muy temprano - me queje ignorando por completo su intención.

-de hecho es la 1 de la tarde - respondió mi madre en aquel tono de autoridad.

Me levante de golpe y revise el reloj, me había engañado, apenas eran las 10 am. La mire mal, me deje caer en la cama y ella solo se rio.

-¿a que se debe que me despertarás? - pregunté tratando de conciliar el sueño.

Mi madre no solía venir a mi habitación tan temprano, además su simple presencia hacía irreal que realmente estuviera despierto.

-ah, Ximen ha estado desesperado tratando de comunicarse contigo, está esperando que lo deje pasar a tu habitación - explicó mi madre abriendo las ventanas.

-¿Ximen? - pregunté confundido, había esperado que para este momento el ya estuviera más que reconciliado con Xiaoyou.

-si, y no parece tener buena cara, ¿lo dejaste bebiendo solo? - me interrogó mi madre, ella realmente se preocupaba por nosotros, así que entendía su pregunta.

-no, su novia se quedó con el - respondí analizando lo que había pasado la noche antes.

-entonces debió discutir con ella porque es un auténtico desastre - me comentó mi madre - les traeré el desayuno, el pobre parece no haber comido en días.

Le agradecí y me levante para acompañarla a la puerta y dejar pasar a Ximen. Se veía terrible, de hecho ese adjetivo quedaba corto.

-el festival de las almas ya pasó - me burle ante la tensión que se sentía.

Me miró mal, tenía los ojos inchados y rojos, la ropa la llevaba arrugada y mal acomodada, el cabello alborotado y con la barba sin afeitar. Juraría que estaba peor que zombie.

-¿qué sucedió? - pregunté cerrando la puerta después de que entrará y se dejara caer en el sillón más cercano.

-es una larga historia - dijo y cerró los ojos, pero para mí sorpresa también se llevó el brazo a la cara. No era buena señal.

Espere pacientemente a que hablara, solo se escuchaban sus suspiros con voz temblorosa. Adiós a mi idea de salir con Alisa hoy o de ir al trabajo siquiera.


*combinación del nombre Xiaoyou y Ximen... ✨Escritora creando un nombre para el Ship✨

Unplanned Love (Feng Meizuo) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora