🧶CUARENTA Y TRES🧶

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Las puertas se abrirían en 3...2...1...

No puedo decir que una estampida entró por la puerta, fue más civilizado y con más tranquilidad. Los primeros en llegar fueron claramente los casa talentos esperando poder hablar con la directora Ivanov, seguidos de los fanáticos y exbailarines, luego las personas que solo buscaban un rato de tranquilidad pero nada tan moderno como el cine, luego unos cuantos conocidos artistas y de más. Mis amigos con los cuales no me detuve mucho porque era obvio que venían a comprobar quien era Alisa; luego los invitados especiales, inversionistas y aquellos que estuvieran interesados en hacer donaciones a la academia de ballet (esta era una de las razones por las que Grupo Feng era el mejor del mercado, no sólo organizabamos la presentación, también buscábamos inversionistas para nuestros clientes). Fue una larga hora de recibir personas, aunque no era obligatorio, me gustaba demostrar que estaba involucrado completamente en el proyecto.

-señor, la academia está lista... - me susurro Akiko cuando ya nos moviamos entre la gente.

-perfecto, quiero la primera llamada en 3... - comencé a decir, el equipo de sonido emitiría la clásica advertencia de que show estaba por empezar y los invitados se verían obligados a ir entrando al auditorio a ocupar su lugar- 2...1...

-distinguidos invitados, esta es la primera llamada para el inicio de la obra, por favor vayan ocupando sus respectivos asientos - decía la voz desde las bocinas escondidas - esta es primera llamada.

Como predije todo el mundo se movió al auditorio, incluido yo. 15 minutos más tarde sonaba la segunda llamada, donde aproveche para revisar que todos estuvieran bien organizados y que nadie faltara. Todo estaba perfecto. La tercera y última llamada fue para que todos guardarán silencio y el show comenzará.

Si me preguntaran sobre los primeros 20 minutos de la obra, no sabría que responder, mi mente hiba y venía buscando a Alisa, que no apareció hasta el acto número 4, con ropa distinta o por lo menos el tutu. Desde el momento en que apareció en el escenario no vi nada más que a ella, su rostro tenía expresión decidida, sonreía pero era consciente de cada uno de sus movimientos. Había algo que te hacia imposible dejar de verla, su cuerpo se movía como una pluma que cae al suelo, delicada y tranquilamente, aún así se notaba la firmeza de cada movimiento. Últimamente todo ella se me hacia hipnótico, pero si baile estaba en otro nivel.

Conforme avanzaba la trama del obra, su baile comenzó a transmitir emociones; comparado con la presentación de Lei y la chica heredera, aquí no eran golpes abruptos de momentos y sensaciones, aquí eran ligeras oleadas de miedo, angustia, felicidad, tristeza y algo más. No podría describirlo aunque quisiera, de una presentación musical a un baile existían muchas diferencias, y justo ahora me gustaba más la pasividad del baile.

El lago de los cisnes era una obra que todo el mundo conocía al derecho y al revés, sin embargo cualquiera que mirara a mi alrededor se daría cuenta de todos los rostros sorprendidos y cautivados. Sobre todo cuando llego el momento del clásico baile  entre el cisne negro, el cisne blanco y el príncipe.

Con un final feliz y una sorprendente salida, acabó la función, el telón cayó y comenzaron los aplausos. Y la ovación de pie espero a que el telón subiera nuevamente y todo el casting estuviera presente, para darles un reconocimiento a todos por igual. Yo actuaba como el resto del público, pero había algo más, tenía la sensación que podría tener un padre que festeja a su hijo pero más intenso, realmente estaba orgulloso de Alisa, ahora entendía porque Ivanov le tenía tanta consideración y toleraba todos sus desastres.

-Akiko, cuando todos vayan saliendo, puedes... - comencé a decirle a mi asistente mientras seguía con los aplausos.

-¡por supuesto! No hace falta que me lo pida - me interrumpió Akiko.

Me había leído la mente, le estaba apuntó de pedir que le llevara a Alisa las flores que había preparado para ella. Le agradecí a mi asistente y con plena tranquilidad salí del auditorio junto con el público, sería hora de convivir con ellos y ser acosado por Ximen y Ah Si; ambos no tardaron demasiado en alejarme del tumulto de gente y llevarme con ellos. Hiban acompañados por su novia y esposa respectivamente.

-por favor, por favor, no nos digas que Alisa es el cisne negro - se quejo Ah Si en cuanto pudo.

-de hecho el blanco - corregí fingiendo estar serio.

-te lo dije - soltó Shancai dándole un codazo a su esposo.

-te toca pagar la cuenta mañana - se burló Ximen.

-¿en serio apostaron? No lo puedo creer - pregunté fingiendo que estaba ofendido.

-apostamos sobre Lei, ¿qué te hace tan especial para que no apostemos sobre tu vida? - me recordó Ah Si.

-¿apuestas? - pregunto alguien detrás de nosotros.

Sentí un escalofrío, no esperaba que estuviera lista tan pronto y menos esperaba hablar con ella el resto de la noche, había muchas personas que tenía que saludar. Esto no estaba planeado.

-tu debes ser Alisa Romanov, el cisne blanco, ¿verdad? - se adelantó Ximen pese a mi mirada que le lance en un intento por detener lo inevitable.

Alisa dio un paso y se paro a mi lado, las chicas sonrieron a modo de saludo (aún no dominaban el inglés y yo estaba tan acostumbrado a hablar en inglés y chino que había olvidado en qué momento usaba y en qué comentó otro) y sorprendentemente Ah Si la miro con buenos ojos.

-¡wow! No esperaba tener fans -bromeó la bailarina. - pero, ¿quiénes son?

-después de esa grandiosa presentación, era obvio - dije yo dándole ánimos y tratando de evitar cualquier comentario de Ximen.

Nada lo evitó y la ola de presentaciones comenzó, como esperaba fueron amables y hasta agradables, muy diferente a como se habían portado con Mi-suk, se los reprocharia después.

-¿todos amigos tuyos? - me pregunto Alisa sonriendole al resto.

-si, pero puedes ignorarlos, yo trato de hacerlo - respondí con media sonrisa.

-¿y estaban apostando a quien sería la chica que te ha causado tantos problemas últimamente?

Unplanned Love (Feng Meizuo) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora