No llegaron a los 200 votos 😢 pero no importa. Disfruten el capítulo.La manera de conducir de Keren era totalmente brusca e inestable. Era como si a un ciego se le hubiese ocurrido la fascinante idea de conducir una motocicleta en medio del tráfico.
Se movía de un lado a otro sin atreverse a echar un vistazo a los semáforos o a las calles. De pura suerte logró llegar cercade Central Park y se detuvo justo a tiempo, antes de que un camión recolector de basura le pasara encima y aguardó con impaciencia.
-Déjame en el sanatorio, por favor-le oyó decir a Kevin-ahí está Carla, quiero verla y de paso...
-Primero te vas a ir a cambiar a nuestra casa-interpuso Adam con seriedad-no puedes entrar a es lugar salpicado de sangre ajena.Arrancando precipitadamente, Keren no le dio tiempo de replicar y Kevin tuvo que cerrar la boca por el aire salvaje que le llegaba a la cara y le restregaba el polvo y la basura del ambiente.
Por muy emocionado que estuviere Kevin por motivo del beso desprevenido de Keren, no se sentía bien. Sabía que ella solamente lo había hecho por la adrenalina y no por ningún trasfondo romántico; además notó la expresión que adoptó cuando su hermano le preguntó sobre Set.
Y con ese pensamiento negativo, se dispuso a sujetarse del asiento mientras se dirigían a la casa de los McCall.****
Rabia, ira, coraje y desasosiego. Aquellas emociones juntas tenían invadido el cuerpo de Set, quien aun tenía el teléfono pegado a la oreja y escuchaba el sonido de la llamada colgada. Sus ojos aqua miraban a la nada y sus labios estaban apretados entre sí, dándole cierto parecido a una dura y delgada línea recta.
De pronto, la sensación de odio y decepción hizo que apretara el teléfono y lo guardara en su bolsillo.
Comenzó a respirar agitadamente y sintió vértigo.
Estaba a punto de darle una rabieta a mitad de la calle donde había personas inocentes que podrían resultar heridas por su culpa.
En todo ese tiempo se había estado controlando. Su carácter agresivo lo había tenido controlado pero en ese instante no podía mantenerse tranquilo después de escuchar las palabras de Keren.
Algo dentro de su pecho hizo erupción como un volcán que había permanecido dormido durante mucho tiempo y que ahora que volvía a despertar, aniquilaría a todo ser humano que se le interpusiera en su camino.
Miró al vagabundo, que estaba a varios metros de él, y con un arrebato de locura, corrió hasta el pobre hombre y lo sujetó del cuello, sometiendolo en el asfalto. El hombre se contorsionó bajo su agarre el intentó gritar, pero Set le golpeó la mandíbula de un puñetazo y el vago chilló.
No tenía nada en contra de ese hombre, claro estaba, pero en ese instante solo quería desatar su furia con alguien.
Situó su rodilla sobre la columna del hombre y recargó todo su peso sobre él.
-Si vuelvo a verte en este sitio cuando yo regrese, te mataré, ¿Okey? Así que levantate y lárgate a hacer tu casa en otra parte-le siseó en la oreja, enseñando los dientes como un felino.Lo liberó con severidad y lo observó desmontar su "casa" a toda prisa. Y cuando vio como arrastraba sus cosas con inquietud, le gruñó.
-¡Vete muy lejos!Al cerciorarse de que el hombre ya llevaba varias calles de distancia, se dejó caer bajo el maldito sol y se agarró las sienes con ambas manos.
-Demonios, Set.Dio un respingo al escuchar la voz de Jack y apretó la mandíbula. ¡No quería compañía! ¡Él quería matar!
-¡Qué haces aquí! ¡Lárgate!-le espetó con frialdad y Jack no se movió de su sitio.
-Sabía que no podía dejarte solo, amigo-le dijo con calma-¿Qué pasa?
-¡He dicho que te largues!-gritó Set y en un dejo de demencia, saltó sobre el pelirrojo y le dio dos fuertes puñetazos en la cara y luego lo sujetó de la solapas de su playera-no estoy de humor para tener compañía y por tu bien, te recomiendo que te largues. Estoy a nada de matarte justo ahora si no te vas, Jack.Los ojos del pelirrojo estaban desorbitados y miraba con horror a su amigo.
-Cálmate, por favor-le sujetó las manos con fuerza-tranquilo. No pasa nada, amigo.
-¡A mí nadie me dice que hacer!-farfulló y lo empujó lejos.
Set no tenía cabeza para lidiar con nadie.
Deseaba con todas sus fuerzas encarar a Keren y exigirle una explicación.
Le dio un puñetazo al poste de luz y sintió un calambre en sus huesos de la mano y muñeca, pero no le importó.
-¿Te sucedió algo?-inquirió Jack con la voz trémula y guardando su distancia.
Set volteó a verlo con fiereza.
-¿Que si sucedió algo?-rio el rubio con ironía-desde luego que sucedió algo. Pero eso no te concierne.
-Sé que eres un tipo de cuidado pero eres un amigo mío y quiero ayudarte.
-A mí nadie puede ayudarme. Estoy jodido, eso pasa y la única persona que pensé que me entendía me ha dado la espalda de la manera más cruel-confesó con los ojos expectantes y un poco llorosos-y quiero saber por qué me desechó de su vida.
-¿Por qué no vas a hablar directamente con esa persona?
-Porque está a millas de aquí y no puedo viajar porque mi cara está en todos lados-se mordió los labios y negó con la cabeza.
-Oh, ya sé de quién se trata-añadió Jack con sutileza-es tu novia, ¿verdad? La que alucina Marybelle.
-Sí-graznó.
-Ya te dije que hay que larganos-susurró el pelirrojo-ninguno de los dos está feliz con esa par de zorras rubias.
-Claro, como si fuera fácil. Tu cara no está en los más buscados-bufó, un poco más tranquilo.
El sol le había enrojecido la piel a los dos pero las mejillas de Set parecían estar ardiendo en lava.
-He pensando tanto esto de escapar, que la verdad ya sé que va a funcionar-alardeó Jack con una sonrisa, mientras que Set simplemente lo observaba con aburrimiento.
-No creo que necesite compañía, Jack. Lo siento.
-Yo puedo ayudarte.
-¿Y si te arrestan por estar conmigo?
-Bueno-rio-es mejor que estar con Meredith.
ESTÁS LEYENDO
Darker Beauty. Libro 2 (TERMINADA)
Mystery / ThrillerHa pasado 20 años desde la última vez que Egon Peitz, el peor asesino serial del mundo vio a sus hijos, un par de gemelos preciosos que procreó con su amor de toda la vida; Shelby Cash, quién fue asesinada frente a sus ojos. Ha pasado tanto tiempo...