Darker Beauty. Libro 2 (TERMINADA)

5 capítulo breve

》Muy lejos《

-No entiendo por qué Beatrice tiene que irse a Norteamérica. Yo no quiero que ande deambulando una chica americana y no ver a mi hermana-masculló Set White que en vez de llevar el apellido de su verdadero padre, llevaba el apellido de su segundo padre. Se llamaba Set Rex. Sus ojos aqua fulminaron relativamente a sus padres quiénes lo ignoraron.
-Beatrice eligió ser psicóloga y aquí no hay ninguna Universidad que ofrezca lo que ella realmente desea-le reprendió su madre, limpiando la mesa con recelo.
-Deberías estar feliz por mí-espetó Beatrice con los ojos en blanco-pero claro, nunca has estado feliz por mí. Siempre me regañas y me críticas y no entiendo por qué te sorprende que me vaya de aquí.
-No quiero que te vayas porque esa chica no me hará la tarea como lo haces tú, tonta-se burló y su padre le envió una mirada lacerante.
-Pídele disculpas a tu hermana, Set-le ladró.
-No.
-Hazlo o...
Set se levantó bruscamente de la mesa y tiró el vaso de cristal al suelo, asustando a su madre y a su hermana. Sin embargo, su padre también se levantó y ambos se miraron fijamente.
En esa casa siempre había confrontaciones a menudo, por lo que Beatrice levantó los cristales y tiró de las manos de su mamá para que se alejara de ahí ya que siempre Set y su padre discutían hasta llegar al grado de golpearse.
-¿O qué?-lo desafió con sus ojos aqua. Trenton Rex apretó los puños y sacudió la cabeza-lo sabía. Eres un idiota que no sabes como mantener a esta estúpida familia.
Entonces Trenton alzó el puño y se lo incrustó directamente en la nariz a su hijo, y este dio traspiés hacia atrás sujetandose el tabique, que siempre se rompía cuando alguien lo golpeaba.
-¡Aprende a respetarme, Set!-le gruñó Trenton enfurecido-soy tu padre, maldita sea.
-¡No lo eres!-gritó Set en respuesta. La sangre le escurria por toda la ropa-¡Mi padre se llamaba Norman White y jamás lo vas a igualar!
Dicho eso, se echó a correr a su habitación como alma que lleva al diablo.
La respiración de Trenton fue disminuyendo y se dejó caer en la silla con los nudillos enrojecidos.
Hacía tres años que Set sabía la verdad de su origen. Lola le había confesado parte del pasado estando ebria en una fiesta con los vecinos a una amiga suya de la casa continúa y Set, que acababa de llegar de su entrenamiento de Box la escuchó y al siguiente día los confrontó a los dos de una manera tan violenta que Beatrice salió corriendo a pedir ayuda tras la pelea que se creó.
Trenton solo era padre de Beatrice, no de Set.
Set desde pequeño fue violento pero lo quería como un verdadero padre pero luego de saber la verdad, el rechazo se hizo evidente.
Solo su hija no cambió en lo absoluto, pero comenzó a tener un mal genio por culpa de su hermano.
Y eso a Trenton le fastidiaba.
Esperó un momento para reflexionar y después se levantó para lavarse las manos.
Encontró a Lola mirándolo a través de sus ojos azules llenos de lágrimas. Beatrice estaba detrás de ella también mirándolo con sus grandes ojos verdes.
-Papá, no te sientas mal por lo que le hiciste a Set. Él se lo merece-lo animó y Trenton sonrió levemente.
-Ve a tu habitación, cariño. Hablaré con tu madre un momento.
Beatrice asintió y dándole un apretón de manos a su mamá, abandonó la cocina a toda velocidad.
Lola se limpió las lágrimas que habían comenzado a deslizarse por sus mejillas y gruñó. Tras veinte años, su cabello rubio se había maltratado, sus ojos azules ya no tenían nada de juventud y su carácter había empeorado considerablemente. Trenton por su parte, él mantenía aun su rostro varonil y su cuerpo más o menos musculoso como cuando era joven pero su carácter estaba endurecido. No quedaba nada de su antiguo yo.
-No me mires así-le dijo a su esposa con dureza-no es culpa mía que tu hijo me falte el respeto. Además, la culpable fuiste tú al embriarte de tal manera para soltar toda la verdad.
-¡Yo no lo hice a propósito y lo sabes! -exclamó molesta-fue un accidente.
-Escucha-dijo él, conteniendo la rabia en sus palabras-no voy a seguir tolerando estas faltas de respeto durante mucho tiempo, Lola.
-¿Piensas dejarme?-aquella pregunta tomó desprevenido a Trenton. Ella lo miró herida.
-No sé lo que quiero y debo hacer-se excusó y miró a otra parte que no fueran aquellos ojos azules llenos de sufrimiento.
-Entonces deja de hablar de Set como si no fuera tu hijo.
-No es mi hijo en realidad-le soltó con veneno y ella cerró los ojos, aguantando más lágrimas-es hijo de un puñetero asesino.
-Se convirtió en tu hijo desde el momento que fuiste a buscarme.
-Se convirtió en mi hijastro cuando te embriagaste aquella noche y él se enteró de todo por tu maldito descuido-le ladró con cólera.
Lola negó con la cabeza y recogió un pañuelo del fregadero.
-Eres demasiado cruel conmigo-susurró ella en un hilo de voz. Tenía un nudo enorme atravesado en la garganta.